Consecuencias de la caída del Imperio napoleónico

La Ilustración


Fue un movimiento intelectual que se difundíó por Europa y América en el Siglo XVIII. Su ideología se recogía en la Enciclopedia, una obra publicada en Francia entre 1751 y 1772, dirigida por los escritores Diderot y D’Alembert. La Enciclopedia resumía todos los acontecimientos de su época y prestaba especial atención a la divulgación científica. Las carácterísticas de la Ilustración fueron: -Desarrollo del antropocentrismo del Renacimiento. -Confianza en la razón humana: se aceptaba solo lo lógico, lo racional). -Fe en el progreso, que hacía a los ilustrados ser optimistas entre el futuro (creían que el desarrollo de la ciencia y de la técnica con los problemas que hasta entonces aquejaban a los seres humanos (enfermedades, escasez de alimentos, supersticiones). -Derecho a la felicidad en este mundo. Los gobernantes debrían procurar la felicidad de los ciudadanos. -La naturaleza se consideraba el principio del bien; por tanto, lo natural era bueno. La naturaleza se copiaba en el arte, se estuadiaba con la ciencia y se intentaba dominar la técnica.

El Nacionalismo

Nacíó a comienzos del Siglo XIX, no como una doctrina, sino como un sentimiento de pertenencia a una misma comunidad o nacíón, cuyos miembros comparten un pasado, una lengua y una cultura comunes. El nacionalismo va asociado a la idea de libertad, ya que los ciudadanos de cada entidad nacional podían ejercer libremente sus derechos y deberes políticos. Los movimientos nacionalistas se desarrollaron a lo largo del Siglo XIX y adoptaron dos formas. Una teoría deseaba la liberación de las naciones sometidas a otras con las que poco o nada tenían común, y sosténía que los pueblos sometidos debían costruir su propio Estado. Defendía el dderecho de cualquier comunidad a convertirse en nacíón si lo deseaba. Otra teoría afirmaba que los teritorios con elementos comunes (lenguas, religión, tradición histórica, etc..), pero políticamente divididos, debían aspirar a contruir un nacíón (casos de Italia y Alemania).

Revolución francesa e Imperio napoleónico –

A finales del Siglo XVIII, el rey Luis XVI de Francia gobernaba de forma absoluta. El estallido de la Revolución francesa supuso el final, no solo de su reinado, sino también de las estructuras del Antiguo Régimen; de ahí la trascendencia histórica de este acontecimiento, que señala el inicio de la Edad contemporánea.-

Las causas de la Revolución francesa


Economía

A partir de 1760, el Estado francés atravesó una crisis financiera, provocada por un fuerte endeudamiento como consecuencia de la Guerra de los Siete Años y de la ayuda prestada por Francia a los colonos de América del Norte en la guerra contra Gran Bretaña. Los problemas económicos se agravaban por los enormes gastos estatales (lujo de la corte, mantenimiento del Ejército, sueldos de los funcionarios…). Al mismo tiempo, las malas cosechas de los años 1788 y 1789 elevaron el precio del pan hasta niveles inalcanzables para los grupos humildes de las ciudades, lo que provocó frecuentes motines. –

Sociales

Los ministros de Hacienda de Luis XVI intentaron reducir la deuda del Estado incrementando los impuestos y haciéndolos extensivos a los estamentos privilegiados (nobleza y clero). Sin embargo, estos se aferraron a sus privilegios (extensión de impuestos) e hicieron fracasar cualquier intento de reforma fiscal. La burguésía, por su parte, deseaba acceder al poder político, y utilizó a los grupos populares como > para alcanzar sus fines. –

Política-ideológicas

Las ideas de los ilustrados proporcionaron los fundamentos ideológicos necesarios para derribar al antiguo Régimen. Además, la independencia de las Trece Colonias de América del Norte había demostrado que era posible llamar a la práctica de estas ideas.

Consecuencias de la Revolución francesa y del Imperio napoleónico

Las más destacadas fueron las siguientes:

El triunfo de las ideas ilustradas provocó la desaparición de las estructuras sociales y políticas del Antiguo Régimen. Con la Declaración del Hombre y del Ciudadano, la igualdad de derechos quedaría establecida para siempre.

El rey pasó de tener un poder absoluto a ser un monarca constitucional. Ya no había súbditos, sino ciudadanos.

Se reconocíó la soberanía nacional, si bien esta fue muy controlada por la burguésía. 

Se aprobaron constituciones y, por primera vez en la historia, se definieron por escrito los derechos y obligaciones de gobernantes y gobernados y se organizó el poder del Estado.

La burguésía alcanzó el poder político que tanto anhelaba, desplazando a la nobleza.

Comenzaron a surgir ideas de independencia en las colonias iberoamericanas, influidas por el triunfo de la Revolución en Francia.

La expansión de las tropas francesas fomentó los movimientos nacionalistas en los países ocupados, pero también contribuyo a difundir las ideas democráticas que habían triunfado en Francia.

La caída de Napoleón no supuso el fin de los principios de la Revolución, ya que nuevas oleadas revolucionarias se extendieron por gran parte de Europa en las décadas de 1820, 1830 y 1840.

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