Territorios heredados por Carlos I

Carlos V o I: 1. Los dominios de Carlos V:


Austria, Países Bajos, Franco Condado, Corona de Aragón, Castilla, Navarra, América y la Corona Imperial de Alemania. Problemas internos: 2.1. Las Comunidades de Castilla. A- Oposición a la corriente autoritario-absolutista de la monarquía. B- Participan la burguésía, hidalgos, bajo clero y capas populares urbanas, frente a la monarquía y la mayor parte de la alta nobleza. C- Derrotados los comuneros en Villalar (1521), se crea una alianza entre la alta nobleza y el monarca. Castilla pierde sus “libertades”. 2.2. Las Germánías. A- Valencia. B- Conflicto de clases: burguésía, menestrales y campesinos frente a la opresión señorial.  

4.1. Sociedad

a- Es este un periodo de crecimiento demográfico. B- En la sociedad hay una progresiva obsesión por el ennoblecimiento, a la vez que surgen prejuicios sobre el trabajo manual y se desarrolla el culto a la limpieza de sangre.

4.2. Economía

A- El mercantilismo. Es la teoría económica imperante en Europa. Identifica la riqueza de un país con sus reservas de oro y plata. Para aumentar su volumen se recurre a: – Explotación minera. – Guerra, corso y piratería. – Para favorecer una balanza comercial favorable se establecen políticas proteccionistas de la producción nacional y el control de las importaciones y exportaciones. B- Política financiera. – El sistema tributario se caracteriza por su multiplicidad e incoherencia. O Rentas ordinarias. Sobre actividades económicas (alcabalas, almojarifazgo, montazgos, tasas sobre las importaciones…). Monopolios (papel sellado, sal, tabaco…). O Servicios votados en Cortes. O Contribuciones del clero (algunas comenzaron siendo extraordinarias y se convirtieron en fijas). O Caudales de Indias (quinto real, decomisos…) – Sistema de recaudación: o Arrendamiento (para los impuestos indirectos). Sustraía grandes sumas a la Corona. O Repartimiento (para los impuestos directos de carácter personal y la alcabala) – Gastos y déficit fiscal. – Los enormes gastos generados por la Casa Real, la burocracia cada vez más extensa y las guerras (el mayor capítulo de gastos con mucho), disparó el déficit. Se tuvo que afrontar recurriendo a: o Préstamos de banqueros, extranjeros en su mayor parte. O Venta de deuda pública (juros). O Venta de cargos y jurisdicciones. Sin embargo no fue suficiente y, pese a lo cuantioso de los ingresos, la Corona entró en una grave crisis financiera que llevaría a las bancarrotas sucesivas desde1557.

5. Política exterior


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.1. Primera etapa

Es una época de grandes éxitos diplomáticos y militares. Victorias en Italia frente a Francia y el Papado (Pavía, 1525; Tratado de Madrid, 1526; Sacco de Roma, 1527, Paz de Cambray, 1529; ocupación de Milán; defensa de Viena frente a los turcos… Todo ello culminado con la coronación imperial en Bolonia en 1530).

5.2. Segunda etapa

Marcada por numerosos enfrentamientos, con desigual fortuna: Contra Francia, contra los luteranos alemanes enmarcados en la Liga de Esmalcalda, contra los turco-berberiscos. Obtuvo un notable éxito con la toma de Túnez (1535), pero los fracasos, como el sufrido ante Argel o la paz de Crépy con Francia (1544), le impidieron atender a los asuntos alemanes, que se habían desbordado. 5.3. Tercera etapa. Centrada, sobre todo, en Alemania. Se intentaron dos vías para solucionar el conflicto religioso y político. En primer lugar una conciliadora, que fracasó, tanto en las diversas dietas imperiales (Worms, Spira, Augsburgo) como en el Concilio de Trento. Ello llevó a emplear la vía militar que, si bien proporciónó la brillante victoria de Mülhberg (1547), acabó igualmente el fracaso, lo que condujo a la Paz de Augsburgo (1555), que establecíó la división religiosa y precipitó la abdicación de Carlos.


Felípe II:



1. Los dominios de Felipe II

Recibe toda la herencia paterna salvo los dominios patrimoniales de la Casa de Austria y los derechos al Sacro Imperio, que pasan al hermano del emperador, Fernando. Desde este momento se divide la Casa de Austria en dos ramas: la española y la austriaca. Se ampliarán los territorios con conquistas en América y, sobre todo, desde 1580, con la incorporación de Portugal y su Imperio colonial tras la muerte del rey Don Sebastián en Alcázarquivir.

2. Política interior


2.1. Líneas directrices

A- Mantenimiento de la hegemonía de la Casa de Austria. B- Desarrollo del autoritarismo monárquico. C- Mantenimiento y defensa de la ortodoxia católica.

2.2. Principales problemas

A- La rebelión de los moriscos. Ante la intolerable represión que se venía incrementando desde los tiempos de Cisneros, acrecentada por los decretos de 1567, se sublevan. La represión fue especialmente cruel y acabó con la dispersión de los moriscos por toda Castilla. B- Las alteraciones de Aragón. Iniciadas por el “asunto de Antonio Pérez”, desemboca en un conflicto entre la autoridad del monarca y los fueros de Aragón.
Felipe II ordena la invasión del reino y en las cortes de 1592 recortó ampliamente la autonomía aragonesa. 

3. Política exterior

A la llegada al trono de Felipe II se abre una etapa belicista que consolida, entre 1559 y 1565, la hegemonía española en Europa. Se obtiene frente a Francia la victoria de San Quintín (1557), que obligó al país vecino a firmar el tratado de Cateau-Cambrésis, altamente ventajoso para España. Además, a partir de ese momento, Francia no es un peligro ya que se sume en sus guerras de religión. No obstante, la monarquía hispánica tenía abiertos diversos frentes: 3.1. El conflicto de los Países Bajos (1568-1668). La raíz del problema está en el enfrentamiento entre católicos y calvinistas, en la importancia económica y estratégica de la zona y en la recomendación hecha al rey por su padre de conservar a toda costa aquellas provincias, consideradas por el emperador el verdadero solar de su Casa. El conflicto supuso un verdadero desastre para España, que enterró allí sus riquezas y sus hombres. Al finalizar el reinado las provincias del norte, calvinistas, se habían independizado de facto , constituyéndose como Provincias Unidas (actuales Países Bajos). Las provincias del sur, católicas, se mantendrán bajo la égida hispana. El conflicto, con diversos avatares, se prolongará hasta 1648, cuando España reconocerá de iure la independencia de las Provincias Unidas. 3.2. El enfrentamiento con los turcos (1570-71). Verdadera amenaza para los intereses de los Austrias (ocupación de Hungría, amenazas a Viena, saqueo y piratería en las costas españolas), la política contra los turcos sigue dos líneas: – Fortificación y vigilancia de las costas españolas (medida, por lo demás, insuficiente para atajar los ataques piratas). – Intento de asestar un golpe definitivo al poderío naval turco. Para ello se crea la Liga Santa (Venecia, España y el Papado). La flota cristiana obtuvo el espectacular éxito de Lepanto (1571), que, aunque no acabó con el poder otomano, sí lo refrenó. De todas formas, el Mediterráneo irá perdiendo importancia estratégica y económica al desplazarse el centro de gravedad mundial hacia el Atlántico. 3.3. Contra Inglaterra (1585-1604). Las relaciones hispano-inglesas se habían deteriorado desde la llegada al trono de Isabel I, por el conflicto religioso, el apoyo inglés a los rebeldes holandeses y el hostigamiento a las rutas comerciales hispanas y a nuestras colonias. Degeneró en conflicto abierto desde 1585. La principal acción fue el envío de la Gran Armada , con objeto de invadir la “pérfida Albión”, pero acabó con un espectacular fracaso (1588).

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