Los reinos cristianos merindedes

1. Conquista

Fue muy rápida (al contrario que la romana). En pocos años controlan toda la Península Ibérica a excepción de la cornisa cantábrica. Fue una conquista fácil ya que los pueblos de Hispania no pusieron resistencia (para los romanos fue difícil porque tuvieron que someter a los pueblos) y fueron firmando capitulaciones (acuerdos) con nobles hispano-visigodos que les dejaban a los pueblos ser independientes. La población hispano-visigoda se sintió liberada de los lazos de dependencia y de la presión del sistema señorial. Desintegración de la monarquía hispano-visigoda. Llegaron a Hispania unos 7.000 invasores, no eran muy numerosos.

EL EMIRATO DEPENDIENTE DE DAMASCO (711-756):

Inicialmente la península quedó estructurada como un emirato dependiente del califato omeya de Damasco. Al -Ándalus era, pues, una provincia dependiente del califato del Imperio Islámico, y sus emires o gobernadores eran nombrados desde Damasco. Durante los siguientes 45 años se llevó a cabo la ocupación militar, caracterizada por los enfrentamientos entre los diferentes clanes árabes y entre estos y los bereberes.

Finalizada la conquista el repartimiento de tierras provocó los primeros conflictos entre árabes, que se quedaron con las tierras más fértiles y los bereberes. Estas revueltas se multiplicaron a partir del 741, con la revuelta antiomeya que siguieron los bereberes andalusíes. Pero fueron sometidos con la ayuda de ejércitos del norte de África, que fueron recompensados con tierras.

La caída de los omeyas en Oriente tuvo consecuencias directas para Al-Ándalus. Un omeya, Abd al-Rahman logró escapar de la persecución de la nueva dinastía, los abasíes, e independizó el Al- Ándalus del Imperio musulmán.

EL EMIRATO OMEYA INDEPENDIENTE (756-929)

Abd al-Rahman tuvo el apoyo de los sirios andalusíes, y derroto al valí de Córdoba y se proclamó emir independiente. Rompíó los lazos políticos con el Imperio abasí pero reconocíó la supremacía religiosa de Bagdad.

Tuvo que hacer frente a una situación inestable:

  • En el interior: rebeliones de mozárabes y bereberes

  • En el exterior: con los francos y la pérdida de Girona (785)

Una vez sofocados todos los problemas, logró estructurar un estado unitario, que acabaron de configurar sus sucesores. Consiguió la división territorial del emirato y un ejército profesional mediante mercenarios que se manténían al margen de las disputas entre los distintos grupos.

A lo largo del S.IX estallaron nuevas revueltas, protagonizadas por muladíes (cristianos convertidos al musulmán) y mozárabes, la aristocracia árabe y gobernadores disconformes. Durante varias décadas la rebelión iniciada por un muladí reconvertido al cristianismo Omar ibn Hafsun, creo muchos problemas. En los últimos años del emirato el clima era de anarquía (territorios dominados por señores que no reconocían la autoridad el emir).

Aprovechando esta situación, los núcleos cristianos se expandieron hacia el sur.

EVOLUCIÓN POLÍTICA 929-1492

EL CALIFATO DE Córdoba 929-1031

El periodo de máximo esplendor económico, político y cultural se produjo con el califato de Córdoba, proclamado por Abd al -Rahman III, que rompíó el vinculo religioso con Oriente, y se auto proclamó califa en un intento de superioridad frente a los reinos norte africanos nacidos de la ruptura de Bagdad.

Durante esta etapa las relaciones con los cristianos fueron intensas, e incluso periodos de estabilidad. Abd al-Rahman III reforzó el aparato militar e hizo campañas contra los reinos cristianos del norte. Su sucesor al -Hakam II, hizo de Córdoba el centro cultural más destacado de Occidente. Su sucesor, Hisham II era un niño cuando heredo la corona, y su tutor fue Almanzor, que llevó a cabo muchas campañas contra tierras cristianas y extendíó su autoridad a los bereberes del Zagreb.

A partir de 1008 pasó por una etapa de grave agitación política por culpa de los enfrentamientos entre los aspirantes al califato, las presiones fiscales y los intereses de los grupos sociales más importantes. También contribuyeron los cristianos apoyando a alguno de los bandos rivales y saqueando sus ciudades. Como consecuencia de todo esto, en 1031 se decretó la abolición del califato, que se dividíó en pequeños reinos independientes llamados taifas.

LOS REINOS DE TAIFAS

El territorio de Al-Ándalus se fragmento en más de veinte pequeños estados, al frente de los cuales estaban las familias árabes, bereberes y eslavas. El número y la extensión de las taifas variaban según su poder y su riqueza, y por tanto de las posibilidades de mantener un ejército de mercenarios.

Los reinos de taifas empezaron a debilitarse y los reinos cristianos intensificaron sus saqueos y ataques. Esta presión obligó a pactar la paz mediante el pago de tributos llamados parias, pero las taifas se arruinaban y pidieron ayuda a los almorávides del norte de África, convirtiendo al-Ándalus en una provincia del Magreb (1086-1145). Los almorávides frenaron en un primer momento los avances cristianos, pero en pocos años se volvieron a desmembrar en nuevas taifas.

Una nueva etapa de reunificación se produjo con la llegada de los almohades (1146-1232), también de origen africano, dando los últimos momentos de esplendor a al-Ándalus. Pero sus ejecitos quedaron destruidos en la batalla de Navas de Tolosa dirigidas por Alfonso VIII aliado a Portugal, Navarra y Aragón. Los cristianos cada vez conquistaban más terreno y el reino musulmán quedó reducido al reino nazarí de Granada.

LA ORGANIZACIÓN DEL PODER Y LA SOCIEDAD.

El emir o califa tenía un poder absoluto tanto político como religioso. El primer ministro o hayid, estaba al frente de la casa real. El control de los territorios conquistados se llevó a cabo mediante la división en provincias o kuras, gobernadas por un Walí. Administraban la justicia los cadíes en nombre del califa.

LA SOCIEDAD

La sociedad andalusí estaba constituida por hombres libres, aunque caracterizada por u una clara estratificación social, basada en la diversidad étnica. Los conquistadores de origen árabe, se apropiaron de las mejores tierras, monopolizaron el gran comercio y ocuparon los cargos políticos y administrativos más importantes. Tras ellos en la escala estaban los bereberes, que eran los más numerosos, y que ocuparon tierras y cargos menos importantes.

Muchos hispanovisigodos, aunque podían seguir practicando su religión cristiana se convirtieron en muladíes o conversos, también gracias a las ventajas económicas y sociales. Pese a que un gran grupo se convirtió, hubo importantes grupos de mozárabes, y algunos adquirieron cierto grado de riqueza. También estaban los judíos, que vivían en barrios separados e incluso llegaron a alcanzar puestos destacados de carácter económico e intelectual.

A diferencia del resto de Europa, más rural, Al Ándalus se caracteriza por sus importantes ciudades. En el escalafón social de estas encontramos a la aristocracia árabe llamada jassa, y muy por debajo la masa popular llamada amma.

Por último nos encontramos con los esclavos, que trabajaban en el campo, y podían adquirir su libertad así iban a la guerra. En su mayoría eran del África negra y de Oriente.

LA ESTRUCTURA ECONÓMICA

Mientras la economía en Europa era de baja productividad y se centraba en el campo, la del mundo islámico tenía mucha actividad ya que estaba dedicada al comercio y tenia también gran actividad artesana.

  • Los musulmanes introdujeron cambios en la agricultura:

  • Sistema de aparcería: el propietario hacía un contrato con un aparcero para trabajar sus tierras. Al aparcero o sarik, trabajaba las tierras y tras cada cosecha le entregaba una parte.

  • Mejoras en la tecnología agrícola: sistema de acequias, norias de tracción animal, de aire o hidráulicas. Así se amplio las tierras para cultivo y con ello los productos cultivados como el arroz, la caña, los árboles frutales, algodón, lino, etc.…

  • La artesanía tenía un gran peso en las ciudades, con la industria textil, donde se trabajaba la seda, el lino, el cáñamo y la lana. También destacan la artesanía del cuero y la cerámica, la orfebrería, vidrio, armas y papel.

  • El comercio :

  • A larga distancia: la principal fuente de riqueza, monopolizaron el comercio del mediterráneo.

  • Importaban: productos manufacturados y de lujo: perfumes, pieles, joyas…

  • Exportaban: los mismos productos que importaban, lana, vidrio, aceite, vino…

  • Comercio local y comarcal: la actividad se localizaba en los zocos, situados cerca de las mezquitas.

  • La moneda: dos clases de monedas: el dinar de oro y el dírham de plata (de 1 a 10).Se difundíó por toda Europa.

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