Sistemas Económicos: Capitalismo, Socialismo y el Contexto Histórico

Un sistema económico se basa en la estructura económica surgida de las necesidades humanas (biológicas, físicas, psíquicas, culturales) que plantean los problemas económicos básicos (qué, cuánto, cómo y para quién producir). Las estructuras económicas están delimitadas por la propiedad de los medios de producción, y estos problemas se resuelven a través de las actividades económicas fundamentales (producción, cambio, distribución, consumo), realizadas gracias a la existencia de factores productivos (tierra, trabajo, capital, organización, tecnología, tiempo).

A través de la historia, los seres humanos se han organizado para resolver sus problemas en sistemas económicos o modos de producción que van desde la comunidad primitiva, pasando por el modo asiático de producción, el esclavismo, el feudalismo, hasta el capitalismo y el socialismo. Así, las preguntas ¿Qué producir?, ¿Cómo producir? y ¿Para quién producir? han transitado por distintas formas de organizar la actividad económica.

Para organizar la actividad económica y dar respuesta a los problemas económicos básicos, se adopta un conjunto de principios, instituciones y reglas que rigen la actividad económica de una determinada sociedad. En esencia, el sistema económico es el conjunto de instituciones y normas que rigen la organización económica de una sociedad. Estas opciones tienen un claro contenido político y moral. Es más, el sistema económico está vinculado al sistema político, y viceversa, y ambos constituyen “subsistemas” del “sistema social”.

Sistemas Económicos Fundamentales

El Sistema Capitalista

El capitalismo se basa en los siguientes pilares:

  • Propiedad privada: Permite a las personas poseer bienes tangibles (tierras, viviendas) y activos intangibles (acciones, bonos). Los agentes privados poseen y controlan la propiedad según su interés. Los bienes de capital (fábricas, minas, ferrocarriles) pueden ser de propiedad y control privados.
  • Libertad de empresa y de elección: Los clientes insatisfechos pueden comprar productos diferentes; los inversores, emprender proyectos según su interés y voluntad; y los trabajadores, cambiar de empleo según su voluntad e interés.
  • Competencia: Las organizaciones e individuos que ofrecen productos y servicios lo hacen en un marco de convivencia y competencia.
  • Libre mercado: Los precios se establecen a través de acuerdos tácitos entre quienes demandan un producto o servicio (demanda) y quienes lo ofrecen (oferta). Cualquier persona tiene derecho a comprar o vender, incluso su trabajo, y a negociar el precio.
  • Menor intervención del Estado en la economía: Su acción se limita a proteger los derechos privados y mantener un entorno ordenado para el funcionamiento de los mercados. La intervención estatal es necesaria para la defensa nacional y regular el comercio exterior, siempre de forma moderada.
  • Búsqueda de lucro: Se permite la búsqueda y obtención de ganancias individuales o empresariales.
  • Desigualdad: En el sistema capitalista, la distribución equitativa de la riqueza no es inherente. Los agentes económicos obtienen ingresos diferentes según aptitudes, cualidades y valoración del mercado, generando distintas clases sociales según el ingreso.

El Sistema Socialista

Las principales características del socialismo son:

  • Propiedad pública: Es la característica central. Los medios de producción y distribución son controlados y regulados por el Estado para alcanzar mayor igualdad económica.
  • Planificación económica: Todas las actividades económicas (producción, distribución, intercambio y consumo) son planificadas y coordinadas por una autoridad central para producir lo que el Estado determine como necesario para la población.
  • Búsqueda de igualdad económica: Busca distribuir la riqueza equitativamente entre los ciudadanos para evitar su concentración en una minoría, pretendiendo desintegrar las clases sociales y equiparar el acceso a bienes y servicios.
  • Ausencia de competencia: El Estado es el único emprendedor y controla los precios. No existe la elección del consumidor, solo se puede comprar lo que el Estado provee.
  • Rol central del Estado: El Estado administra los medios de producción. Empresas estatales o cooperativas (con autogestión obrera) impulsan la economía.
  • Control estatal: El control de las actividades económicas por parte de las autoridades puede generar un exceso en el control de las libertades individuales.

La Guerra Fría

Antecedentes

La Segunda Guerra Mundial se desarrolló entre 1939 y 1945. Las grandes potencias enfrentadas fueron el Eje (Alemania, Italia y Japón) y los Aliados (Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y la Unión Soviética). El triunfo fue para los Aliados, pero al finalizar la guerra, la alianza se disolvió, dando lugar a la división de Alemania:

  • ALEMANIA FEDERAL: Bajo influencia de Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos. Economía capitalista.
  • ALEMANIA DEMOCRÁTICA: Bajo influencia de la Unión Soviética. Economía socialista.

¿Qué fue la Guerra Fría?

A partir del fin de la Segunda Guerra Mundial, comenzó un período de tensión permanente entre los bloques liderados por Estados Unidos y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), conocido como Guerra Fría. Esta tensión no llegó a un enfrentamiento militar directo entre ambas superpotencias.

Este enfrentamiento no bélico y bipolar implicó el choque entre dos concepciones opuestas: el capitalismo y el socialismo, manifestándose en aspectos económico, político y militar. En el plano político-ideológico, el bloque liderado por Estados Unidos defendía la democracia, la libertad y la iniciativa privada. En cambio, el bloque socialista defendía la propiedad estatal de los medios de producción, con economía planificada y centralizada.

El enfrentamiento también se manifestó en la «carrera espacial», la carrera armamentística, el espionaje y enfrentamientos en instancias deportivas internacionales. Durante este período, el mundo quedó dividido en:

  • 1er mundo: Países capitalistas alineados con Estados Unidos y Europa Occidental.
  • 2do mundo: Países socialistas alineados con la Unión Soviética.
  • 3er mundo: Países no alineados a las dos potencias dominantes, la mayoría en Asia del Sur, África y América Latina.

El Mundo Multipolar (1989-2001)

A partir de la década de 1970, una combinación de factores internos e internacionales frenó el crecimiento económico de las grandes potencias.

La mayoría de los cambios que llevaron de un mundo bipolar a uno multipolar ocurrieron en el bloque comunista, culminando en 1991 con la disolución de la Unión Soviética. Entre estos cambios se encuentran:

  • La puesta en marcha de la perestroika (renovación): Reestructuración económica que implicó un cambio gradual del sistema de planificación centralizada, tendiendo a liberalizar la economía, incentivar la producción y el consumo, e incorporar capitales extranjeros.
  • El alejamiento de los países de Europa Oriental del dominio comunista.
  • La desintegración de Yugoslavia en 1991, con la declaración de independencia de Eslovenia y Croacia.
  • La división de Checoslovaquia en 1993, dando lugar a la República Checa y la República Eslovaca.
  • La caída del Muro de Berlín (1989): Marcó el fin de la Guerra Fría y la reunificación de Alemania.

Tras estos eventos, Estados Unidos continuó siendo una gran potencia mundial, especialmente en el ámbito militar. En lo económico, surgieron tres superpotencias: Estados Unidos, Japón y la Unión Europea (centrada en Alemania).

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