Problemas del sexenio democratico

El reinado de Isabel II provocó una fuerte crisis motivada por la debilidad de los moderados al ser incapaces de aglutinar nuevos grupos, por la actuación de las élites económicas, políticas, militares e intelectuales agrupadas en torno al Partido Progresista y por la crisis económica desde 1864; así, se produjo el aumento del descontento popular y de pronunciamientos progresistas y el Pacto de Ostende, con el fin de acabar con el régimen y la dinastía.

En septiembre de 1868 se produce el inicio de la Revolución ‘La Gloriosa’ como una sublevación de la Armada en Cádiz dirigida por el almirante Topete, que recibe el apoyo de Prim y Serrano, y acaba extendiéndose a todo el territorio. También se produce la batalla de Alcolea, que supone la unión de Madrid a la sublevación y la marcha al exilio de Isabel II.

En octubre, se establece un gobierno provisional presidido por Serrano, con progresistas y unionistas, estableciéndose un sufragio universal, la libertad de imprenta, etc. Surgen los primeros problemas como el enfrentamiento con la Iglesia (libre culto/disolución de los jesuitas), el conflicto colonial (estallido sucesional cubano) y problemas económicos (establecimiento de la peseta, medidas librecambistas), etc.

El 6 de junio de 1869, se crea la primera constitución democrática del país, cuyas características son:

  • La soberanía reside en la nación.
  • La forma de Estado es la monarquía parlamentaria con poderes muy limitados.
  • División de poderes


    1. Legislativo: Recae en las Cortes, que aprueban las leyes, elaboran el presupuesto y controla al gobierno. El sistema era bicameral, con un Congreso de los Diputados, elegidos por sufragio universal directo masculino para mayores de 25 años, y un Senado que se elegía por sufragio indirecto.
    2. Ejecutivo: Recae en el Rey y en los ministros. El Rey es un monarca constitucional (reina, pero no gobierna). Los ministros son nombrados por el rey y están controlados por las Cortes.
    3. Judicial: Se establece la independencia de los tribunales y los juicios por jurado.
  • Derechos individuales


    Son la base de la Constitución. Recoge la libertad de opinión e imprenta, la propiedad privada, la seguridad personal, el sufragio universal, la libertad de culto, la inviolabilidad del domicilio y la correspondencia y los derechos de reunión y asociación.

Tras la promulgación de la Constitución, hasta encontrar un candidato a la Corona, se lleva a cabo la Regencia de Serrano, con Prim como jefe de gobierno. Este último tuvo que hacer frente a los siguientes problemas:

  • Desarrollo de los principios constitucionales: Había que modernizar la justicia, organizar la administración provincial y municipal y desarrollar la ley electoral.
  • Conflictividad social: Durante todo el Sexenio se producen muchos problemas sociales en la agricultura (‘hambre de tierras’), urbanos (motines debidos a la falta de alimentos), sublevaciones carlistas, movimientos independentistas en Cuba, etc.
  • Elección del monarca: Existían numerosos candidatos, y salió victorioso Amadeo de Saboya, por ser el menos problemático y por el apoyo de Prim.

En 1871 se proclama a Amadeo de Saboya rey de España, el cual reinará como Amadeo I, cuyo reinado solo durará dos años. Desde el principio fue un reinado caracterizado por su debilidad y por la progresiva pérdida de bases sociales y políticas a la vez que aumentaba la oposición. Además, Prim, su principal apoyo, fue asesinado.

La muerte de Prim supone el primer gobierno presidido por Serrano, y se celebran elecciones a Cortes con mayoría del partido del gobierno pero produce discrepancias en la coalición.


La oposición va en aumento por parte de:

  • Republicanos: Carentes de homogeneidad y solo unidos por la idea de la república.
  • Movimiento obrero: Cada vez más organizado a pesar de la represión del gobierno.
  • Carlismo: Tras la caída de Isabel II cobra un nuevo impulso, con una tendencia parlamentaria y otra extraparlamentaria, la cual cobra cada vez más fuerza e inicia una rebelión armada, que supone el origen de la III Guerra Carlista.
  • Élites tradicionales: En un principio apoyaron al rey, pero más tarde lo rechazan. Lentamente, se van organizando en torno al Partido Alfonsino, encabezado por Cánovas del Castillo, que planteaba la vuelta de la dinastía borbónica en el hijo de Isabel II, Alfonso.

Ante la situación de rechazo generalizado, se produce la dimisión de Amadeo de Saboya. Tras esto se proclama la I República.

El primer gobierno republicano presidido por Figueras decretó la amnistía, la supresión de las quintas y de los consumos. A su vez, se produjeron los primeros problemas, pues Andalucía y Cataluña proclamaban el Estado federal, se producía el avance del carlismo y la crisis del pacto de gobierno radicalmente.

También se celebraron elecciones a Cortes Constituyentes, donde hubo una mayoría republicana. Se establece una forma de gobierno llamada ‘República federal’, es decir, existiría un Estado central con autonomía de los Estados miembros.

Francisco Pi i Margall es proclamado presidente de la República tras la dimisión de Figueras, y se elabora una nueva Constitución, basada en la de 1869. Las principales modificaciones es el paso a una soberanía popular, un Presidente de la República configurado como poder relacional, mayor importancia al Congreso de los Diputados y separación de la Iglesia del Estado.

Ante la falta de reformas socioeconómicas, la conflictividad social aumenta con sublevaciones populares en Alcoy y Barcelona y aparece el cantonalismo, el cual planteaba construir un Estado federal.

Finalmente, el gobierno de Pi i Margall cesa y se nombra a Salmerón en su lugar. Este gobierno tiene posiciones más conservadoras, planteando la República unitaria y las primeras medidas para conseguir el orden, someter los cantones y frenar a los carlistas y al movimiento obrero.

Salmerón, por no firmar dos penas de muerte, dimite, y este pasa a manos de Castelar, que intenta restablecer la legislación republicana para consolidar el Estado.

El ejército tenía cada vez más importancia como consecuencia de la Guerra carlista y de la guerra de Cuba, a lo que se une el aislamiento internacional, pues la República solo era defendida por Suiza y Estados Unidos.

A finales de 1873, los diputados republicanos se oponen a Castelar y se teme un aumento de la radicalización, estayando con el golpe de estado de Pavía a principios del año siguiente. Esto supone el fin del Sexenio y el inicio de la Restauración, que mantenía el sistema republicano pero suspende la Constitución.

Serrano es nombrado jefe de gobierno con objetivos fundamentales como el restablecimiento del orden y la solución de los problemas financieros. Este gobierno servirá de transición y desarrolla la estrategia canovista de la Restauración Alfonsina.

El proyecto de Restauración se recoge en el Manifiesto de Sandhurst, firmado el 1 de diciembre de 1874 por el futuro Alfonso XII, cuya implantación se vio acelerada por el pronunciamiento del general Martínez Campos que significaba el fin de la I República y la restauración de la monarquía borbónica en la figura de Alfonso XII.

CONCLUSIÓN:


A pesar de los intentos democratizadores que supone el Sexenio, la clara oposición del ‘bloque de poder’ llevará a este al fracaso, imponiéndose la Restauración, siguiendo el modelo de Cánovas.

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