La Expansión Colonial Europea: Un Recorrido Histórico
La expansión colonial europea, un fenómeno clave del siglo XIX y principios del XX, se caracterizó por la ambición de las potencias por controlar vastos territorios y recursos. Este proceso transformó el mapa mundial y dejó un legado complejo en las sociedades colonizadas y colonizadoras.
La Expansión Colonial Francesa: Etapas y Territorios
La expansión colonial francesa se distinguió por varias etapas significativas:
Primera Etapa: Época de Luis Felipe de Orleans
- Durante su gobierno, se llevó a cabo la ocupación de Argelia, que se convirtió en un importante centro de inmigración de colonos.
- Argelia, conocida como el ‘granero de Francia’, destacaba por su abundante producción de cereales.
Segunda Etapa: Napoleón III
- Napoleón III intentó conquistar Egipto, pero fue derrotado por los británicos, a pesar de que el Canal de Suez fue una obra impulsada por el francés Ferdinand de Lesseps.
- Francia, sin embargo, consiguió establecer un protectorado en Egipto.
- También extendió su dominio al Congo Francés, algunos archipiélagos de Oceanía, Cochinchina y Camboya.
Tercera Etapa: La Tercera República
- Esta fase republicana marcó la culminación del imperio colonial francés.
- Se ocupó Túnez, lo que generó una masiva protesta por parte de Italia.
- Se inició la entrada en el Sahara, partiendo desde Senegal y Argelia.
- Francia sufrió un duro golpe al perder Egipto, pero a cambio logró penetrar en la zona ecuatorial, al oeste de Sudán y Argelia.
Acuerdos y Conflictos Territoriales
Franceses y británicos llegaron a un acuerdo: todos los derechos sobre Egipto quedaron en posesión británica, mientras que Francia obtuvo el control sobre Marruecos. Este reparto provocó la protesta de Bismarck, quien tenía interés en las minas del Rif.
En 1906, se convocó la Conferencia de Algeciras, presidida por Inglaterra, Francia, Alemania y España. En esta conferencia se estipuló la independencia marroquí bajo el protectorado de las grandes potencias europeas, con la mayor parte del control para Francia. La ocupación efectiva por parte de Francia generó un enfrentamiento con Alemania.
En una segunda fase de la Conferencia de Algeciras, se llegó a un acuerdo para la distribución de África:
- El norte de Marruecos fue asignado a España.
- Francia se quedó con el resto de Marruecos.
- Alemania recibió una franja del Congo Francés, que se unió a Camerún.
Expansión en Indochina y Madagascar
- En 1877, Francia se apropió de lo que se conoció como la Unión Indochina, que incluía Laos, Vietnam y Camboya, así como parte de lo que actualmente es Tailandia.
- A finales de siglo, la expansión francesa culminó con la toma de Madagascar.
Diferencias en la Política Colonial Francesa e Inglesa
Existía una diferencia notoria entre la política colonial francesa y la inglesa:
- Francia tendía a asimilar a las aristocracias nativas y establecía un sistema administrativo centralizado en sus colonias, a diferencia de Inglaterra, que adoptaba un enfoque más indirecto.
- Francia mostró un talante más humanitario a la hora de conceder la independencia.
Crecimiento del Imperio Francés
Hasta 1870, Francia poseía solo 1 millón de kilómetros cuadrados en colonias. A principios del siglo XX, esta cifra ascendía a 10.5 millones de kilómetros cuadrados, un crecimiento proporcionalmente mayor que el de Inglaterra. Este impulso se debió a tres motivos principales:
- Sociedades Geográficas: Con una vocación civilizadora, estas sociedades promovieron la exploración y la buena intención de ‘civilizar’ a los indígenas.
- La Lengua Francesa: Considerada la única lengua culta del mundo, su difusión fue un motor de expansión cultural.
- Capacidad Financiera: El auge y la gran capacidad de las finanzas de Francia facilitaron la inversión en la expansión colonial.
La Expansión Colonial Alemana
Bismarck fue el primero en darse cuenta de la importancia económica de las colonias. Aprovechando el prestigio del II Reich, convocó una conferencia donde reunió a las naciones que carecían de colonias. En esta conferencia, se concedió a título personal el Congo a Leopoldo II de Bélgica.
Al margen de esta conferencia, y ejerciendo su poder, Bismarck estableció protectorados en Namibia, Camerún, Togo y Tanzania. Además, se apropió de diversas islas en el Pacífico, como las Islas Marianas. También organizó una guerra en la ciudad china de Tsingtao, lo que le permitió participar en el comercio chino.
La Expansión Colonial Rusa
La expansión rusa se desarrolló en tres líneas principales:
- Hacia el Mediterráneo: A expensas del Imperio Turco, que se extendía hasta los Balcanes. Esta línea fue frenada por las potencias occidentales, especialmente el Imperio Austro-Húngaro.
- Hacia la India: Ocupando Turkestán en Asia Central, donde fue frenada por Inglaterra.
- Hacia China: Ocupando Manchuria, Port Arthur y la zona de Dairen. Los intereses rusos chocaron con los japoneses, lo que provocó la Guerra Ruso-Japonesa (1904-1905) y marcó el comienzo de la hegemonía japonesa en el Extremo Oriente.
Consecuencias Históricas y el Impacto en los Pueblos Dominados
La cultura europea influyó en las colonias, difundiendo conocimientos técnicos e ideológicos que, paradójicamente, sirvieron de base para futuros procesos de emancipación e independencia. Sin embargo, esta implantación cultural no fue pacífica, ya que los colonizadores no respetaron los derechos de los indígenas, a quienes consideraban una raza inferior en todos los aspectos.
Económicamente, las colonias no representaron un gran enriquecimiento para las metrópolis al principio; de hecho, supusieron una sangría de recursos, ya que se necesitaba mucho dinero para establecer fábricas e infraestructuras de explotación, como vías férreas y carreteras. No obstante, a largo plazo, la rentabilidad fue altísima.
Además de los beneficios económicos, uno de los aspectos más prácticos para los europeos fue el ‘efecto válvula de escape’, que sirvió para aliviar la saturación de población en las metrópolis.
En las colonias se generaron sociedades duales, donde convivían yuxtapuestas (a menudo en barrios separados) con sistemas políticos y económicos diferentes. Cada lugar y colonia tuvo su propia evolución hasta lograr su independencia.
El balance del colonialismo es un tema muy polémico. Si creemos en la máxima de que ‘el fin no justifica los medios’, no podemos admitir como válido y beneficioso el colonialismo tal como se llevó a la práctica. Los métodos utilizados en la modernización de las colonias fueron, en la mayoría de las ocasiones, excesivamente inhumanos.
El Imperio Británico: La Potencia Global
El Imperio Británico se anticipó al resto de potencias desde la descomposición del Imperio Español. Hacia 1850, Gran Bretaña disponía de:
- Escalas comerciales por todo el mundo (desde el siglo XVII).
- Establecimientos comerciales en la costa africana.
- La trata de esclavos (antes de su abolición).
- Colonias de plantación, por ejemplo, en las Antillas, Honduras y las Guayanas.
- Colonias de población blanca, como Canadá, Australia o Sudáfrica.
- La India, que estaba siendo explotada desde 1858 por la Compañía de las Indias Orientales.
En 1876, el Imperio Británico llegó a poseer el 20% de la superficie terrestre, y sobre ese territorio vivía casi la cuarta parte de la población mundial. Sus colonias le proporcionaban prácticamente de todo, desde algodón de la India hasta té de Ceilán.
Entre todas sus colonias, la India fue la más especial, convirtiéndose en el eje del imperio. La India tuvo que firmar un pacto comercial en 1875, facilitado por la construcción del Canal de Suez. Poco después, Gran Bretaña avanzó ocupando casi todo Egipto.
Un momento cumbre que desató el furor y la pasión colonizadora de los ingleses ocurrió en 1858, cuando una rebelión en la India provocó la caída de la Compañía de las Indias Orientales, que administraba los recursos para Inglaterra. Los británicos reprimieron a los indígenas y centralizaron la administración en Londres. Este proceso de furor colonizador alcanzó su punto álgido cuando la Reina Victoria fue coronada como Emperatriz de la India en 1876.
En cuestión de 50 años, la extensión del imperio inglés alcanzó los 33.5 millones de kilómetros cuadrados y una población de casi 400 millones de habitantes. Llegado a este punto, se planteó frenar el avance colonial por el temor a Bismarck, pero Gran Bretaña se alió con Francia y Rusia.
Las primitivas posesiones en África, como Gambia, Ghana, El Cabo o Sierra Leona, perdieron interés para los británicos hacia mediados del siglo XIX, debido a la promulgación de la abolición de la esclavitud. No obstante, estos territorios sirvieron de plataforma para su objetivo primordial: abarcar desde Egipto hasta El Cabo.