La Revolución Americana: El Nacimiento de Estados Unidos
La creación de los Estados Unidos de Norteamérica rompió radicalmente con las tradiciones monárquicas. La Revolución Americana comenzó con la rebelión de las Trece Colonias. Los colonos se opusieron a las medidas económicas impuestas por la metrópoli. Tras las protestas, estalló una rebelión que dio lugar a la intervención de las tropas británicas y al inicio de una gran guerra entre colonias y la metrópoli (1775).
El 4 de julio de 1776, las Trece Colonias aprobaron la Declaración de Independencia. En 1783, la guerra finalizó con el triunfo de los rebeldes, liderados por George Washington como comandante en jefe, y con el apoyo de Francia y España. La nueva nación recibió el nombre de Estados Unidos de América, adoptando ideas ilustradas y varias novedades en su sistema político:
- Declaración de Derechos: Aprobada por el estado de Virginia, recogía una serie de derechos naturales propios de toda persona: libertad, igualdad, propiedad, derecho a la vida, etc.
- Constitución de 1787: Se aprobó una Constitución en 1787 en la que quedaban prohibidos los cargos públicos hereditarios o vitalicios; todos los cargos serían elegidos periódicamente.
- Sistema Político: Se estableció la República Federal, una agrupación de estados que compartían algunas instituciones.
- División de Poderes: Los poderes se dividían en: legislativo, ejecutivo y judicial.
- Principios Fundamentales: El sistema político se basaba en los principios de la soberanía nacional y de la igualdad de los ciudadanos ante la ley. Tenían derecho al voto toda persona mayor de edad que tuviera un determinado nivel de renta (sufragio censitario).
La Revolución Francesa: Orígenes y Fases
Fase Prerrevolucionaria (1787-1788)
La Francia de Luis XVI atravesaba graves problemas financieros: los gastos de la Corona, debidos a las constantes guerras, superaban los ingresos. El Estado aumentaba los tributos, perjudicando a los campesinos y comerciantes. La subida de los impuestos elevaba el precio de los bienes básicos.
Los estamentos privilegiados solicitaron al rey la convocatoria de los Estados Generales, una asamblea formada por los tres estados. El rey tuvo que aceptar y convocó la asamblea en mayo de 1789 en Versalles.
Revolución y Monarquía Constitucional (1789-1792)
El Estallido de la Revolución
En los Estados Generales, el Tercer Estado solicitó que cada representante tuviera un voto. Esta petición no fue admitida, por lo que los diputados del Tercer Estado decidieron reunirse por su cuenta (el Juramento del Juego de la Pelota) y formar una Asamblea Constituyente en junio de 1789. La asamblea se declaró fuente legítima de poder y soberanía.
La monarquía reunió tropas para disolver la asamblea, pero el Pueblo de París se incorporó al conflicto. Ante esta amenaza, se levantaron en armas y el 14 de julio tomaron la Bastilla, cárcel real y símbolo del absolutismo. La burguesía se apoderó del Ayuntamiento y creó la Guardia Nacional para defender la revolución.
Medidas de la Asamblea Nacional (1789-1791)
El rey decidió ceder y aceptar que la Asamblea Nacional llevara a cabo una serie de medidas fundamentales entre 1789 y 1791:
- Abolición de los derechos y privilegios feudales: Todos los ciudadanos eran iguales ante la ley y los impuestos.
- Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano (agosto de 1789): Afirmaba una serie de derechos básicos para todas las personas: igualdad, libertad, etc.
- Aprobación de la Constitución de 1791: Establecía una monarquía moderada y se instauraba la división de poderes. Se estableció el sufragio censitario (no votaban las mujeres ni grupos sociales humildes, y solo podían ser elegidos diputados los ricos).
- Reformas económicas: Inspiradas en las ideas de los fisiócratas y los liberales. Incluyeron la modificación de algunos impuestos, la libertad de comercio dentro del reino, la libertad de industria y contratación de trabajadores, y la prohibición de huelgas y sindicatos.
- Reformas administrativas y judiciales: Se buscó crear una sola administración y un único sistema judicial. Se dividió Francia en 83 departamentos.
- Reforma de la Iglesia Católica: A través de la Constitución Civil del Clero. Se privó a la Iglesia de buena parte de sus ingresos y tierras, que pasaron a ser bienes nacionales. Además, los clérigos debían jurar obediencia al Estado, por lo que se opusieron y se convirtieron en contrarrevolucionarios.
Gobierno de la Convención (1792-1794)
En abril de 1792, Francia declaró la guerra a las monarquías europeas. Los contrarrevolucionarios fueron considerados traidores al país, empezando por Luis XVI, quien estaba tratando con países enemigos. Las derrotas militares ocasionaron las protestas del pueblo de París, que acabó sublevándose en agosto de 1792.
Tras esta revuelta, se implantó la República y se convocó una nueva asamblea legislativa, la Convención, elegida por sufragio general masculino. Las medidas más importantes fueron:
- Aprobación de la Constitución de 1793: Instauraba una república basada en el sufragio general masculino. Incluía derechos como el trabajo, la asistencia y la educación. La soberanía procedía del pueblo. El poder ejecutivo lo ejercía un consejo de 24 miembros. Se abolió la esclavitud en las colonias francesas y se introdujo el referéndum.
- Medidas excepcionales (El Terror): Para combatir la traición, se creó un Comité de Salvación Pública y un Tribunal Revolucionario. La pena máxima fue la guillotina, y a esta etapa se la denominó El Terror.
- Control económico: Se establecieron el precio del pan y de otros alimentos, y se requisaron bienes y riquezas.
