Intervención de España en Marruecos (1904-1927): Causas, Hechos y Consecuencias
Causas de la Intervención
- España, tras el Desastre del 98 y en el marco del imperialismo dominante en Europa, intentó recuperar el prestigio nacional maltrecho y poner fin al “aislamiento exterior”. Por ello, Marruecos fue el eje de la política exterior del primer tercio del siglo XX.
- En la Conferencia de Algeciras de 1906, Francia y España fijaron sus respectivas zonas de influencia. A España le correspondió la zona norte, cuya pieza esencial era el Rif. Esto obligó al gobierno español a incrementar el contingente de tropas y acometer campañas militares para someter el territorio y asegurar la explotación de las riquezas mineras.
La Semana Trágica de Barcelona (1909)
En julio de 1909 se produjeron graves enfrentamientos entre las tropas españolas y los rifeños. El gobierno decidió enviar refuerzos peninsulares y movilizó a los reservistas de Cataluña, muchos de ellos padres de familia. El embarque de las tropas en Barcelona desencadenó un movimiento de protesta contra la guerra, con una huelga general.
La emboscada en el Barranco del Lobo (Marruecos), con numerosas bajas de soldados españoles, encendió aún más la huelga, que degeneró en una revuelta espontánea, conocida como la Semana Trágica de Barcelona. El gobierno reprimió con dureza la revuelta. El fusilamiento del anarquista Francisco Ferrer Guardia, acusado sin pruebas del levantamiento, produjo un gran escándalo internacional, lo que llevó a Alfonso XIII a pedir la dimisión del presidente del gobierno, Antonio Maura.
Establecimiento del Protectorado de Marruecos (1912)
En 1912, un nuevo tratado con Francia sentó las bases del Protectorado franco-español en Marruecos.
Definición de Protectorado
Territorio colonial donde ya existía un Estado con su propia administración, que la potencia colonial en teoría respetaba, pero en la práctica gobernaba y ejercía el control político y militar.
Los pactos con los jefes indígenas y la interrupción de las operaciones militares durante la Primera Guerra Mundial mantuvieron el protectorado tranquilo. Sin embargo, al término de la guerra y con la reanudación por parte de Francia de su política colonial, el gobierno español trató de hacer completa y efectiva la ocupación del territorio que le había correspondido en el acuerdo franco-español de 1912.
El Desastre de Annual (1921)
Hacia 1921, el gobierno estaba decidido a someter su zona del Protectorado de Marruecos. El precipitado avance del general Silvestre en la zona de Alhucemas provocó una rebelión generalizada de rifeños, encabezados por Abd el-Krim, que derrotaron a las tropas españolas en Annual (1921), con cuantiosas pérdidas humanas (más de doce mil muertos). El general Silvestre había penetrado en un territorio difícil, y la derrota supuso, además de las bajas, la pérdida de territorios que habían costado años de esfuerzo.
Consecuencias Políticas del Desastre de Annual
La tragedia de Annual tuvo graves consecuencias políticas y fue una de las principales causas del fin del régimen parlamentario de la Restauración. La cuestión de las responsabilidades produjo enfrentamientos y tensiones durante los dos años siguientes, generando descontento en el ejército, en cuyo seno se fue fraguando una creciente hostilidad al sistema. Las responsabilidades alcanzaron al propio Rey, Alfonso XIII, al que se acusó de haber sido el principal incitador de Silvestre para realizar el avance que terminó en la carnicería de Annual.
La presión en el Parlamento de los liberales y de las fuerzas antidinásticas, sobre todo de los socialistas, consiguió que el ejército instruyese un expediente para determinar las responsabilidades militares. Dicho expediente se encargó al general Picasso (el “Expediente Picasso”) y tuvo como consecuencia el procesamiento de algunos militares, pero se soslayó la actuación del Rey. La oposición no admitió esos límites en la depuración de responsabilidades y se creó una comisión parlamentaria para investigar el asunto.
Pero esta comisión no pudo presentar su informe ni debatirlo a causa del golpe de Estado del general Primo de Rivera que, en septiembre de 1923, puso fin al sistema político de la Restauración. Comenzó así la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930).
El Desembarco de Alhucemas (1925) y el Fin de la Guerra del Rif
Tras el Desastre de Annual, el ejército español era materialmente incapaz de recuperar el territorio perdido. Por ello, se optó por una política de contención orientada a impedir la expansión de la zona rebelde. Durante la dictadura de Primo de Rivera se abordó con decisión el problema del protectorado.
Se llegó a un acuerdo con Francia para actuar conjuntamente y se organizó una retirada de las posiciones más vulnerables. Finalmente, se llevó a cabo una gran operación de desembarco en el puerto de Alhucemas en 1925.
Consecuencias y Rendición
Logrado el objetivo del desembarco en Alhucemas, el cabecilla rifeño Abd el-Krim empezó a retroceder, viéndose obligado a rendirse ante las autoridades francesas. En julio de 1927 se dieron por terminadas las campañas de Marruecos.