Un Mundo en Crisis (1919-1939)
El período comprendido entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial fue testigo de importantes acontecimientos que redefinieron el panorama mundial. Esta era, marcada por la inestabilidad y la transformación, se caracterizó por:
- En la URSS, accedió al poder Stalin, quien instauró un régimen totalitario comunista.
- En 1919 se creó la Sociedad de Naciones con el objetivo de regular las relaciones internacionales y mantener la paz.
- La crisis económica de 1929 conmocionó la actividad económica de numerosas naciones, desencadenando la Gran Depresión.
- Se implantaron dictaduras y regímenes totalitarios, como alternativa al sistema democrático liberal.
- Se produjo una profunda crisis de valores y de conciencia en la civilización occidental.
La Unión Soviética bajo Stalin
A finales de la década de 1920, la Revolución Rusa comenzó su segunda fase: el estalinismo. Se denomina así al gobierno personal y totalitario de Stalin, caracterizado por una profunda transformación política, económica y social.
Evolución Política: El Estalinismo
El estalinismo representó la consolidación de un poder absoluto en manos de Stalin, quien centralizó el control del Estado y del Partido Comunista, eliminando cualquier oposición interna y estableciendo un culto a la personalidad.
La Economía Planificada
Stalin impuso un sistema económico basado en la planificación centralizada, con la creación de un organismo, denominado Gosplan, que centralizó la actividad económica a través de planes quinquenales. Estos planes se caracterizaron por:
- La colectivización del campo. La producción agrícola se organizó en granjas cooperativas colectivas (Koljoses) y en granjas estatales (Sovjoses).
- La industrialización planificada, que convirtió a la Unión Soviética en una de las principales potencias industriales del mundo. Se desarrollaron intensamente industrias clave como la química, la siderúrgica y la industria armamentística.
La Sociedad Soviética
La población experimentó un gran crecimiento demográfico. Por otra parte, la estructura social se modificó significativamente mediante:
- La reducción del número de campesinos, debido a la colectivización.
- El aumento del número de obreros industriales, impulsado por la industrialización.
- El nacimiento de una nueva categoría social: la intelligentsia (intelectuales y profesionales).
La Sociedad de Naciones: Un Intento por la Paz
La Sociedad de Naciones fue un organismo internacional creado tras la Primera Guerra Mundial, con el objetivo primordial de garantizar la paz y ordenar las relaciones internacionales. Contribuyó al mantenimiento de la paz internacional y a la seguridad colectiva al mediar en las tensiones surgidas entre vencedores y vencidos, aunque su eficacia se vio limitada por la ausencia de grandes potencias como Estados Unidos y la falta de mecanismos coercitivos efectivos.
La Gran Depresión de 1929
La década de 1920, conocida como los ‘Felices Veinte’, culminó en una de las crisis económicas más devastadoras de la historia moderna: la Gran Depresión.
Causas de la Crisis Económica
Varios fueron los motivos que condujeron a esta grave crisis económica global:
- La aparición de la sociedad de consumo, que impulsó una demanda insostenible.
- La superproducción industrial y agrícola, que excedía la capacidad de compra.
- Los bajos precios de los productos agrícolas, que empobrecieron al sector primario.
- Los capitales disponibles no fueron invertidos en la producción de bienes, sino en la bolsa con fines especulativos, creando una burbuja financiera.
El Crack de la Bolsa de Nueva York
El punto de inflexión se produjo en octubre de 1929, cuando se desató una venta masiva de acciones en Wall Street. Se vendieron trece millones de acciones en un solo día, lo que provocó la caída en picado de su valor. Era el famoso Crack de la Bolsa de Nueva York, también conocido como el ‘Jueves Negro’.
Extensión y Consecuencias de la Gran Depresión
El efecto del Crack de la Bolsa de Nueva York se extendió rápidamente a la Bolsa de Londres y, posteriormente, a las del resto de Europa y a Japón, con las siguientes consecuencias:
- Estados Unidos defendió sus productos frente al exterior mediante políticas proteccionistas, una medida que fue imitada por el resto de las naciones, contrayendo el comercio internacional.
- Los capitales estadounidenses invertidos en Europa fueron recuperados, desestabilizando las economías europeas.
- Las inversiones cesaron o se redujeron notablemente; esto provocó el cierre de empresas, lo que, a su vez, condujo a la quiebra de los bancos.
Se produjo una depresión económica sin precedentes, con millones de desempleados y una drástica caída de la producción y el comercio mundial.
La Lucha contra la Depresión: El New Deal en Estados Unidos
Estados Unidos fue uno de los países más castigados por la crisis económica. Ante esta situación, el nuevo presidente, el demócrata Franklin Delano Roosevelt, presentó un ambicioso programa económico y social conocido como el New Deal. Las principales medidas de este programa fueron:
- Ayudas a los agricultores mediante el pago de indemnizaciones y la regulación de la producción.
- Concesión de subsidios de desempleo a los trabajadores en situación de paro.
- Aumento de los salarios de los obreros y disminución del horario laboral.
- Intervención estatal en los bancos para restaurar la confianza y la estabilidad financiera.
- Oferta de empleo por parte del Gobierno a través de la realización de grandes inversiones en obras públicas (infraestructuras, presas, etc.).
El Auge de los Totalitarismos Fascistas
En este contexto de crisis económica y social, los totalitarismos de corte fascista, sobre todo el italiano y el alemán, consiguieron el apoyo de amplias capas de todas las clases sociales. En ambos casos, se implantó un Estado totalitario centralizado que se oponía radicalmente a la democracia liberal. Rechazaron, igualmente, el socialismo, el comunismo y el movimiento obrero organizado, y utilizaron estrategias de propaganda, censura y represión para sembrar el terror y manipular a las masas.
Los métodos de actuación de los regímenes fascistas se fundamentaban en:
- Rendir culto a un líder carismático (el Duce en Italia, el Führer en Alemania).
- Establecer una jerarquización social por clases, con un fuerte control estatal.
- Exaltar el militarismo, que impregnaba la sociedad civil y la educación.
- Recurrir al revanchismo (deseo de venganza por agravios pasados) y justificar la guerra como medio de expansión y purificación.
- Mostrar un arraigado nacionalismo que, en el caso alemán, degeneró en racismo y antisemitismo.