La Era Fundacional de las Provincias Unidas (1813-1820)
1. La Asamblea General del Año XIII: Soberanía, Generalidad y Carácter Constituyente
La Asamblea del Año XIII fue convocada por el Segundo Triunvirato en las Provincias Unidas del Río de la Plata. Su objetivo principal era establecer un sistema institucional para los pueblos recién emancipados.
¿Fue Soberana, General y Constituyente?
La Asamblea se proclamó “soberana”, situándose por encima de cualquier otra autoridad y con facultades para obrar con total independencia.
No fue General, ya que no todas las provincias asistieron. Estuvieron ausentes las del Alto Perú, la Banda Oriental y Paraguay. De hecho, la Asamblea rechazó a los diputados enviados por la Banda Oriental.
La denominación “Constituyente” se justificó porque, a pesar de no haber dictado formalmente una Constitución, su labor social, económica, política y jurídica equivalió a la promulgación de un texto fundamental. Sin embargo, su carácter nacional fue limitado, pues sus diputados no representaban a la totalidad de las provincias.
Leyes y Reformas Sancionadas por la Asamblea
La Asamblea del Año XIII llevó a cabo importantes reformas que sentaron las bases de la futura nación:
- Estableció el Escudo Nacional Argentino.
- Encargó la composición del Himno Nacional Argentino.
- Aprobó la ley conocida como “Ley de Libertad de Vientres”.
- Decretó la liberación de todos los esclavos que llegaran en adelante al territorio.
- Eliminó mayorazgos y títulos de nobleza.
- Eliminó la Mita y el Yanaconazgo.
- Dio el nombre de Provincias Unidas del Río de la Plata al territorio.
- Redactó un “Estatuto para el Supremo Poder Ejecutivo”. En este, la Asamblea se reservaba el derecho de nombrar y remover a los miembros del Triunvirato cuando lo considerase conveniente.
- Creó el cargo de Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
2. José Gervasio Artigas y el Federalismo Oriental
A principios de 1813, el caudillo José Gervasio Artigas reconoció a la Asamblea General y decidió el envío de representantes de la Banda Oriental.
Diputados e Instrucciones
El 5 de abril de 1813, un Congreso reunido en Peñarol aprobó un temario de ocho puntos y nombró seis diputados. Las instrucciones de Artigas estaban contenidas en veinte artículos, inspirados en gran medida en la Constitución de los Estados Unidos de América. Estas instrucciones alarmaron a la Asamblea por su contenido, ya que atacaban el centralismo de Buenos Aires. El contenido se resumía en la defensa del federalismo:
- Declaración inmediata de la independencia absoluta de las colonias del Río de la Plata respecto a España.
- El gobierno central debería residir necesariamente fuera de Buenos Aires. Todas las provincias debían tener los mismos derechos.
- El sistema de gobierno sería federal y republicano.
- Cuando un ejército nacional traspasase la frontera de una provincia, el jefe de este pasaría a estar bajo la autoridad del gobernador de la provincia.
La Asamblea, dominada por la Logia Lautaro, no era partidaria de obtener la independencia rápidamente, por lo que decidió no reconocer a los diputados de la Banda Oriental. Al enterarse Artigas del rechazo, rompió abiertamente con Buenos Aires y se retiró del Sitio de Montevideo. Ante esta situación, el Director Supremo, Posadas, lo declaró traidor y fijó una recompensa a quien lo entregara vivo o muerto. Desde ese momento, la influencia de Artigas comenzó a crecer en la Banda Oriental, Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, transformándose en un símbolo de la resistencia contra el centralismo porteño.
3. Los Primeros Directorios Supremos (1814-1815)
Directorio de Posadas (1814)
Gervasio Posadas fue el primer Director Supremo, asumiendo el 31 de enero de 1814. El Consejo de Estado estaba presidido por Nicolás Rodríguez Peña. El conflicto más grave que tuvo que enfrentar Posadas fue el que representaba Montevideo, sumado a la actitud de Fernando VII, quien se mostró dispuesto a castigar a los “rebeldes americanos”.
Para Buenos Aires, era imperioso tomar la ciudad de Montevideo, ya que el regreso de Fernando VII al trono español convertía a la ciudad en una “cabecera de puente” para desembarcar tropas y reconquistar el Río de la Plata. La rendición de Montevideo no era una empresa fácil, pues las tropas de Buenos Aires llevaban veinte meses tratando de tomarla. Una acción conjunta entre el ejército comandado por Alvear y la flota de Guillermo Brown minó la resistencia, y el 23 de julio de 1814 se firmó la capitulación.
Al poco tiempo, comenzaron los problemas con José Artigas. El caudillo oriental reclamó de inmediato el retiro de las tropas porteñas y la devolución de las armas tomadas en la plaza fuerte. Posadas no accedió, y la lucha se reanudó. Artigas fue declarado traidor y se puso precio a su cabeza.
Directorio de Alvear y la Revolución de Fontezuelas (1815)
La Asamblea designó a Carlos María de Alvear como Director Supremo por mayoría de sufragios. Prestó juramento el 10 de enero de 1815. Alvear no se mantuvo demasiado tiempo; su gestión fue de tan solo tres meses, lapso en el que contó con el apoyo de la Logia Lautaro.
Cuando intentó un acercamiento con el Ejército del Norte, Rondeau le negó obediencia. Y cuando le ofreció a Artigas el reconocimiento de la independencia de la Banda Oriental a cambio del retiro de sus tropas del Litoral, recibió una negativa por respuesta. La intención de Alvear era detener la creciente influencia de Artigas.
Por su parte, al enterarse San Martín del nombramiento de Alvear, presentó su renuncia como gobernador Intendente de Cuyo. Alvear aceptó su dimisión, nombrando al coronel Gregorio Perdriel en su lugar. Fue entonces que el Cabildo mendocino rechazó la medida y confirmó a San Martín en su cargo.
Combatido por la opinión pública, desobedecido en el Norte y en Cuyo, con el Litoral y la Banda Oriental en manos de Artigas y con varias provincias bajo la directa influencia del caudillo oriental, el poder de Alvear se circunscribía a una estrecha franja de territorio bonaerense. Los opositores a Alvear acordaron con Artigas, quien dispuso avanzar sobre Santa Fe como paso previo a Buenos Aires. El Director Supremo movilizó las tropas a las órdenes de Álvarez Thomas. Al llegar a la localidad de Fontezuelas, Álvarez Thomas se sublevó contra Alvear (3 de abril) e inició relaciones con Artigas.
Ante el giro de los hechos, Alvear presentó su renuncia al cargo, pero reteniendo el mando de las tropas. El 15 de abril, el Cabildo aceptó su dimisión, disolvió la Asamblea y se atribuyó funciones de gobierno. Alvear entregó el mando del ejército al general Viamonte y se exilió a Río de Janeiro en una fragata inglesa.
4. El Contexto Internacional (1814-1815)
El Congreso de Viena
Fue un encuentro internacional celebrado en Austria, convocado con el objetivo de restablecer las fronteras de Europa tras la derrota de Napoleón Bonaparte y reorganizar las ideologías políticas del Antiguo Régimen. Su intención era retornar Europa a la situación anterior a la Revolución francesa de 1789. La reunión se llevó a cabo desde el 1 de octubre de 1814 hasta el 9 de junio de 1815. La reunión tuvo como base dos grandes principios: el Principio Monárquico de Legitimidad y el Principio de Equilibrio.
La Santa Alianza
Fue un tratado de carácter personal firmado por los monarcas de Austria, Rusia y Prusia, creado en el Congreso de Viena en 1815 después de la derrota de Napoleón. Los tres monarcas prometieron mantener en sus relaciones políticas los preceptos de justicia, caridad y paz. Suponía basar las relaciones internacionales en el cristianismo y se declaró abierta a quien aceptara sus principios.
Situación en España
El 2 de febrero de 1814, las Cortes españolas publicaron una serie de medidas ante el inminente regreso de Fernando VII, con el objeto de imponerse al monarca.
- 22 de marzo de 1814: Fernando VII vuelve a España luego del exilio.
- 29 de abril de 1814: Culmina la independencia española.
- 4 de mayo: Fernando VII suspende las Cortes de Cádiz.
- 23 de mayo: España pierde finalmente la ciudad de Montevideo.
5. El Congreso de Tucumán y la Declaración de Independencia
Hacia 1815 se había convocado a las provincias del Río de la Plata para que eligieran diputados para un congreso que iba a celebrarse en la ciudad de San Miguel de Tucumán. El 25 de marzo de 1816, el Congreso iniciaba sus sesiones con un plan de trabajo definido: declarar la independencia nacional y dictar una constitución para las Provincias Unidas. Los congresales eran 33 miembros, entre ellos 17 abogados y 13 sacerdotes.
Provincias Ausentes
Todas las provincias de la Liga Federal (Banda Oriental, Corrientes, Entre Ríos, Misiones y Santa Fe) intentaron enviar a sus representantes, pero estos fueron aprisionados por los agentes del Directorio.
Las provincias del Alto Perú, que habían integrado el Virreinato del Río de la Plata, no enviaron diputados ya que se encontraban bajo el poder del ejército realista.
Paraguay tampoco se presentó porque se negó a reconocer la jurisdicción de ningún gobierno instalado en Buenos Aires.
La Declaración y la Forma de Gobierno
El objetivo de dictar una constitución que organizara al Estado quedó relegado temporalmente. Se discutió intensamente la forma de gobierno: monárquica o republicana. Manuel Belgrano propuso una monarquía constitucional, dirigida por un rey descendiente de la cultura incaica, argumentando que las repúblicas estaban en retroceso.
Un par de días después de declarar la independencia, el 9 de julio de 1816, se abrió el acta de nuevo para agregar que la independencia no era solo de España, sino de “toda otra dominación extranjera”. El Congreso estableció a Juan Martín de Pueyrredón como Director Supremo.
6. Directorio de Pueyrredón (1816-1819)
Pueyrredón ejerció su cargo como Director Supremo desde junio de 1816. Fue el Director de Estado de acción más trascendente.
Apoyo a la Campaña Libertadora
El principal objetivo de Pueyrredón fue la realización de la expedición libertadora a Chile y Perú, acordada con José de San Martín, para poner fin a la Guerra de la Independencia Argentina. Pueyrredón dispuso la creación del Ejército de los Andes, nombró a San Martín general en jefe y ordenó la ejecución de la campaña.
El Conflicto con Artigas y las Misiones Diplomáticas
En julio de 1816, las tropas portuguesas invadieron la Banda Oriental, lo cual fue bien visto por Pueyrredón y el Congreso, ya que se eliminaba la influencia de Artigas sobre las provincias (además de que Artigas representaba una tendencia política contraria al centralismo) y se esperaba que Portugal no apoyara una eventual invasión española al Río de la Plata.
Durante el Directorio de Pueyrredón se realizaron dos misiones diplomáticas paralelas en busca de apoyo y una forma de gobierno monárquica:
Misión Valentín Gómez (Europa)
Valentín Gómez fue designado para buscar un príncipe o rey que gobernase las Provincias Unidas bajo una monarquía constitucional. Se dirigió a las cortes europeas. Primero visitó Francia, donde su primer candidato, el Duque de Orleans, lo rechazó y propuso a Carlos Luis de Borbón, duque de Luca, pariente de Fernando VII. La misión fracasó porque Francia no quería enemistarse con Fernando VII, con quien había firmado el acuerdo de la Santa Alianza. Además, en Francia existía una monarquía absoluta, mientras que se ofrecía una constitucional.
Misión Manuel José García (Río de Janeiro)
El gobierno de Pueyrredón encomendó a García una expedición a Río de Janeiro. La misión de García era llevar instrucciones a las autoridades portuguesas:
- Instrucciones Públicas: El gobierno porteño declaraba que no permitiría el ingreso de tropas portuguesas en la Banda Oriental.
- Instrucciones Reservadas: Estas eran las verdaderas instrucciones. El gobierno porteño cedía la Banda Oriental a cambio de la eliminación de la influencia de Artigas.
- Instrucciones Muy Reservadas: Solo se utilizarían si a los portugueses no les alcanzaba con la Banda Oriental. Pueyrredón estaba dispuesto a entregar Corrientes o Entre Ríos, pero nunca Santa Fe. A cambio, debían entregarles un príncipe que gobernaría el Río de la Plata mediante una Monarquía Constitucional.
7. El Directorio de Rondeau y la Constitución de 1819
En 1819, el Congreso aprobó una Constitución que reflejaba los intereses centralistas y monárquicos del gobierno. Era el marco adecuado para la instalación de una monarquía constitucional. Aunque el Congreso poseía representantes de las provincias, estos se acomodaban a las políticas del gobierno central, dejando a las provincias a su suerte.
Estructura de la Constitución de 1819
La Constitución señalaba la división de poderes:
- Poder Ejecutivo: El titular sería el Director, con una duración de cinco años en sus funciones y solo podía ser reelegido una vez. Era el jefe supremo de las fuerzas de mar y tierra.
- Poder Legislativo: Congreso Nacional bicameral, compuesto por Representantes y Senadores.
- Poder Judicial: Alta Corte de Justicia, compuesta por siete jueces y dos fiscales.
Lo más importante de esta Constitución es que prácticamente desconocía la existencia de las provincias y no especificaba quién elegía los gobiernos provinciales, infiriéndose que estos serían elegidos por el gobierno central.
Rechazo Provincial y la Caída del Directorio
Esta Constitución fue rechazada por las provincias, ya que desconocía sus deseos autonomistas y federales. El descontento propició la renuncia de Pueyrredón en 1819, desprestigiado por la Constitución y las negociaciones con Europa, y fue reemplazado por José Rondeau.
No hubo grandes cambios entre el Directorio de su antecesor y el de Rondeau: se siguió buscando apoyo en el exterior, se mantuvo el centralismo y hubo un profundo desprecio contra la Banda Oriental y los federales. Su mando no era efectivo fuera de Buenos Aires: mientras que Cuyo y Salta eran aliados, Córdoba y Tucumán se manejaban con mucha autonomía, y las provincias litorales negaban toda autoridad al gobierno porteño.
La Sublevación de Arequito y la Batalla de Cepeda (1820)
Rondeau quiso terminar con los federales cuanto antes, en especial contra los sublevados en Santa Fe. Ordenó a José de San Martín que trajera el Ejército de los Andes, pero San Martín se negó. Ordenó además a Belgrano que trajera al Ejército del Norte; Belgrano accedió, pero enfermó y delegó su puesto a Fernández de la Cruz.
Al llegar a la posta de Arequito, los oficiales Bustos, Paz, Ibarra y Heredia comenzaron una sublevación (enero de 1820), desconociendo las órdenes del Directorio (pensaban que se debía acabar con la guerra civil de manera pacífica) y ordenaron al ejército regresar a Córdoba. Bustos asumió como gobernador en Córdoba, al igual que Ibarra en Santiago del Estero y Heredia en Tucumán. Se iniciaba así el proceso de autonomías provinciales conducido por caudillos locales.
El 1 de febrero de 1820, los caudillos federales Estanislao López (Santa Fe) y Francisco Ramírez (Entre Ríos) derrotaron a las fuerzas directoriales en la Batalla de Cepeda. Esta derrota significó el fin del Directorio y la disolución del Congreso, dando inicio a la Anarquía del Año XX y al surgimiento de las provincias autónomas.