Causas Inmediatas y Chispa de la Guerra
La Segunda Guerra Mundial se desencadenó a partir de una serie de políticas expansionistas y agresivas por parte de las potencias del Eje, culminando en un evento específico que actuó como detonante.
1. Política Militarista de las Potencias del Eje:
- Japón: Inició un movimiento de intervención en China. En 1937, controlaba Manchuria y Mongolia Interior, año en que comenzó la guerra sino-japonesa.
- Italia: Anexionó Abisinia en 1935 y Albania en 1939.
- Alemania: Incorporó territorios con población germana:
- 1938: Austria
- 1938-1939: Checoslovaquia (Sudetes)
2. Chispa de la Guerra: Invasión de Polonia
Tras la firma de un pacto de no agresión con la URSS en 1939, cuyo objetivo era asegurar la neutralidad rusa ante un posible conflicto en su frontera, Alemania invadió Polonia el 1 de septiembre de 1939. Este acto provocó que Francia e Inglaterra declararan la guerra al III Reich.
Paralelamente, se puso en marcha uno de los protocolos secretos del Pacto Ribbentrop-Mólotov: Rusia ocupó Lituania, Estonia y Letonia, atacó Finlandia e incorporó la parte oriental de Polonia.
FASES DE LA GUERRA
PRIMERA FASE: OFENSIVA ALEMANA o del EJE (1939-1942)
Esta etapa se caracterizó por la rápida expansión de las potencias del Eje.
1. Guerra Relámpago:
La superioridad de la Luftwaffe alemana facilitó la ocupación de Polonia. Mientras tanto, Francia e Inglaterra, a pesar de declarar la guerra, mantuvieron una postura defensiva, llegando Francia a denominar a este periodo «la guerra de broma». El éxito en Polonia impulsó a Hitler a expandir su dominio mediante la «guerra relámpago», con ataques rápidos y sorpresivos. En la primavera de 1940, Alemania invadió Dinamarca y Noruega, aprovechando sus ventajas geográficas y estratégicas.
Ofensiva Occidental (mayo 1940):
Alemania lanzó su ofensiva contra Holanda, Bélgica y Luxemburgo con el objetivo de alcanzar Francia y superar la Línea Maginot. El avance alemán culminó con la llegada a París. Francia firmó el armisticio, quedando dividida en una zona ocupada por el ejército alemán y otra administrada por el Mariscal Pétain (la Francia de Vichy), colaboracionista con Alemania. Desde Londres, Charles de Gaulle hizo un llamado a la resistencia francesa.
2. Batalla de Inglaterra:
Tras la ocupación de Polonia y la rendición de Francia, Hitler esperaba que Gran Bretaña solicitara la paz. Sin embargo, los británicos, liderados por Winston Churchill, ofrecieron una férrea resistencia. Una de las primeras acciones fue el rescate de soldados aislados en Dunkerque.
Ante la negativa británica a rendirse, Hitler ordenó a la Luftwaffe destruir las instalaciones militares para facilitar una invasión. Al no lograr neutralizar a la Royal Air Force (RAF), se optó por una guerra total, bombardeando fábricas, comunicaciones y lugares estratégicos. A pesar de esta ofensiva, la invasión de la isla nunca se concretó.
3. Intervención en los Balcanes (octubre 1940):
En este contexto, Mussolini entró en guerra, iniciando la campaña con la invasión de Grecia. La resistencia griega, apoyada por los británicos, supuso un fracaso para las tropas italianas. Alemania intervino en defensa de sus aliados, invadiendo Yugoslavia y expulsando a los británicos de Grecia. Los objetivos alemanes en los Balcanes incluían el control de los pozos de petróleo y las minas de plomo, además de impedir la influencia soviética en la región.
4. Frente Africano:
Italia también dirigió su atención al continente africano, abriendo un nuevo frente. Británicos e italianos se disputaron el control de Libia, Egipto y Abisinia (esta última fue finalmente controlada por los británicos). Tras la expulsión de los italianos de Abisinia y Libia, Alemania envió el Afrika Korps en 1941 para intentar revertir la situación. En este frente se disputaba el control del Mediterráneo, el Canal de Suez y los pozos petrolíferos de Oriente Próximo.
5. Invasión de la URSS (Operación Barbarroja):
En junio de 1941, Hitler lanzó la Operación Barbarroja con el objetivo de apoderarse de los recursos cerealísticos y petrolíferos de la URSS, asegurar el abastecimiento de sus tropas y eliminar el comunismo. El plan contemplaba ataques en tres frentes: Leningrado, Moscú y Stalingrado. Los alemanes sitiaron Leningrado durante 900 días. En diciembre, las tropas alemanas llegaron a las puertas de Moscú, se apoderaron de Ucrania y Crimea, pero el crudo invierno frenó su avance. Con la llegada de la primavera, los alemanes atacaron y tomaron Stalingrado.
Intervención Japonesa:
En diciembre de 1941, Japón atacó la base militar estadounidense de Pearl Harbor en Hawái. Este ataque provocó la entrada de Estados Unidos en el conflicto, declarando la guerra al Eje y abriendo un nuevo frente en Asia. Desde entonces, Japón lanzó diversas ofensivas, llegando a controlar gran parte del Pacífico, incluyendo Filipinas, varias islas del Pacífico pertenecientes a EE. UU., colonias holandesas en Indonesia y Singapur en 1942.
Durante esta primera fase, las potencias del Eje alcanzaron su máximo apogeo. El III Reich dominaba gran parte de Europa occidental, mientras que Japón controlaba China, Indochina y ocupaba Indonesia, debilitando el Imperio Británico. En 1942, ante la aparente victoria del Eje, se celebró la Conferencia de Wannsee, donde los nazis decidieron la «solución final».
SEGUNDA FASE: INICIATIVAS ALIADAS (1942-1943)
Esta etapa marca un punto de inflexión, con los Aliados tomando la iniciativa en diversos frentes.
1. Frente Soviético: Stalingrado
La heroica resistencia de Leningrado y el severo invierno supusieron un revés para el ejército alemán. En noviembre de 1942, los soviéticos lanzaron una ofensiva que rodeó al ejército alemán. Tras este ataque sorpresa, las tropas alemanas se retiraron y se rindieron el 31 de enero de 1943 en la batalla de Kursk. Stalingrado significó la primera gran derrota de Hitler y cambió el curso de la guerra.
2. Desembarco de Sicilia:
En julio de 1943, los Aliados desembarcaron en Sicilia. Víctor Manuel III asumió la dirección política de Italia y de la guerra, ordenando la detención de Mussolini. En septiembre de 1943, Italia se rindió y el Rey abandonó el país, mientras Roma era ocupada por los Aliados.
Los alemanes intervinieron, liberaron a Mussolini y frenaron el avance aliado, dividiendo Italia a través de la Línea Gótica. El norte quedó bajo el liderazgo de Mussolini y el sur bajo control aliado. La conquista de Italia fue un proceso lento debido a la fuerte resistencia alemana. En la primavera de 1945, los partisanos capturaron y ejecutaron a Mussolini, exponiendo su cuerpo en una plaza pública.
3. Operaciones en el Pacífico (Midway y Guadalcanal):
En junio de 1942, cerca de las islas Midway, los japoneses sufrieron su primera derrota naval, gracias al desciframiento de mensajes por parte de los estadounidenses. En agosto, las fuerzas estadounidenses conquistaron la isla de Guadalcanal.
4. Frente Africano:
La contienda en África se extendió hasta principios de 1943. Los británicos obtuvieron la victoria en El Alamein (Egipto), impidiendo la conquista alemana.
TERCERA FASE: LA GRAN OFENSIVA FINAL ALIADA (1943-1945)
Los Aliados lanzaron ofensivas decisivas que llevaron al colapso de las potencias del Eje.
El Desembarco de Normandía:
A finales de 1943, los líderes de Estados Unidos (Roosevelt), Gran Bretaña (Churchill) y la URSS (Stalin) se reunieron en la Conferencia de Teherán. Stalin insistió en la apertura de un segundo frente en Francia para liberar la parte oriental de Europa, a cambio de declarar la guerra a Japón. En junio de 1944, se materializó la petición de Stalin: mientras las tropas soviéticas avanzaban hacia Alemania, las fuerzas aliadas desembarcaron en Normandía en la Operación Overlord. La contraofensiva alemana en las Ardenas (Bélgica) no logró detener el avance aliado, y París fue liberada en agosto de 1944.
Las tropas soviéticas llegaron a los alrededores de Berlín en abril de 1945. Alemania se rindió a los Aliados el 7 de mayo. Sin embargo, el conflicto continuaba en Asia.
Guerra en el Pacífico:
Una vez pacificada Europa, los estadounidenses, desde 1945, reconquistaron las islas del Pacífico, mientras los británicos avanzaban por la península de Indochina. Las fuerzas estadounidenses tomaron la isla de Iwo Jima, desde donde lanzaron ataques contra las islas cercanas a Japón. Ante la persistente resistencia japonesa, se emplearon tácticas kamikaze.
El 6 de agosto de 1945, se lanzó la primera bomba atómica sobre Hiroshima, devastándola por completo. Dos días después, la URSS liberó Manchuria y Corea. El 9 de agosto, se lanzó la segunda bomba atómica sobre Nagasaki. Al día siguiente, Tokio anunció su intención de rendirse, poniendo fin a la Segunda Guerra Mundial y firmando la paz. La bomba atómica no solo buscaba finalizar el conflicto, sino también advertir a Stalin sobre las posibles consecuencias de un ataque al bloque capitalista.