Reivindicación proletaria: 8 horas de trabajo, 8 horas de «ocio» y 8 horas de sueño.
La Segunda Revolución Industrial, que se inició a mediados del siglo XIX (c. 1850 – 1970), fue una segunda fase de la Revolución Industrial. Implica una serie de desarrollos dentro de la industria química, eléctrica, de petróleo y de acero. Otros progresos esenciales durante este período incluyen la introducción de los buques de acero movidos a vapor, el desarrollo del avión y de la locomotora de vapor, la producción en masa de bienes de consumo, el enlatado de alimentos, la refrigeración mecánica y otras técnicas de preservación, así como la invención del teléfono electromagnético. La Segunda Revolución Industrial se considera solo una fase de la Revolución Industrial, ya que, desde un punto socio-tecnológico, no había una clara ruptura entre las dos. De hecho, la Segunda Revolución Industrial fue un fortalecimiento y perfeccionamiento de las tecnologías de la Primera Revolución Industrial.
Este período también marca el advenimiento de Alemania y de los Estados Unidos como potencias industriales, junto a Francia y al Reino Unido. Durante la Segunda Revolución Industrial, las poblaciones urbanas superaron a las del campo, haciendo más importante a las metrópolis.
En los Estados Unidos, la Segunda Revolución Industrial está asociada con la electrificación de Nikola Tesla, Thomas Alva Edison y George Westinghouse, así como con la gestión científica aplicada por Frederick Winslow Taylor. En el pasado, el término «Segunda Revolución Industrial» también fue utilizado en la prensa y por los industriales para referirse a los cambios derivados de la dispersión de las nuevas tecnologías después de la Segunda Guerra Mundial. La emoción y el debate acerca de los peligros y beneficios de la era atómica fueron más intensos y duraderos que los de la era espacial, pero ambos fueron incluidos como motores de una nueva Revolución Industrial http://www.historiacultural.com/2010/07/las-revoluciones-industriales.html.
Características de la Segunda Revolución Industrial
– La sustitución del hierro por el acero en la industria.
– El reemplazo del vapor por la electricidad y los derivados del petróleo como fuente de energía.
– La introducción de la maquinaria automática para dirigir y poner en funcionamiento a otras máquinas.
– Los cambios radicales en los transportes y comunicaciones.
– El creciente dominio y aplicación de la ciencia a la industria.
– Las nuevas formas de organización capitalista: imperialismo, maquinismo y gran industria.
Las invenciones y sus aplicaciones tenían mucho más difusión y descentralización en esta Segunda Revolución que en la primera fase. Este período vio el crecimiento de máquinas operadas capaces de fabricar piezas para el uso en otras máquinas. También surgieron líneas de producción para la fabricación de productos de consumo.
Nuevas Fuentes de Energía
La Segunda Revolución Industrial llevó al hombre al descubrimiento de nuevas fuentes de energía: la electricidad y el petróleo. Con el uso del petróleo se inventaron los motores de explosión (la evolución del motor de combustión interna apareció en muchos países industrializados gracias al intercambio cultural). Estos descubrimientos dieron lugar a los siguientes inventos:
Principales inventos de la Segunda Revolución Industrial
– El Motor de explosión (motor de combustión interna, motor Diesel): Esta máquina reemplazó al motor a vapor, mediante el empleo de un nuevo combustible, que es el petróleo. Lo perfeccionó en 1897 el ingeniero alemán Rudolf Diesel (1858-1913).
– La Electricidad: (Alumbrado público): Fue obra de Thomas Alva Edison (1847-1913). En principio, creó la lámpara incandescente (1879). Posteriormente, fue mejorando con filamentos de corteza de bambú y más tarde, con el de metal. El alumbrado público mejoró las condiciones de vida diaria en el mundo entero. Años después del descubrimiento (1866), se comenzó con la primera gran instalación hidroeléctrica en las cataratas de Niagara.
– El Telégrafo eléctrico: Aparato construido por el norteamericano Samuel Morse (1791-1872) en 1837. Permitía, por entonces, la transmisión instantánea y a distancia de un alfabeto especial, de puntos y rayas, que representaba las letras. Este código fue universalmente adoptado. Las primeras líneas se tendieron para el uso de ferrocarriles y de los gobiernos de Inglaterra (1839), Estados Unidos (1844) y Francia (1856). En 1866, Cyrus W. Field instaló líneas telegráficas a través de los mares, logrando la comunicación entre Estados Unidos y Europa.