La Belle Époque: Un Periodo de Paz y Tensión Pre-Guerra

La Belle Époque es el nombre que dieron los europeos a las décadas pacíficas y prósperas precedentes a la Primera Guerra Mundial. El arranque del siglo XX coincidió con una fase de expansión económica, un notable avance tecnológico y una creciente competencia económica, lo que llevó a un aumento de las tensiones nacionales, coloniales e imperialistas. La Segunda Revolución Industrial impulsaba a las potencias a colonizar territorios que fuesen productores de materias primas y mercados reservados para sus manufacturas. A principios del siglo XX, la expansión colonial se agotó y la única manera de conseguir nuevos territorios era arrebatándoselos a otras potencias.

Revoluciones Transformadoras: Rusia y China a Principios del Siglo XX

La Revolución Rusa: Del Zarismo a la Inestabilidad

• En Rusia, el zar Nicolás II gobernaba como monarca absoluto. Los campesinos vivían en un ambiente de miseria y opresión; las clases medias ansiaban reformas; y la rápida industrialización suscitaba recelos externos y un profundo malestar social. La derrota frente a Japón en 1904 generó disturbios. La Revolución de 1905 comenzó con una manifestación reprimida con violencia (el Domingo Sangriento), que fue sofocada con dureza. El zar, ante la presión, concedió una asamblea consultiva de apariencia parlamentaria, la Duma.

La Revolución China: El Fin de un Imperio Milenario

• En China, en 1900, la Rebelión de los Bóxers, dirigida contra las concesiones a las potencias imperialistas, fue aplastada por una coalición extranjera. La dinastía Manchú quedó totalmente desacreditada. En 1911 se proclamó una república que puso fin a un imperio milenario.

La Red de Desconfianza entre Potencias Europeas

Reino Unido, Alemania y Francia: Rivalidades Clave

• Reino Unido: Después de llevar siglos dominando los océanos, recelaba del crecimiento de la flota alemana.
• Alemania: Temía el fortalecimiento de Rusia y aspiraba a constituir un imperio en África y el Pacífico, en zonas reclamadas por británicos o franceses. Para lograrlo, contaba con arrebatar la hegemonía naval a Reino Unido.
• Francia: Quería defender su imperio colonial y deseaba recuperar las provincias perdidas en 1871 (Alsacia y Lorena).

Otras Rivalidades Geopolíticas: Austria-Hungría, Rusia, Italia y Japón

• Austria-Hungría y Rusia: Competían por el control de los Balcanes, donde se disputaban territorios que habían pertenecido al Imperio Otomano. El paneslavismo, o unión de todos los eslavos, era fomentado por Rusia y temido por el Imperio Austrohúngaro, donde los eslavos se sentían relegados.
• Italia y Japón: Consideraban que se les había tratado injustamente en el reparto colonial y pretendían expandirse.

Las Alianzas Militares: Triple Alianza y Triple Entente

La Triple Alianza estaba formada por los Imperios Centrales (Alemania y Austria-Hungría) e Italia, aunque esta revertiría su alianza en 1915. En cuanto a la Triple Entente, los acuerdos entre Francia y Rusia contaban con el respaldo reticente de Reino Unido. Estas tres potencias tenían poco en común aparte de su temor a las ambiciones alemanas.

El Estallido de la Primera Guerra Mundial: Un Conflicto Inevitable

Todo comenzó el 18 de junio de 1914 con el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria. Se sospechaba que los servicios secretos serbios, y quizá los rusos, podían estar detrás del atentado. Alemania vio la ocasión de debilitar a Rusia, que apoyaba a Serbia, antes de que se hiciera más fuerte, e incitó a su aliado, el Imperio Austrohúngaro, a ser intransigente. Serbia se aseguró el apoyo ruso, y Rusia, la alianza francesa. Para entonces, solo Reino Unido e Italia quedaban al margen del inminente conflicto. Viena envió al gobierno serbio un duro ultimátum. Rusia ordenó la movilización general, lo que desató el nerviosismo de Alemania. Se sucedieron declaraciones de guerra entre las Potencias Centrales (Alemania y Austria-Hungría) contra los Aliados de la Entente: Serbia, Rusia y Francia, a los que se unió Reino Unido tras la invasión alemana de Bélgica.

La Guerra de Movimientos: Estrategias Iniciales y Estancamiento

El plan alemán buscaba evitar la lucha simultánea en dos frentes. Quería derrotar a Francia en el frente occidental antes de que se enfrentasen en el frente oriental a Rusia, de la que se esperaba que reaccionara con lentitud. Los alemanes atacaron Bélgica y consiguieron llegar hasta las proximidades de París. Pero el contraataque francés con apoyo británico paralizó la ofensiva. Además, los rusos reaccionaron antes de lo previsto. Pese a las victorias alemanas en el frente oriental, la situación en otoño de 1914 era de estancamiento y así seguiría hasta el final del conflicto.

Expansión del Conflicto: Nuevas Incorporaciones a los Bandos

Las Potencias Centrales: Imperio Otomano y Bulgaria

• De su lado entraron el Imperio Otomano y Bulgaria. Los rusos atacaron a Turquía desde el Cáucaso, mientras que los Aliados alentaban la rebelión de los árabes del Imperio. En el interior del Imperio Otomano, la persecución de las minorías cristianas que simpatizaban con los Aliados desembocó en el genocidio de más de un millón y medio de civiles armenios.

El Bando Aliado: Italia y Rumanía

• Sus incorporaciones principales fueron Italia y Rumanía. La entrada de la primera se esperaba decisiva, pero solo sirvió para abrir un nuevo y sangriento frente en su frontera nororiental con Austria.

La Guerra de Desgaste: Una Lucha Exhaustiva

Esto significa que cada contendiente atacaba con todos los medios disponibles, mientras se estrangulaba económicamente al enemigo. Por ejemplo, en el caso de Alemania, sufría escasez de alimentos y materias primas debido a su aislamiento y dificultaba el abastecimiento marítimo de los Aliados atacando a los barcos neutrales con su flota de submarinos.

El Desequilibrio de la Guerra en 1917: Rusia y Estados Unidos

El equilibrio de fuerzas empezó a tambalearse en 1917 debido a dos sucesos trascendentales, pero de signo contrario:

• El estallido de la Revolución Rusa: Este hecho benefició a las Potencias Centrales, que podían emprender ya conversaciones de paz por separado con Rusia desde una posición de fuerza. Además, la deserción de su socio oriental debilitó a los Aliados.
• La declaración de guerra de Estados Unidos a Alemania: Fue la respuesta de Norteamérica a los ataques submarinos indiscriminados. Aunque la aportación militar estadounidense fue limitada.

El Fracaso de la Ofensiva Alemana y el Fin de la Guerra

Al inicio de 1918, las Potencias Centrales cosecharon victorias en el frente italiano y neutralizaron a Rusia con la Paz de Brest-Litovsk, lo que les proporcionó grandes ganancias territoriales. Sin embargo, la situación en la retaguardia alemana era tan grave que se temía un estallido revolucionario similar al ruso. El alto mando alemán decidió jugar su última baza. En verano lanzó una gran ofensiva en Francia para romper el frente antes de que llegase la ayuda estadounidense; pero franceses y británicos resistieron. En otoño de 1918, los aliados de Alemania, agotados, fueron abandonando la lucha, mientras que en las ciudades alemanas se formaban consejos revolucionarios de obreros y soldados, según el modelo soviético. Ante la inminencia del colapso, el Ejército dio la guerra por perdida: el káiser abdicó y se proclamó la República. El 11 de noviembre, Alemania pedía un armisticio.

La Revolución de Febrero de 1917 en Rusia: El Doble Poder

Al inicio de la guerra, el Imperio Ruso movilizó a millones de soldados, pero el abastecimiento era pésimo. La baja moral de las tropas, sin equipamiento y mal dirigidas, hacía temer un colapso del frente. La dedicación de la industria a fabricar armamento empeoró el nivel de vida de la población. El zar, muy impopular, se negó a emprender reformas inaplazables, hasta quedarse sin apoyos. En febrero de 1917 (marzo en Occidente), una manifestación de obreras contra la carestía inició un levantamiento en la capital, Petrogrado. La monarquía se derrumbó dando paso a un doble poder:

• Un Gobierno Provisional: Sucesor de la Duma, que asumió el poder en espera de la convocatoria de una Asamblea Constituyente. Prometió a los Aliados que Rusia continuaría la guerra.
• Un Sóviet de Obreros y Soldados: Partidario de la paz y de una profunda transformación social. Pronto, el movimiento de creación de sóviets se extendió por todo el país.

Los Catorce Puntos de Wilson: Principios para la Paz

• La libertad de navegación y de comercio: Pues el ataque alemán a barcos neutrales había sido precisamente el motivo de la entrada de Estados Unidos en la guerra.
• La renuncia a la diplomacia secreta: A la que se culpaba del inicio de las hostilidades, aunque en realidad nunca dejaría de practicarse.
• La fundación de una Sociedad de Naciones: Para solucionar los conflictos de manera pacífica.

Los Tratados de Paz Post-Guerra: Reconfiguración de Europa

El Tratado de Versalles: Consecuencias para Alemania

• Alemania asumió la responsabilidad de la guerra. Además de devolver Alsacia y Lorena a Francia, debía pagar reparaciones; como garantía del pago tuvo que aceptar la ocupación del Sarre. Perdió territorios en el Este: Prusia Oriental quedó aislada del resto del país por el Corredor Polaco (o Pasillo de Danzig), que proporcionaba a Polonia una salida al Báltico. Alemania entregó sus colonias, y se le impuso la desmilitarización de Renania y la reducción del ejército y arsenales.

El Tratado de Saint-Germain-en-Laye: La Disolución del Imperio Austrohúngaro

• El Imperio Austrohúngaro se rompió. Nació el Estado de Checoslovaquia, que integraba minorías alemanas y húngaras. Serbia, ahora Yugoslavia, englobaba a croatas, bosnios y eslovenos. Italia obtuvo pequeñas ganancias territoriales.

La Restauración Borbónica en España: Un Sistema en Crisis

Los Borbones volvieron en 1875. El sistema político que se estableció se conoce como la Restauración. En este sistema, dos partidos políticos, el Conservador y el Liberal, se turnaban en el gobierno mediante el fraude electoral. El poder político seguía en manos de una oligarquía. Muchas corrientes políticas, representadas por republicanos, socialistas, nacionalistas vascos y catalanes, se sentían excluidas. Además, la injusticia social dio lugar al auge del anarquismo en el campo andaluz y entre los obreros catalanes. El Desastre del 98 trajo una sensación de fracaso y la percepción, compartida por todos, de que el sistema estaba caduco. El siglo XX comenzaba con ansias de regeneración.

La Crisis de 1917 en España: Tres Procesos Convergentes

Estos procesos fueron:

• Crisis militar: Había rivalidad entre los militares destinados en la Península y los que hacían carrera rápida en el Protectorado de Marruecos. Los descontentos pedían reformas y la modernización del ejército.
• Crisis política: El Gobierno no quería reunir las Cortes, por lo que la oposición convocó en Barcelona una Asamblea de Parlamentarios para asumir las competencias de las Cortes.
• Crisis social: La CNT (sindicato anarquista) y la UGT (sindicato socialista) convocaron una huelga general revolucionaria.