La Transformación Cultural de Europa Medieval: Santos, Monedas y Universidades

Esta europeización de Europa se puede rastrear a través de la expansión de estos elementos por un lado: la difusión de la devoción a ciertos santos y, por tanto, a ciertos nombres; por otro, la generalización del uso de monedas y pergaminos; y finalmente, la difusión de las universidades. Desde el centro de la vieja Europa, que podemos considerar el centro de Francia, el norte de Italia y el oeste de Alemania, básicamente el núcleo central del imperio Carolingio, se van a irradiar todos estos elementos.

Santos y Nombres

En el siglo XI, el nombre de las personas es un claro indicador del origen étnico de esa persona. 100 años después, en el siglo XII, el nombre ha dejado de ser un indicador de la procedencia del individuo y, en términos generales, podemos hablar de una mayor compactación. Se ha transformado el culto a los Santos y, en consecuencia, se ha transformado la antroponimia. De manera que los santos locales que habían tenido un importante prestigio antes del siglo X reculan a favor de santos más universales (los apóstoles).

A principios del siglo XIII, cuando un ejército de europeos conquista la ciudad egipcia de Damieta, no tiene ningún problema en consagrar dos mezquitas de la ciudad a Edmundo el Mártir y Thomas Becket; sentían una mayor devoción por estos santos.

A finales de la Edad Media, este proceso de homogeneización de los patrones nominales había llegado a unos niveles muy elevados. En la ciudad de Dresde, a principios del siglo XIV, el consejo urbano, el órgano de gestión de la ciudad, estaba formado casi en un 75% por 3 nombres: Pedro, Nicolás y Juan. Esta contracción del repertorio nominal se debe en gran medida a la difusión de nombres y santos pancristianos, y se observa más claramente en las regiones de Europa que son conquistadas a los musulmanes o a los paganos durante este periodo, siglos XII y XIII. Un ejemplo del siglo XIII es el caso de la ciudad de Valencia, en la que tras la conquista de la ciudad, las distintas parroquias (10 en concreto) reciben nombres que pertenecen a apóstoles (Santo Tomás, San Pedro, San Andrés) o a santos internacionales como San Martín. Jaime I no se dedica a rendir culto a San Martín, ya que es un culto local y lo que está de moda es el culto internacional.

Monedas y Pergaminos

Debemos destacar que su difusión fue mucho más lenta que en el caso del Santo Oral europeo. La diferencia entre nombres y santos y monedas y pergaminos es un saber práctico que se puede aprender, pero no copiar. En el periodo 950-1350, la generalización empieza a difundirse, pero esta generalización no es completa hasta el siglo XIV e incluso en sitios donde hasta el siglo XVI no se generaliza la escritura.

Mientras que en el caso de las monedas había sido difusa, en el caso de la acuñación no es simultánea en diversas regiones, sino que tiene un origen muy claro, y el origen es el Penique de Plata instaurado por Carlomagno. Esta moneda Carolingia es una copia de la moneda musulmana que encuentran en la Península Ibérica. A partir de esta moneda se va a desarrollar un nuevo sistema monetario que va a estar vigente en Europa durante todo el Antiguo Régimen. Una libra à 20 sueldos y 1 sueldo à 12 dineros. De manera que desde Sevilla hasta Dresde y desde St. Andrew’s hasta Acre, toda Europa va a utilizar el mismo sistema monetario (no significa la misma moneda). Cada territorio va a acuñar su propia moneda (moneda real, cuyo valor depende de la cantidad de plata que contenga); incluso dentro de un mismo territorio pueden existir diferentes monedas. Si hay varias monedas, se desarrollan las mesas de cambio, por un lado, y las devaluaciones, por otro.

Cecas: lugar donde se realizan las monedas.

De manera que la moneda en el Antiguo Régimen, a diferencia de la nuestra, tiene un valor intrínseco; por tanto, los poderes políticos van a luchar por conseguir el privilegio de acuñar monedas. Una vez que se inicia este proceso de acuñación de monedas, va a experimentar una mayor rapidez en su difusión. En el caso de Escocia, en menos de 200 años, va a pasar de no tener lugares donde se acuñan monedas a existir en su territorio 40 millones de monedas de plata.

La cronología para la difusión de los pergaminos y de la práctica de la diplomacia tiene en la Iglesia su agente principal. En la difusión de la diplomática podemos distinguir 4 etapas:

  • La concesión de pergaminos o diplomas, desde el exterior, a las gentes de ese territorio, por medio del papado.
  • Sigue teniendo a la Iglesia como protagonista, ya que son eclesiásticos quienes conceden los pergaminos.
  • Los poderes laicos locales conceden esos pergaminos, pero estos van destinados básicamente a eclesiásticos.
  • Se desarrollan las chancillerías laicas en las que el poder laico emana pergaminos no solamente a eclesiásticos sino a otros laicos.

La difusión del pergamino, como en el caso de la moneda, tuvo que hacer frente a dos adversidades: Hay que saber hacer un pergamino y, por tanto, dado que existe un proceso de transformación, se convierte en un objeto caro. El pergamino progresivamente se va a convertir en la garantía de derechos, posesiones o de memoria («Lo que no está escrito no ha sucedido»). Los pergaminos marcan o dinamizan las relaciones entre las personas. Acuñar monedas y emanar pergaminos es un testimonio de poder, y este poder se puede concentrar a través de estos elementos: Quien posea una Ceca o un archivo dispondrá de más o menos poder.

Universidades

El tercer elemento que apareció en esa homogeneización cultural fueron las universidades. Una de las grandes aportaciones de la Edad Media fue el nacimiento de las universidades como centros de enseñanza. Posteriormente, en los siglos XVIII y XIX, se incorporaría la investigación.

Las universidades nacen cuando los monasterios habían perdido esa función como centros de saber. Las primeras universidades que se desarrollan entre los siglos XII y XIII recogen un poco la tradición monástica como centros de saber. Cabe destacar el hecho de que las universidades más importantes se van a localizar en el centro de Europa, con París como centro principal. Posteriormente, sobre el siglo XIII y XIV, el número de universidades se incrementará, pero tampoco es casualidad que las universidades más importantes se encuentren dentro de un triángulo formado por Sevilla, Salerno y Cambridge. Obviamente, se crearon universidades dentro del triángulo.

Una característica formal de la Edad Media, que en parte la universidad todavía posee, es el comportamiento de la institución, ya que la universidad es independiente de cualquier otro poder, de manera que funciona por autogestión. París era el centro más prestigioso, pero no era el único; también hacemos mención de Bolonia y de Oxford. París, que va a destacar por el estudio de las artes y de teología, y Bolonia, que se va a convertir en el principal centro de estudio del Derecho.

Desde la Universidad de Bolonia (Italia), se lleva a cabo la recuperación del Derecho romano. Cuando se dice Derecho romano, se refiere a la concepción pública del poder. Las leyes clásicas de Roma se caracterizan por primar, por poner en primer lugar los derechos políticos o, dicho de otra manera, poner en primer lugar el Estado. En Bolonia, un grupo de profesores se dedican a recuperar el Derecho romano. Quienes van a llevar a cabo esta recuperación del Derecho romano van a ser los reyes, identificándose con este derecho de forma muy paulatina. Las Partidas en Castilla o los Furs en Valencia son el intento de incorporar los elementos del Derecho romano que interesan a las monarquías. La incorporación del Derecho romano va a ser muy lenta y progresiva. Pero el camino para llegar a las monarquías absolutas comienza hoy, con la incorporación del Derecho romano.

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