La Primera Guerra Mundial (1914 – 1918)

1. Antecedentes del conflicto

1.1 La etapa de la Paz Armada

A finales del siglo XIX, Alemania se convirtió en la primera potencia europea. Con su canciller Bismarck, pretendía aislar a Francia mediante su política de aislamiento. Con este fin, firmó alianzas políticas con Austria-Hungría y Rusia. También mantuvo una política colonial moderada para no enfrentarse al Reino Unido.

Pero la política bismarckiana tropezó con el problema de los Balcanes. Austria-Hungría pretendía expandirse con los territorios independizados del Imperio turco, y Rusia, crear Estados independientes bajo su protección. Otro foco de tensión se encontraba en el reparto colonial de África, ya que había tensión entre Alemania, Francia y el Reino Unido.

Guillermo II promovió la expansión de la influencia alemana. Bismarck dimitió, lo que supuso una apuesta por el aliado austrohúngaro y el inicio de una política de rearme naval, así como el apoyo al Imperio otomano para evitar la presencia rusa.

El período entre 1890 y 1914 es conocido como la Paz Armada.

1.2 La Triple Entente y las crisis prebélicas

El temor a Alemania hizo que Francia y Rusia firmaran una alianza en 1891. Además, Francia y el Reino Unido formaron la Entente Cordiale. Rusia, tras su derrota contra Japón, se aproximó al Reino Unido. En 1907, Rusia, Francia y el Reino Unido formaron la Triple Entente.

La respuesta alemana fue reformar su alianza con Austria-Hungría y con Italia. Hubo cuatro crisis prebélicas antes de la Gran Guerra:

• Primera crisis marroquí (1905): Alemania se enfrentó contra Francia, España y el Reino Unido.
• Crisis bosnia (1908): Alemania apoyó la incorporación de Bosnia a Austria-Hungría.
• Segunda crisis marroquí (1911): Alemania se opuso a la ocupación militar francesa de Marruecos.
• Crisis balcánicas (1912 y 1913): Se iniciaron con las declaraciones de guerra de Grecia, Serbia, Montenegro y Bulgaria contra los otomanos, lo que se saldó con la derrota de estos.

2. Las causas de la guerra

Cinco factores clave provocaron el enfrentamiento bélico:

• En primer lugar, la gran rivalidad franco-alemana, derivada de la Guerra franco-prusiana de 1870. La oposición entre ambos estados aumentó con el crecimiento del nacionalismo. Francia se acercó a Rusia y al Reino Unido.
• En segundo lugar, la creciente oposición del Imperio austrohúngaro y del Imperio ruso en la zona del Danubio y los Balcanes. El expansionismo austriaco chocaba con Rusia, el Reino Unido y Francia. La seguridad del apoyo alemán había permitido a Austria anexionarse Bosnia.
• En tercer lugar, la progresiva confrontación entre el Reino Unido y Alemania, debido a su rivalidad industrial y sus políticas coloniales.
• En cuarto lugar, las tensiones generadas por la carrera imperialista.
• Y en quinto lugar, las tensiones generadas por la carrera armamentística.

3. El conflicto bélico: los acontecimientos

3.1 Los bandos enfrentados

La Gran Guerra enfrentó a dos bloques:

• El primer bloque era la Triple Entente, que eran Francia, el Reino Unido y el Imperio ruso. A este núcleo se incorporaron otros países como Serbia, Bélgica, Italia, Portugal, entre otros.
• El segundo bloque estaba formado por los Imperios Centrales: el Imperio alemán y el Imperio austrohúngaro. A ellos se sumaron el Imperio otomano y Bulgaria.

Los países europeos neutrales fueron, por ejemplo, Suecia y España.

3.2 La chispa que inició el conflicto bélico

El detonante fue el asesinato del archiduque Francisco Fernando y su esposa por Gavrilo Princip el 28 de junio de 1914.

Tras el atentado, Austria, apoyada por Alemania, exigió a Serbia, que contaba con el apoyo de Rusia, mediante un ultimátum, que pusiera fin al movimiento paneslavista.

Serbia, que recibió el apoyo también de Francia y el Reino Unido, se negó a cumplir con el ultimátum.

La guerra se inició con gran entusiasmo popular, reclutamientos masivos y exaltación nacionalista.

Los países movilizaron a todos los hombres en edad de combatir. La mayoría procedía del campesinado y de la pequeña burguesía, ya que los obreros industriales debían mantener la industria de guerra en funcionamiento.

4. El desarrollo de la guerra

4.1 La guerra rápida y de movimientos: 1914

La primera fase de la guerra fue una etapa de grandes movimientos de tropas. Alemania quería una rápida victoria sobre Francia para luego volverse contra Rusia, confiando en que Austria contuviera el avance ruso. Para avanzar hacia Francia, decidió que era mejor conquistar primero Bélgica para así llegar más rápido. Sin embargo, Rusia atacó y penetró el territorio alemán y austriaco. Francia resistió el ataque alemán y atacó Alsacia y Lorena; el Reino Unido envió refuerzos a la línea franco-belga. Alemanes y franceses lucharon por el control de los puertos.

La idea de una guerra corta desapareció y se reveló la necesidad de inventar nuevas formas de combate y nuevos instrumentos bélicos. Apareció una nueva dinámica bélica: la guerra de desgaste y agotamiento, una forma de combate en la que la movilización de los recursos humanos y materiales es crucial y determinante.

4.2 La guerra de posiciones: 1915 y 1916

Entre 1915 y 1916, se produjo la guerra de desgaste mutuo. Los aliados consiguieron el apoyo de Italia y los Imperios Centrales sumaron a su bando el Imperio otomano y a Bulgaria. La guerra extendió su ámbito geográfico. Ambos bandos desplegaron nuevas estrategias bélicas.

Alemania atacó a Rusia en el frente oriental. Tuvo un éxito relativo. Los alemanes ocuparon la Polonia rusa y Austria ocupó Serbia.

Los aliados atacaron Turquía, pero no tuvieron éxito. Sin embargo, sí lo tuvieron en el Cáucaso (entre el mar Negro y el mar Caspio), África y el Pacífico.

En el frente occidental se produjeron las batallas de Verdún y el Somme. Ambas batallas resultaron un fracaso.

4.3 El año crítico: 1917

En 1917, la guerra se había enquistado y ningún bando cedía.

La Revolución Rusa

Rusia desalojó a los zares del poder. Un nuevo Gobierno se mantuvo en la guerra, lo que provocó la decepción de la población. En octubre, el partido bolchevique tomó el poder y decidió salir de la guerra.

En 1918, el Gobierno bolchevique firmó el Tratado de Brest-Litovsk.

La entrada en la guerra de Estados Unidos

El presidente Woodrow Wilson llevó a Estados Unidos a la guerra debido a las agresiones alemanas a los convoyes de suministros estadounidenses, sobre todo tras el hundimiento del Lusitania. Los aliados recuperaron la iniciativa.

4.4 El año decisivo: 1918

Alemania inició una ofensiva en el frente occidental que tuvo éxito inicial, pero que finalmente fracasó debido a que las tropas de Estados Unidos desequilibraron la balanza a favor de los aliados y la moral de la tropa alemana empezó a decaer.

A mediados de septiembre, Austria, Bulgaria y el Imperio otomano pidieron el armisticio a los aliados. Alemania resistió hasta el 11 de noviembre, fecha en que solicitó formalmente el armisticio.

Las consecuencias de la Gran Guerra

5.1 El efecto sociopolítico y económico

En primer lugar, el dominio del Estado sobre la sociedad y la economía. Los enormes gastos financieros impusieron medidas de control sobre la producción y la distribución: nacionalización de las fábricas, control del transporte ferroviario, racionamiento de alimentos y materias primas, la fijación de un sistema de cupos para el comercio y la ampliación de jornadas laborales. También se produjo un crecimiento de la burocracia.

En segundo lugar, se originaron cambios en la estructura social: en la relación entre géneros, en el acceso de la mujer a puestos de trabajo y en los empleos cualificados y polivalentes.

En el plano económico, la guerra supuso la destrucción de recursos. Se aumentó la deuda pública y la inflación. Estados Unidos pasó a ser la primera potencia económica mundial. Europa estaba endeudada con Estados Unidos. Los países derrotados debían pagar indemnizaciones de guerra.

Por último, se produjeron cambios políticos: en el Reino Unido y Francia, el poder civil salió reforzado. En Alemania, el poder militar salió reforzado.

5.3 Los tratados de paz y el ajuste territorial

La Conferencia de Paz de París, con representantes de los vencedores y la ausencia de los derrotados. La iniciativa la tuvieron Estados Unidos, el Reino Unido, Francia e Italia.

• El Tratado de Versalles: este se firmó con Alemania. El Imperio alemán desapareció y perdió todas sus colonias junto con Alsacia y Lorena. Además, Alemania fue obligada a reconocer la responsabilidad del estallido de la guerra, a asumir el pago de las indemnizaciones de guerra, a desmilitarizar Renania y a reducir su ejército a no más de 100 000 hombres.
• El Tratado de Saint-Germain: firmado con Austria, el Imperio austrohúngaro desapareció. Se redujeron las fronteras de Austria, asumió el pago de indemnizaciones de guerra y se prohibió su anexión con Alemania.
• El Tratado de Trianon: firmado con Hungría, se redujeron sus fronteras; Rumanía se anexionó Transilvania; y se crearon los Estados de Yugoslavia, Checoslovaquia y Polonia.
• El Tratado de Sèvres: firmado con Turquía, el Imperio otomano desapareció, y se estableció la República de Turquía de la mano de Kemal Atatürk. Lo que quedaba del Imperio fue repartido entre el Reino Unido y Francia.

También hubo otros cambios territoriales menos importantes, como la independencia de Finlandia, Estonia, Letonia y Lituania. Japón se apoderó de las Marianas y Carolinas y conquistó Shantung.

5.4 Sociedad de Naciones

La Sociedad de Naciones fue la primera organización internacional destinada a evitar una nueva guerra. Su objetivo era mantener la paz mundial mediante la promoción de la seguridad colectiva, el desarme multilateral y la cooperación entre los países integrantes. Contaba con varios medios de actuación: el contacto permanente entre sus miembros, el recurso al arbitraje y la mediación entre naciones, y la adopción de medidas de sanción.

La Sociedad de Naciones tuvo una historia poco eficaz. El estallido de la Segunda Guerra Mundial confirmaría su fracaso, pero la fundación de la ONU permitió salvar parte de su legado.