Historia Económica: La Revolución Industrial, el Patrón Oro y la Gran Depresión (1760-1896)

La Revolución Industrial y las Transformaciones Económicas

1. La Revolución Agraria

Transformaciones de la agricultura desde el siglo XVIII, debidas a cambios institucionales y a la introducción de nuevas técnicas y tecnología de cultivo.

Cambios Institucionales: Los Enclosures

Los cambios institucionales hacen referencia a la aparición de los enclosures, es decir, el proceso de concentración de la tierra, que se lleva a cabo sobre los terrenos comunitarios y los pequeños terrenos arrendados. Estos cambios se vieron favorecidos por la elevación de los precios.

Se pasa a una propiedad individual gestionada con criterios capitalistas, orientada al mercado. Esta gran propiedad sustituye las propiedades de carácter feudal (campos abiertos, open field, prácticas comunitarias). A su vez, se implantan nuevas técnicas: desaparece el barbecho y aparece el sistema de rotación de cultivos (sistema de Norfolk).

Innovaciones Técnicas y Ganadería

Además, este nuevo sistema incluye las plantas forrajeras para el alimento del ganado, por lo que la ganadería intensiva se introduce dentro de la agricultura, favoreciendo así la disponibilidad de abono y aumentando el rendimiento.

Se introducen además nuevas técnicas, como la mejora de la composición química del suelo, el aumento de labores en la tierra o una mejora en el drenaje de los campos.

Consecuencias de las Innovaciones

Como consecuencia de estas innovaciones, se introduce el método de Jethro Tull, es decir, la siembra en hileras. Este método permite la introducción del arado de Rotterdam, el cual remueve mejor la tierra, siendo también más ligero que los anteriores. También permite la introducción de la sembradora mecánica, que ahorra semillas y mano de obra temporera. Así, la agricultura aumentó su producción, productividad y rendimiento, logrando un excedente que alejó la escasez que había estado presente en la etapa preindustrial (crisis de subsistencia, que obligaban a la importación de alimentos).

Por lo tanto, al no tener que importar, se ahorran divisas, y este capital se destina a inversión. Los agricultores comienzan a demandar productos industriales, como abono, y sustituyendo los utensilios de madera por los de metal, impulsando así la metalurgia. Por otro lado, los beneficios de la agricultura se invierten en la construcción de canales y carreteras, necesarios para el comercio. Además, aparece la especialización.

2. El Papel del Estado en la Economía

El Estado fomenta la economía mediante la construcción de infraestructuras (canales, carreteras) financiadas mediante la elevación de impuestos. Los impuestos fueron derivados de la revolución fiscal y sustituyeron a otros impuestos, como los impuestos sobre la renta. El Estado debe procurar el equilibrio presupuestario; sin embargo, si los gastos superan a los impuestos, se recurre a la emisión de deuda pública. El Estado, a través de la legislación, impulsa la industria y el mercado nacional.

Medidas de Impulso Estatal

Este impulso se realiza a través de medidas como:

  • La eliminación de obstáculos internos (aduanas internas).
  • La unificación de medidas y de moneda, y la acuñación de moneda.
  • El permiso de circulación de billetes.
  • El cambio de legislación estatal, promoviendo la creación de empresas (mediante la eliminación de obstáculos como gremios, monopolios y fijación de precios).
  • La protección de los inventos, mediante la creación de un sistema de patentes.
  • El control de los fraudes para la regulación bancaria.
  • El comienzo de las primeras disposiciones en legislación social.

Nace una nueva legislación que regula el trato entre empresas: el Código de Comercio.

Estructura Empresarial y Políticas Comerciales

Se crean las primeras Sociedades Anónimas (S.A.) y Sociedades Limitadas (S.L.), que permiten a los empresarios responsabilizarse únicamente con el patrimonio de la empresa, a diferencia de las anteriores empresas de responsabilidad ilimitada. Además, se adoptan políticas comerciales positivas para el comercio (aumento o reducción de aranceles):

  • Políticas Proteccionistas: Pretendían proteger el mercado nacional de la competencia exterior, quizás mucho más barata, por lo que suben los aranceles (ej. Gobierno inglés en el siglo XVIII, la Calico Act).
  • Políticas de Libre Cambio: Rebajaban aranceles para favorecer la importación.

Las inversiones del Estado tuvieron un gran peso: invirtieron en el ejército, favoreciendo así la siderurgia. También subvencionó empresas con problemas.

El Papel de los Ayuntamientos y la Educación

Los ayuntamientos también tuvieron un papel importante: crearon capital fijo, realizaron una remodelación urbana (ensanches, barrios nuevos…) y promulgaron leyes en pro de la educación (Ley de Fábricas de 1802, para la escolarización de los empleados; Ley de 1887, para la extensión de la enseñanza primaria).

Además, las organizaciones religiosas docentes realizaron varios programas prácticos, dedicados a la alfabetización; también se crearon escuelas técnicas de nivel superior muy especializadas.

La Industrialización Inglesa: Etapas y Madurez

La industrialización inglesa se divide en dos etapas principales:

  1. Primera Etapa (1760-1840)

    Concentrada en el comercio exterior, apoyada por la revolución agraria y el Estado. Hasta 1830 se apoyó en el sector textil (algodón); a partir de ahí tomaron el relevo las industrias de base (carbón, hierro y maquinaria). Inglaterra importaba materiales para su industria y alimentos. Los productos ingleses son superiores y los transportes mejoran. Así, se adopta una política librecambista. Todo esto hace que el mercado inglés sea superior.

  2. Segunda Etapa (1870-1914): La Madurez

    Madurez de la economía británica en la que se evidencia una detención del crecimiento económico, causada por la incapacidad de producir y vender al mismo ritmo que el resto de economías. Las exportaciones descienden, sobre todo a partir de 1873, cuando hay una crisis mundial que tiene como punto central el aumento de la producción, con su consecuente descenso de la demanda y la bajada de los precios. Derivado de ello, los Estados comenzaron a tomar políticas proteccionistas. Sin embargo, Gran Bretaña mantendrá el librecambismo.

Causas del Estancamiento Británico

La segunda causa de la crisis es la industrialización en los países que quedaban, y su adopción del proteccionismo selectivo, que protegía determinados sectores de la industria. La tercera causa fue la falta de motivaciones técnicas y de nuevas inversiones (acero, electricidad, química). Además, se suma el envejecimiento de la maquinaria. Se mantiene una estructura tradicional basada en empresas familiares. Esto dio paso a un espíritu conservador y un estilo de vida similar al de los terratenientes. Las empresas se dejaron en manos de administradores asalariados. Las empresas británicas no utilizaron nuevas formas de organización, quedándose por tanto a la cola de países como Alemania, que comenzó a construir grandes empresas.

El Patrón Oro y el Sistema Financiero Internacional

El comercio interior emplea la misma moneda; sin embargo, en el comercio internacional se requiere de un sistema monetario que facilitara los intercambios entre las diversas monedas.

Por lo general, en el siglo XIX la base monetaria era la moneda acuñada en metal precioso (oro, plata). Solía tener un doble valor: un valor legal, que fija cada gobierno, y un valor como mercancía, que se lo da la cantidad de metal precioso de cada moneda, sujeto a la ley del mercado.

Sistemas Monetarios del Siglo XIX

A lo largo del siglo XIX los sistemas monetarios que se desarrollan en Europa fueron:

  1. Patrón Monometálico: Una única moneda principal.
  2. Patrón Bimetálico: Una moneda de oro y otra de plata.

La mayoría de los países utilizarían los patrones bimetálicos, excepto Inglaterra, que utiliza el monometálico en oro. Esto se debe a las grandes cantidades de oro brasileño que llegaron a Inglaterra fruto de las relaciones comerciales con Portugal. El Banco de Inglaterra acabará por utilizarlo como base para respaldar la circulación de billetes, que eran convertibles en oro. El resto de países europeos utilizaron el sistema bimetálico, mucho más versátil, ya que utilizaban el oro para los tratos internacionales y la plata para los nacionales.

La Crisis de la Plata y la Generalización del Patrón Oro

En 1848, se descubren en California y Australia minas de oro, lo que inundó el mercado con este metal, produciéndose una caída del valor del oro como mercancía, desplazando progresivamente a la plata de la comercialización, ya que esta es atesorada, produciéndose un proceso de inflación.

Para estabilizar esta situación se crea una unión monetaria en 1864, la cual engloba varios países del área del Franco. Sin embargo, los esfuerzos de esta unión monetaria fracasan al descubrirse minas de plata en Nevada, poniéndose en marcha un proceso similar al de antes, pero con la plata, aumentando el precio del oro, produciéndose así la deflación.

A partir de aquí se generalizará el patrón-oro. El primer país en adherirse será Alemania, aprovechando la indemnización de guerra que le tiene que pagar Francia, la cual estaba fijada en oro.

Condiciones del Patrón Oro

A partir de ese momento se generalizará el patrón-oro, un sistema de cambios fijo, en el cual se establecían unas paridades frente al oro, estableciendo una serie de condiciones:

  • La moneda principal está definida por un cierto peso en oro.
  • Los billetes son convertibles en oro.
  • Los bancos tienen que tener una cantidad de reservas de oro (encaje en oro) proporcional a la cantidad de billetes emitidos.
  • El oro se debe poder comprar y vender libremente.

Bajo estas condiciones el oro debía tener el mismo valor en todos los países adheridos al patrón-oro, con la única diferencia de los costes de transporte y los seguros.

Funcionamiento Práctico del Sistema

La oferta mundial de oro debía corresponder con la oferta monetaria y los precios mundiales; sin embargo, en la práctica no funciona como tal, ya que de haberse ligado las reservas de oro a los billetes no se habría podido financiar la economía internacional.

En la práctica hubo una serie de cambios:

  • Se sustituye la moneda metálica por billetes, lo que obligaba al banco a tener una reserva en oro que asegurase la convertibilidad de los billetes.
  • Si un banco quería hacer más billetes debía comprar más reservas de oro. Ya que no había metal suficiente, el sistema requería de gran disciplina, tanto en la emisión de billetes como en la balanza de pagos (ver gráfica 19/19).
  • Con posterioridad el dinero se sustituye por el dinero bancario (cheques, créditos…).

El oro se quedará limitado a la función de liquidez. Los movimientos bancarios son los que cubren las necesidades de liquidez.

Como resultado del comercio internacional Londres se constituye como centro comercial y financiero mundial, sustituyendo a París, Ámsterdam, Hamburgo…. Aparecerán diversas instituciones especializadas. El buen funcionamiento del patrón-oro se apoyó en el buen funcionamiento de la libra esterlina.

La Gran Depresión (1873-1896)

Entre 1873 y 1896 las economías se ven afectadas por un crecimiento desacelerado, causado por una crisis de sobreproducción tanto en la agricultura como en la industria.

Origen y Consecuencias de la Crisis Industrial

Se trata de un proceso de contracción en el que la producción y los avances tecnológicos crecieron, pero bajaron los precios y los beneficios empresariales. El origen de la crisis industrial está en la rápida transmisión de las técnicas y los avances tecnológicos de la Primera Revolución Industrial al resto de los países europeos, elevando la producción industrial y la productividad, y disminuyendo los costes de producción en los bienes característicos de la Primera Revolución Industrial. El resultado será la caída de los precios de estos bienes, la caída de los beneficios y un aumento de la competencia entre empresas, lo que hace que muchas quiebren y que las menos competitivas sean expulsadas del mercado.

Crisis Agrícola y el Impacto del Transporte

El descenso de los precios agrícolas está directamente relacionado con las inversiones que hicieron los países europeos en diversas zonas de ultramar y en zonas de Europa no desarrolladas, con el propósito de obtener alimentos baratos, para bajar los salarios. El aumento de la producción agraria se posicionó por encima de la población; esto causó un excedente agrario, cuyo resultado será la caída de los productos agrícolas.

Tenemos que considerar también el abaratamiento del transporte, tanto terrestre como marítimo, por la construcción del ferrocarril y la del barco a vapor. La llegada de las materias primas extranjeras impactó considerablemente en la agricultura europea, ya que esta estaba constituida por pequeñas empresas familiares, y estaba en crisis, lo que se traduce en una bajada de los precios. Se hará una reconversión del sector, reduciendo costes, mejorando métodos de cultivo, introduciendo maquinaria y fertilizantes, y especializándose en aquellos productos sin competencia extranjera (vino, aceite, remolacha, hortalizas…).

Consecuencias de la Crisis de 1873

En 1873 se produce la caída de la bolsa de Viena, quebrando así muchos bancos y muchas compañías ferroviarias. Las consecuencias de esta crisis fueron la vuelta del proteccionismo. Este fue un proteccionismo global, que se transformará en un nacionalismo económico, al utilizar la fuerza del Estado en pro del capitalismo nacional, reservando el mercado nacional, y lanzándose a la expansión neocolonialista.

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