Historia del Conflicto Palestino-Israelí: Orígenes y Evolución

Historia del Conflicto Palestino-Israelí

Orígenes Antiguos y Dominaciones

El conflicto palestino-israelí puede tener su origen en los primeros pobladores de la Tierra de Canaán, los hebreos y filisteos, y en la fundación del Reino de Israel. Varios pueblos dominaron la zona: Asirios, Babilonios, Persas, etc. Fueron los romanos los que en el siglo I a. C. convirtieron a esta zona en la provincia Palestina, después dominada por árabes y turcos.

El Despertar Nacionalista y el Sionismo (Finales del Siglo XIX)

A finales del siglo XIX se empezaron a producir los primeros roces y conflictos entre los árabes en la provincia de Palestina, bajo el mandato del Imperio otomano, y los judíos que empezaban a reclamar de nuevo la vuelta a su Tierra Prometida. Por un lado, empezaron a surgir movimientos nacionalistas en el mundo árabe que reclamaban su propia independencia y querían un estado palestino propio que seguiría siendo árabe y musulmán, pero al margen del control del Imperio otomano. Esto chocaba con los intereses de los judíos, quienes, impulsados por un movimiento sionista en auge, reclamaban la misma tierra para ellos. El sionismo consideró Palestina, la tierra donde se fundó el judaísmo, el lugar idóneo para establecer su proyecto nacional para juntar a los judíos dispersos por el mundo. En 1878, impulsados por este movimiento sionista, empezaron a establecerse los primeros asentamientos judíos en Palestina.

Migración Judía y Propiedad de la Tierra (Principios del Siglo XX)

En 1895, la población total de Palestina ascendía a medio millón de personas: 453.000 eran árabes palestinos y ocupaban el 99% de la tierra; 47.000 eran judíos y eran dueños del 5% de la tierra. Tras varios congresos sionistas, los judíos se dedicaron a comprar tierras en Palestina y entre 1904 y 1914 se produjeron nuevas oleadas migratorias.

La Primera Guerra Mundial y el Mandato Británico

Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, Inglaterra prometió a los palestinos un estado independiente a cambio de su apoyo frente a Turquía, aliado de Alemania. Sin embargo, en 1917 también se comprometió a la creación de un hogar nacional judío a través de la conocida como «Declaración Balfour», a lo que los palestinos se opusieron. Gran Bretaña finalmente conquistó la región y en 1918 se creó el Mandato británico de Palestina. La ambigüedad de la política británica provocó que el conflicto entre árabes y judíos se radicalizara.

Tensiones en el Periodo de Entreguerras

En el periodo de entreguerras se produjeron enfrentamientos y atentados entre organizaciones radicales judías que empezaron a surgir y radicales árabes.

La Posguerra y el Plan de Partición de la ONU

Al finalizar la Segunda Guerra Mundial y con la llegada masiva de judíos, Gran Bretaña diseñó un plan de partición de Palestina a través de los llamados Libros Blancos para acabar su mandato sobre el territorio. En 1947, la ONU diseñó un plan de partición de Palestina, con dos estados en el territorio: uno judío que controlaría el 55% del territorio y un estado palestino que controlaría el 45% del territorio. En cuanto a Jerusalén, lugar sagrado de 3 religiones (islámica, judíos y cristianos), se consideraría zona internacional y su soberanía la ejercería la ONU.

La autoridad judía dio el visto bueno; sin embargo, la autoridad árabe lo rechazó, considerando que se habían pisoteado sus derechos históricos y solo beneficiaba a los judíos. Esto supuso un futuro trágico para el pueblo palestino.

La Creación del Estado de Israel y la Guerra de 1948

En 1948, el Reino Unido, que venía ejerciendo su mandato sobre Palestina, consideró que su dominio allí había llegado a su fin y los británicos abandonaron Palestina. Esto supuso la proclamación por los sionistas del Estado de Israel. A partir de ese momento, empezó a actuar el nuevo estado con autoridad propia, reconocido por la mayoría de los países, es decir, contaba con el apoyo internacional. Los israelíes se consideraban además como innovadores desde el punto de vista científico, tecnológico y democrático en un área económicamente subdesarrollada. Desplegaron una industria moderna y mejoraron grandes áreas del desierto donde realizaron cultivos y sacaron buenas cosechas. Crearon también una sociedad democrática con elementos muy diversos y desarrollaron poderosas fuerzas militares modernas; sin embargo, los árabes rechazaron la creación de este Estado y decidieron actuar militarmente.

Consecuencias de la Guerra de 1948

A partir de este momento, se desencadenaron las sucesivas guerras entre árabes e israelíes. La primera de ellas, tras la proclamación del Estado de Israel, los árabes declararon la guerra al recién constituido estado porque no aceptaban el plan de partición de la ONU y el compartir territorio con otro Estado.

La Primera Guerra Árabe-Israelí (1948-1949), en plena Guerra Fría, terminó con la victoria de Israel, apoyada por las potencias occidentales y en especial por EEUU y su poderoso lobby judío. Como consecuencia de esta primera guerra, Israel amplió su territorio más allá de lo establecido en la resolución de las Naciones Unidas y Palestina quedó dividida en tres partes: el territorio de Israel; la ribera occidental del Jordán (Cisjordania), que pasó a Jordania; y Gaza, que quedó bajo la administración de Egipto. Unos 700 mil palestinos fueron expulsados de sus hogares, huyeron a los países vecinos y se instalaron en campos de refugiados. El primer gran error de los árabes fue no crear en Cisjordania el Estado palestino; así empezó para los árabes una vida errante, y para los que se quedaron en la zona, una humillación constante. Así se creó una situación de guerra abierta entre los estados árabes de la zona y el Estado de Israel.

Principales Conflictos Posteriores

Se produjeron 4 guerras más: Canal de Suez (1956), la Guerra de los 6 días (1967), especialmente importante porque Israel ocupó Gaza y Cisjordania (desde entonces serán los territorios ocupados), la Guerra de Yom Kippur (1973), que fue la respuesta árabe a la anterior guerra relacionada con la crisis del petróleo, y la Guerra del Líbano (1982-83).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *