1. Las Transformaciones del Siglo XVII y los Conflictos Europeos
1.1. Las Transformaciones del Siglo XVII
En el siglo XVII se produjeron en Europa transformaciones políticas, económicas, sociales, culturales y artísticas.
- Políticas: Tuvieron lugar graves enfrentamientos internacionales, que provocaron la pérdida de la hegemonía española en Europa. La monarquía autoritaria fue sustituida por la monarquía absoluta y surgieron los primeros sistemas parlamentarios.
- Económicas: El auge del comercio impulsó el capitalismo financiero, y en la mayoría de los estados se impuso el mercantilismo, una nueva doctrina económica que basaba el poder de la monarquía y del país en la acumulación de riqueza y metales preciosos.
- Sociales: La sociedad estamental comenzó a resquebrajarse debido al auge de la burguesía, enriquecida por el comercio colonial.
- Culturales y Artísticas: En el siglo XVII nació la ciencia moderna, y la aplicación de métodos experimentales dio lugar a una revolución científica. En el arte, nuevas ideas impulsaron un nuevo estilo artístico, el Barroco, que surgió en Italia a principios de siglo y se extendió por el resto de países europeos.
1.2. Los Conflictos Europeos
La situación internacional estuvo marcada por dos importantes conflictos europeos: la Guerra de los Treinta Años y la guerra entre España y Francia. En estos conflictos, los dos países lucharon por conseguir la hegemonía continental.
La Guerra de los Treinta Años (1618-1648)
Comenzó como un conflicto alemán que enfrentó al emperador, católico y partidario de la unidad del imperio, con los príncipes alemanes, protestantes y defensores de su autonomía. El enfrentamiento se internacionalizó cuando el emperador recibió el apoyo de España y los príncipes alemanes el de las potencias enemigas de España: Francia, Suecia, Dinamarca, las Provincias Unidas e Inglaterra.
España y el emperador fueron derrotados en Rocroi (1643) y tuvieron que firmar la Paz de Westfalia (1648). En ella, el emperador aceptaba la tolerancia religiosa y el poder de los príncipes alemanes, y España reconocía la independencia de las Provincias Unidas.
La Guerra entre España y Francia (1648-1659)
Francia y España continuaron luchando algunos años más. Finalmente, tras ser derrotada en la batalla de las Dunas (1658), España firmó la Paz de los Pirineos (1659). En ella cedía a Francia los territorios catalanes situados al norte de los Pirineos; se fijaba la frontera entre los dos países en esta cordillera, y se pactaba la boda del rey Luis XIV de Francia con María Teresa, la hija de Felipe IV. Se consagraba así la decadencia de la monarquía hispánica y comenzaba la hegemonía de Francia en Europa.
2. Los Regímenes Políticos
En el siglo XVII la mayoría de los estados europeos implantó la monarquía absoluta. Por eso, se conoce también como el siglo del absolutismo. No obstante, en algunos países se impuso el parlamentarismo.
2.1. Las Monarquías Absolutas
En las monarquías absolutas el rey concentraba todos los poderes del Estado y gobernaba sin contar con las instituciones tradicionales, como las Cortes o los Parlamentos. Las bases del poder absoluto de los reyes fueron dos:
- La teoría del origen divino del poder: Afirmaba que el poder del rey proviene directamente de Dios, y solo a él debe rendir cuentas.
- La administración centralizada: Dirigida desde la corte, contaba con funcionarios que aseguraban el control del rey sobre la economía y el ejército y el cumplimiento de sus órdenes en todo el reino.
En Europa el mejor ejemplo de monarca absoluto fue Luis XIV de Francia (1643-1715), conocido como el «Rey Sol». Este monarca concentró todos los poderes, y creó un eficaz sistema de administración y de recaudación de impuestos. Así, se convirtió en el modelo a seguir para las demás monarquías.
2.2. Los Sistemas Parlamentarios
En los sistemas parlamentarios el poder del rey o del máximo gobernante estaba limitado por un Parlamento, que representaba los intereses de los distintos estamentos sociales.
- Inglaterra fue el mejor ejemplo de monarquía parlamentaria. En este país, la implantación de la monarquía absoluta encontró la oposición del Parlamento. El choque entre ambos provocó dos revoluciones, en 1640 y 1688. La revolución de 1640 terminó con la ejecución del rey Carlos I (1649); y la revolución de 1688 acabó con la abdicación de Jacobo II y la coronación del holandés Guillermo de Orange. A cambio, este monarca firmó una Declaración de Derechos, en 1689, que obligaba al rey a cumplir las leyes aprobadas por el Parlamento.
- Las Provincias Unidas, tras independizarse de España, constituyeron una república formada por siete provincias. Cada una tenía su propio Parlamento, y a su vez todos se reunían en los Estados Generales para adoptar decisiones comunes.
3. La Crisis Económica y Demográfica
3.1. El Estancamiento Demográfico
La población europea creció muy poco en el siglo XVII, pasando de 106 a 130 millones de personas. Las causas del escaso crecimiento fueron las malas cosechas, la dureza de la Guerra de los Treinta Años, y el rebrote de la peste (1650-1670). En muchos países la población se estancó y en algunos casos, decreció, sobre todo en los países mediterráneos y del sur de Europa.
3.2. La Crisis Agraria y Artesanal
- La producción agraria descendió en el siglo XVII por las anomalías climáticas, las guerras y las deficiencias técnicas. La crisis afectó sobre todo a la Europa oriental y mediterránea. En cambio, los Países Bajos e Inglaterra adoptaron nuevas técnicas para conservar la fertilidad del suelo, como la sustitución del barbecho por plantas forrajeras y la selección de las especies mejor adaptadas.
- La artesanía urbana también entró en crisis, pues el control de los gremios impedía su desarrollo. Por eso, algunos países iniciaron nuevas formas de producción. Las más importantes fueron las manufacturas, grandes talleres donde trabajaban numerosos artesanos a sueldo de un empresario.
3.3. El Comercio y el Capitalismo Financiero
- El comercio alcanzó gran auge, especialmente en Holanda, Inglaterra y Francia. Estos países aprovecharon la debilidad de Portugal y España para comerciar con sus imperios americanos. Y ante el descenso de los metales preciosos, potenciaron los cultivos coloniales como el azúcar, el tabaco y el café, y el tráfico de esclavos desde África. Además, Holanda, Inglaterra y Francia crearon sus propios imperios coloniales, y fundaron compañías privilegiadas a las que concedieron el monopolio comercial con una zona o un producto.
- El capitalismo financiero surgió del auge comercial, que impulsó los préstamos, las sociedades por acciones, y la apertura de bolsas, donde se compraban y vendían las acciones de las compañías comerciales. Aunque la primera bolsa se abrió en Amberes (1531), en el siglo XVII el liderazgo lo ejerció la de Ámsterdam, fundada en 1602.
3.4. El Mercantilismo
La mayoría de Estados europeos siguió en el siglo XVII los principios del mercantilismo, teoría y práctica económica que sostuvo que la riqueza de un país residía en la cantidad de metales preciosos que atesoraba. Para incrementarla, defendía la intervención del Estado en la economía y la conquista de nuevos mercados.
- La intervención del Estado adoptó diversas formas: fomentar las ventas al exterior; impulsar las manufacturas nacionales; prohibir la salida de materias primas del país; imponer impuestos a los productos extranjeros, etc.
- La conquista de nuevos mercados se llevó a cabo ocupando nuevos territorios o colonias, que les proporcionaban materias primas y compraban sus manufacturas.
Los modelos de mercantilismo fueron varios. El francés, aplicado por Colbert, ministro de Luis XIV, fomentó la agricultura, las industrias estatales y el comercio exterior. El inglés promovió la industria y el comercio exterior. Y el español se basó en la acumulación de metales preciosos.
4. La Decadencia de la Monarquía Hispánica
4.1. Los Austrias Menores y el Gobierno de los Validos
En el siglo XVII se produjo la progresiva decadencia política, demográfica y económica de España. No obstante, la monarquía hispánica continuó siendo una gran potencia internacional, pues mantenía numerosas posesiones en Europa y un vasto imperio colonial.
En España, en este siglo reinaron los llamados Austrias Menores: Felipe III (1598-1621), Felipe IV (1621-1665) y Carlos II (1665-1700). Estos monarcas tuvieron una personalidad más débil que la de sus antecesores, y delegaron las tareas de gobierno en validos, personas que lo ejercieron en su nombre. Fue el caso de los duques de Lerma y de Uceda, en el reinado de Felipe III; del conde-duque de Olivares, en el de Felipe IV; y de Nithard y Valenzuela, con Carlos II. En el transcurso de estos años se implantó la monarquía absoluta, las Cortes perdieron importancia y los reyes concentraron el poder en sus manos. Pero no se implantó una administración centralizada, sino que cada territorio mantuvo su propia organización.
4.2. La Crisis Política
Felipe III mantuvo la hegemonía hispánica. En un primer momento, la política internacional se orientó a la pacificación. Con este fin, se llegó a la Tregua de los Doce Años con Holanda (1609-1621), y se firmó la paz con Inglaterra. En 1618, sin embargo, España decidió intervenir en la Guerra de los Treinta Años apoyando al emperador alemán.
Felipe IV se enfrentó con graves problemas:
- En el exterior, la derrota de Rocroi y las paces de Westfalia y de los Pirineos significaron el inicio de la decadencia de la monarquía.
- En el interior, el conde-duque de Olivares intentó implantar una administración centralizada, imponiendo las leyes de Castilla al resto de los reinos. Esta política provocó la sublevación de Cataluña y la rebelión de Portugal, en 1640. La guerra con Cataluña terminó en 1652, cuando Felipe IV juró obediencia a las leyes catalanas. Portugal, en cambio, se independizó de España en 1668, reinando ya Carlos II.
4.3. La Crisis Demográfica
La población española se redujo de 8 a 6 millones de habitantes. Las causas del descenso a lo largo de la centuria fueron las continuas guerras, las malas cosechas, las epidemias de peste bubónica y la fuerte emigración a América. A todo lo anterior se unió la expulsión de los moriscos, decretada en el reinado de Felipe III (1609). La expulsión supuso la salida de España de unas 300.000 personas, despoblando algunas aldeas y privando a los señores de una mano de obra sumisa y trabajadora. Perjudicó, sobre todo, al reino de Valencia, donde los moriscos eran más numerosos y realizaban importantes tareas agrarias.
4.4. La Crisis Económica
- La agricultura atravesó una fuerte crisis. A los motivos generales indicados, en España se sumó la expulsión de los moriscos, que provocó el abandono de los cultivos de huerta en favor de los cereales.
- La industria, por su parte, tuvo escaso desarrollo. Las riquezas traídas de América en el siglo anterior no se emplearon en promoverla sino en comprar productos extranjeros; los mercados exteriores se perdieron por el atraso técnico, que ocasionaba una menor calidad de los productos, y el mercado interno se redujo por el descenso demográfico. Todo ello provocó una profunda crisis de los gremios.
- El comercio con América decayó, debido a los ataques de los piratas a las flotas y a la gran extensión del contrabando y del comercio ilegal con otros países. El resultado fue la reducción de la llegada de metales preciosos de América, que repercutió negativamente en la economía.
5. Ciencia y Cultura en el Siglo XVII
5.1. La Revolución Científica
En el siglo XVII tuvo lugar la llamada revolución científica que supuso el nacimiento de la ciencia moderna. Sus bases fueron el empirismo y el racionalismo.
- El empirismo fue formulado por el inglés Francis Bacon, que creó el método científico o experimental. Según él, solo a partir de la observación y la realización de experimentos prácticos podían formularse leyes científicas de carácter general.
- El racionalismo, desarrollado por el francés René Descartes, defendió el uso de la razón para la comprensión de la realidad.
5.2. El Desarrollo de la Ciencia y de la Técnica
La aplicación del método científico arrinconó las creencias tradicionales y dio lugar a un gran avance de las ciencias y de la técnica. Las ciencias progresaron en varias disciplinas:
- Matemáticas: Descartes ideó las coordenadas cartesianas, Neper inventó los logaritmos, e Isaac Newton y Leibniz sentaron las bases de las matemáticas modernas.
- Física: Galileo Galilei descubrió el principio de la inercia, y Newton formuló la ley de la gravedad.
- Astronomía: Galileo confirmó la teoría heliocéntrica de Copérnico, y Kepler estudió las órbitas de los planetas.
La técnica aportó numerosos inventos. Los más sobresalientes fueron el telescopio, perfeccionado por Galileo (1609); la máquina calculadora de Pascal (1642); el barómetro de Torricelli (1643); y el microscopio, cuya invención se disputan el holandés Jansen (1590) y el italiano Galileo.
5.3. El Esplendor Cultural
A pesar de la crisis, el siglo XVII fue una época de esplendor cultural. En Europa destacaron grandes literatos como Milton en Inglaterra y Molière y Racine en Francia, e importantes filósofos como Descartes, Bacon, Hobbes y Locke.
En España, numerosos escritores hicieron posible que continuara el esplendor cultural del Siglo de Oro.
- Literatura: Cervantes fue un magnífico novelista, cuya obra Don Quijote de la Mancha es un continuo contraste entre la realidad y la ficción. Quevedo criticó los problemas políticos de España utilizando un estilo conceptista, y Góngora se evadió de la realidad utilizando el culteranismo.
- Teatro: El teatro alcanzó gran auge y se convirtió en un espectáculo de masas. Los autores teatrales más famosos fueron Lope de Vega (Fuenteovejuna), Tirso de Molina (El burlador de Sevilla) y Calderón de la Barca (La vida es sueño). Las obras se seguían representando en los llamados corrales de comedias, instalados en patios y corrales interiores.
6. El Arte Barroco
6.1. El Nacimiento de un Nuevo Estilo
El Barroco surgió en el siglo XVII en la Roma de los papas, y desde allí se extendió por el resto de Europa. Los artistas se consideraron continuadores de la Antigüedad clásica y del Renacimiento. Pero rompieron sus normas y crearon un estilo caracterizado por la novedad, el movimiento, los contrastes, el gusto por lo sorprendente y lo teatral, y el deseo de provocar emoción.
Los clientes principales del arte fueron la Iglesia católica, que lo usó para hacer propaganda de su doctrina frente al protestantismo; los monarcas absolutistas, que lo utilizaron para manifestar su poder; y la burguesía enriquecida, que mostró a través del arte su éxito económico y su modo de vida.
6.2. La Arquitectura: Elementos y Edificios
Los elementos arquitectónicos utilizados por el Barroco proceden de la Antigüedad clásica, pero se emplean de forma diferente. Los muros y las plantas tienen gran movimiento por el uso de líneas curvas. Los soportes no respetan las proporciones de los órdenes clásicos, y surgen otros como la columna salomónica, de fuste retorcido; y el orden gigante, en el que la columna tiene la altura de dos pisos. Los arcos son variados, los frontones se parten, y las cubiertas abovedadas ganan profundidad.
Los edificios principales fueron las iglesias, que adoptaron a veces plantas ovaladas, elípticas o mixtilíneas, y los palacios. Los exteriores e interiores de estos edificios están cubiertos de decoración.
6.3. Las Características de la Escultura y la Pintura
La escultura y la pintura barrocas tuvieron en común el naturalismo; la expresividad y el movimiento en actitudes y en ropajes; los contrastes de luces y sombras; y las composiciones libres y complejas. En ambos casos, los temas fueron religiosos en los países católicos (éxtasis, martirios y milagros de santos, inmaculadas concepciones, etc.). Pero también abundaron los temas mitológicos, de la vida cotidiana de la burguesía y de las clases populares, y los retratos.
La pintura, mural o al óleo, se distinguió por la importancia del color, los contrastes de claroscuro y la búsqueda de la profundidad mediante la perspectiva aérea. En ella, además de los temas ya citados, abundaron los paisajes y los bodegones.
6.4. El Barroco en Italia
Italia fue la cuna del nuevo estilo y donde se crearon los prototipos básicos de la arquitectura, la escultura y la pintura barrocas.
La Arquitectura
En el siglo XVII los papas trataron de exaltar el papel de Roma como cabeza del catolicismo y las ideas de la Contrarreforma. Para ello, contrataron a Carlo Maderno y sobre todo, a Gian Lorenzo Bernini.
- Carlo Maderno realizó la transición entre el Renacimiento y el Barroco. Sus obras principales fueron la transformación de la basílica de San Pedro del Vaticano, a la que añadió una larga nave que la convirtió en una cruz latina; y la fachada de la basílica.
- Gian Lorenzo Bernini es autor del baldaquino de San Pedro, un grandioso altar de bronce sostenido sobre columnas salomónicas; y de la columnata de la plaza de San Pedro. Otras obras del autor son la iglesia de San Andrés del Quirinal, y el palacio Barberini, donde crea el prototipo de palacio barroco.
- Francesco Borromini fue otro arquitecto destacado. En Roma, edificó iglesias con gran movimiento, como San Ivo alla Sapienza y San Carlos de las Cuatro Fuentes.
La Escultura y la Pintura
- En escultura destacó Gian Lorenzo Bernini, que realizó un David; obras mitológicas, como Apolo y Dafne; de exaltación del papa, como la Cátedra de San Pedro; de temática contrarreformista, como el Éxtasis de Santa Teresa, y retratos y bustos, como el de Luis XIV, Gabriele Fonseca o el Alma condenada.
- En pintura, el pintor más innovador fue Caravaggio. Sus obras se caracterizan por el naturalismo de los personajes y el tenebrismo, que consiste en contrastar zonas muy oscuras con otras fuertemente iluminadas. Por ello, las figuras dan una gran sensación de volumen, como sucede en la Vocación de San Mateo, La conversión de San Pablo y La muerte de la Virgen.
6.5. El Barroco en el Resto de Europa
- En Francia, la arquitectura tuvo un mayor gusto por la línea recta y un menor recargamiento decorativo. La obra principal fue el palacio de Versalles, encargado por Luis XIV a Mansart, su principal arquitecto.
- En Holanda y en Flandes la pintura alcanzó un extraordinario desarrollo. En Holanda, la figura principal fue Rembrandt, que realizó autorretratos y retratos colectivos (Ronda de noche; Lección de anatomía; Los síndicos del gremio de pañeros), escenas cotidianas y algunos cuadros religiosos. En Flandes sobresalió Rubens, cuyas composiciones se caracterizan por el movimiento, el dinamismo y el colorido, caso del Descendimiento o Las Tres Gracias. Su discípulo Van Dyck trabajó en Inglaterra, donde realizó retratos de gran elegancia, como el de Carlos I de Inglaterra.
6.6. El Barroco en España y América
En España
Durante la primera mitad del XVII la corriente purista mantuvo la austeridad decorativa del estilo herreriano. Su mejor representante fue Gómez de Mora, autor del convento de la Encarnación, la Plaza Mayor y el Ayuntamiento de Madrid.
Entre 1660 y principios del siglo XVIII se impuso una corriente decorativa, impulsada por los hermanos Churriguera y conocida como churrigueresco, que cubrió los edificios de una rica decoración. Obras destacadas de este estilo churrigueresco fueron la Plaza Mayor de Salamanca, y las fachadas de las catedrales de Granada, de Jaén y del Obradoiro, en Santiago de Compostela. Esta última es ya del siglo XVIII.
En América
El Barroco fue impulsado por la corona, la Iglesia y los jesuitas; y usado como medio de evangelización. Los principales edificios fueron catedrales de gran riqueza decorativa, como las de México, Zacatecas, Cuzco y Lima.
6.7. La Escultura y los Centros Escultóricos
La escultura se centró en la talla de imágenes religiosas en madera policromada, caracterizadas por el realismo y la expresividad.
Los destinos principales de esta imaginería fueron los retablos, y los pasos procesionales de Semana Santa encargados por cofradías religiosas.
Los centros escultóricos fueron Valladolid, con Gregorio Fernández; Sevilla, con Martínez Montañés, y Granada, con Alonso Cano.
6.8. Las Escuelas Pictóricas
- En la escuela valenciana destacaron pintores tenebristas como Ribalta, que pintó a San Francisco abrazando al Crucificado; y Ribera, que realizó obras como El martirio de San Felipe, Arquímedes y La Magdalena.
- En la escuela andaluza sobresalieron Zurbarán, que pintó bodegones, retratos y obras para las órdenes religiosas, como San Hugo en el refectorio de los cartujos; y Murillo, que realizó obras de gran luminosidad y colorido, como varias Inmaculadas y Niños comiendo melón y uvas.
- En la escuela madrileña pint…
7. Vocabulario
- Mercantilismo
- Sistema económico en el cual los metales preciosos constituyen la riqueza esencial de los Estados.
- Paz de Westfalia
- El término de Paz de Westfalia se refiere a los dos tratados de paz de Osnabrück y Münster, firmados el 24 de octubre de 1648, este último en la Sala de la Paz del ayuntamiento de Münster.
- Paz de los Pirineos
- Fue un tratado internacional de 124 artículos suscrito por Luis de Haro y Mazarino, representantes de los soberanos de las monarquías española y francesa.
- Bolsa
- Ayuda económica que se concede para realizar una actividad no lucrativa, en especial relacionada con los estudios.
- Válidos
- Los validos son personajes, miembros de la aristocracia, en los que el rey depositaba su total confianza. El monarca se desentendía de las labores de gobierno y el valido tomaba las principales decisiones.
- Empirismo
- Método o procedimiento que está basado en la experiencia y en la observación de los hechos.
- Racionalismo
- Teoría epistemológica que, frente al empirismo, considera la razón como fuente principal y única base de valor del conocimiento humano en general.