Evolución Política de Al-Ándalus
En Al-Ándalus se estableció un emirato sometido a la autoridad del Califato de Damasco, centro político y religioso del mundo musulmán de esta época. Este se caracterizó por:
- La ocupación del territorio.
- Una gran variedad étnica.
- La evolución hacia la independencia de Bagdad.
Posteriormente, en el Califato de Córdoba, se ejerció un control absoluto por parte del califa (Abd al-Rahman III). Se caracterizó por la centralización fiscal, un robusto poder militar y un proceso de islamización.
A continuación, surgieron los Reinos de Taifas. La desintegración del califato dio lugar a pequeños estados independientes llamados taifas. Estas se hallaban enfrentadas entre sí, por lo que los reinos cristianos se aprovecharon de esta situación y, a cambio de protección, les obligaron a pagar parias. Este periodo fue seguido por las etapas de las invasiones almorávides y almohades.
Para finalizar la evolución política de Al-Ándalus, debemos mencionar al Reino Nazarí de Granada. La llagara nasiva idea d nea usinica procedentes de otros reinos, su debilidad militar debido a los conflictos internos del Reino de Castilla, y la tributación, llevaron finalmente a que fuera conquistada Granada en 1492.
Organización Política en la Península Ibérica: Coronas de Castilla, Aragón y Reino de Navarra
En el Reino de Navarra y la Corona de Aragón existían diputaciones, donde se implantaron importantes funciones políticas.
En Castilla se impuso un modelo autoritario de monarquía en el que el rey tuvo un gran poder. Al mismo tiempo, la monarquía mejoró la recaudación de impuestos y fomentó su control sobre los municipios. Por ello, el rey pudo gobernar sin contar con las instituciones antes citadas. La debilidad de las Cortes se produjo por el desinterés de la nobleza y de la Iglesia en participar en ellas.
En la Corona de Aragón se implantó un modelo diferente, conocido como el modelo pactista. En esta tierra, cada uno de los reinos que la comprendían mantuvo sus propias Cortes. La fortaleza de los nobles y de la Iglesia otorgó a las Cortes un importante poder legislativo; además, el rey, al ser investido, se comprometía a respetar las leyes y costumbres.
El Régimen Señorial y la Sociedad Estamental
Características del Régimen Señorial
El proceso comenzó en los siglos IX y X, y presentó una serie de rasgos comunes en todos los territorios:
- La erosión del poder monárquico: esta pérdida de poder fue consecuencia de las concesiones económicas y de privilegios que se concedieron a los nobles a cambio de sus servicios.
- El fortalecimiento de la nobleza: la nobleza se convirtió de esta manera en la representación del Estado en los dominios que controlaba.
- La inexistencia de un poder centralizado del Estado, debido a la ausencia de un ejército propio y de un código legal público y único.
La Sociedad Estamental
Fue consecuencia de la importancia de la fuerza militar en una sociedad en guerra casi permanente y la influencia de la Iglesia en el terreno ideológico. La sociedad medieval se dividía en nobleza, clero y estado llano. Los dos primeros disponían de privilegios fiscales, sociales y jurídicos. El pueblo abarcaba la mayor parte de la población, carente de privilegios.
La Romanización de la Península Ibérica
La romanización es el proceso de aculturación por el que los pueblos de la Península Ibérica, tras la conquista romana, incorporaron la lengua latina, el derecho, la organización socioeconómica, la organización administrativa, las creencias y las costumbres de la civilización romana.
Medios de la Romanización
Los medios que condujeron a ese proceso incluyeron la conquista militar y la organización administrativa del territorio, así como la extensión de un sistema urbano articulado por una densa red de vías de comunicación basada en complejos trabajos de ingeniería. Las sociedades locales se adaptaron al sistema social romano y su economía se articuló con la del Imperio.
Finalmente, la lengua y escritura latinas se superpusieron a la diversidad previa, y se extendieron también las creencias y costumbres de la civilización romana, así como sus manifestaciones artísticas.
Arte Rupestre en la Península Ibérica: Zonas Cantábrica y Levantina
Arte Rupestre Cantábrico
Se desarrolló durante el Paleolítico Superior.
En la zona Cantábrica, las pinturas se han relacionado con una motivación mágica (favorecer la caza) o religiosa (cuevas-santuarios).
Estas presentan un acusado naturalismo, aunque también aparecen algunos elementos abstractos. Para conseguir un mayor realismo, aprovechan las grietas de la roca para los contornos y la prominencia rocosa para el volumen:
- Predominan las figuras de animales. Apenas se representa la figura humana y, cuando esta aparece, probablemente está relacionada con el artista.
- Son figuras policromadas.
- No existen escenas compuestas, sino que se dibujan animales individuales.
- Las figuras aparecen con frecuencia yuxtapuestas debido al poco espacio.
- Se localizan principalmente en cuevas profundas y oscuras.
Arte Rupestre Levantino
Se desarrolló en los inicios del Neolítico (7000-4000 a. C.).
Las pinturas muestran modos de vida de cazadores-recolectores, bajo la influencia neolítica. De hecho, algunas escenas plasman domesticación de animales y trabajos agrícolas; las figuras aparecen semidesnudas, y la fauna es propia de un clima más cálido, ya que se ubica en la zona mediterránea de la Península.
Estas pinturas son muy distintas a las de la zona Cantábrica:
- Son figuras principalmente humanas, pintadas de forma estilizada y esquemática y con cierto grado de abstracción y sensación de movimiento.
- Se utilizan pocos colores (ocre y negro).
- Representan escenas muy variadas como enfrentamientos armados, cacerías, recolección de miel, danzas, etc. Suelen tener un sentido narrativo.
- En ellas existe una composición, es decir, las figuras están relacionadas unas con otras.
- Se localizan en abrigos rocosos relativamente bien iluminados.
Los ejemplos principales se encuentran en los abrigos de Cogull (Lleida) y Valltorta (Castellón).
La Monarquía Visigoda: Poder de la Iglesia y la Nobleza
El Poder de la Iglesia
La Iglesia alcanzó tanto poder porque era la heredera de las estructuras y del legado cultural romano. Tenía grandes propiedades. Se estableció la costumbre de que en los Concilios se tomaran también decisiones políticas. Los concilios eran reuniones de las élites religiosas y del monarca, que tendrían gran peso político al tener función legislativa.
El Poder de la Nobleza
La nobleza alcanzó el poder porque elegían al rey en la Asamblea, asesoraban al rey en el Aula Regia, y tenían grandes propiedades en las que se daba el protofeudalismo (gentes libres se encomendaban a un noble a cambio de su seguridad, recibiendo tierras y protección a cambio de servicios). Este sistema agrario de producción se llama encomendación. El rey pagaba a los nobles con tierras por los servicios prestados. Con todo ello, la nobleza fue ganando poder. Se estaba gestando el modelo feudal.
Paleolítico y Neolítico: Transformaciones Económicas y Sociales
Economía: De Depredadora a Productiva
Se pasó de una economía depredadora que se practicaba en el Paleolítico (recolección, caza, pesca, carroñeo) a una economía productiva que se adquirió en el Neolítico (agricultura, ganadería).
Evolución Instrumental
Hubo una evolución en el instrumental. En el Paleolítico se practicaban las actividades mencionadas anteriormente, lo que atestigua el instrumental lítico y óseo, que evolucionó hacia piezas de talla cada vez más sofisticada.
La piedra en el Neolítico se pulimenta en vez de tallarla para crear útiles para la agricultura o incluso para conservar y cocinar alimentos.
Del Nomadismo a la Sedentarización
Se pasó del nomadismo a la sedentarización:
- Nomadismo: recorrían territorios muy amplios en busca de medios para sobrevivir.
- Sedentarización: agricultores y ganaderos que evolucionaron hacia la cerámica y, posteriormente, la escritura.
Organización Social
La organización social y su división en el Paleolítico era muy sencilla, basada en el orden natural de edad y fuerza.
En el Neolítico, los grupos sociales se hicieron más complejos; surgió la división del trabajo y, con ella, una jerarquía social.
Las principales causas del cambio son ecológicas, técnicas y sociales.