¿Qué es el imperialismo?
Es la extensión del dominio de un país sobre otros.
Causas del imperialismo en el siglo XIX:
Factores económicos: búsqueda de mercados y materias primas.
Factores políticos: necesidad de dominar lugares estratégicos para controlar el imperio; y las conquistas daban prestigio y orgullo nacional.
Factores demográficos: búsqueda de lugares donde emigrar el aumento de población de las metrópolis.
Factores ideológicos: el sentimiento de los blancos de superioridad y su obligación de civilizar al resto del mundo (tradiciones, lengua, religión). Espíritu aventurero e investigador.
Causas de la Primera Guerra Mundial:
Disputas territoriales entre las potencias europeas, por ejemplo entre Francia y Alemania por Alsacia y Lorena.
La creación de los imperios coloniales provocó tensiones y enfrentamientos constantes.
El rápido crecimiento económico de Alemania rompía el equilibrio.
La falta de colonias de Alemania al llegar tarde al reparto.
Descontento de las nacionalidades que conformaban el imperio austrohúngaro y turco.
La carrera armamentista.
La estrategia de alianzas militares para no quedar aisladas en caso de guerra: Triple Alianza (Alemania, Imperio Austrohúngaro e Italia) y la Triple Entente (Reino Unido, Francia y Rusia).
La excusa para la guerra fue el asesinato en Sarajevo del heredero a la corona austrohúngara por un serbio; a partir de aquí se pusieron en marcha las alianzas.
Novedades de la guerra:
Participó una gran cantidad de combatientes y países, casi toda Europa con sus colonias.
Se usaron nuevas armas como los gases tóxicos, tanques, submarinos, aviación…
Movilización de las retaguardias para satisfacer las necesidades del frente.
Las mujeres tuvieron un papel principal.
Los gobiernos organizaron su propaganda para fomentar el espíritu patriótico.
Fases de la guerra:
Guerra Relámpago: Alemania atacó a Francia en una rápida ofensiva que fue frenada en el Marne, cerca de París; al mismo tiempo se adentró en Rusia.
Guerra de Trincheras: los frentes se estabilizaron y defendieron sus posiciones a cambio de un gran sacrificio.
1917: Retirada de Rusia de la guerra, lo que le permite a Alemania trasladar los ejércitos a otro frente.
1917: Entrada en guerra de Estados Unidos con tropas de refresco y con todo su potencial económico y militar, lo que será decisivo. Firmándose el armisticio el 11-11-1918.
Tratado de Versalles:
Se crea la Sociedad de Naciones (Estados Unidos no formará parte).
Duras sanciones a Alemania.
Aparición de un nuevo mapa Europeo (referencia a estudio externo).
Consecuencias de la Primera Guerra Mundial:
Grandes pérdidas humanas y materiales por parte de los estados europeos, lo que convirtió a Estados Unidos en la primera potencia económica mundial.
La Revolución Rusa:
Antecedentes:
Rusia era un país atrasado y gobernado por el zar de forma absolutista. La oposición al régimen se acrecentó con las derrotas militares en la Primera Guerra Mundial, sobre todo cuando en 1915 el zar asume personalmente el mando del ejército. El hambre asola toda Rusia; campesinos, obreros y soldados desertores forman consejos, que son los llamados soviets.
Revolución de febrero de 1917:
El Zar es obligado a abdicar y asume el poder la Duma (similar a las cortes españolas). Pero el gobierno de los mencheviques no tiene el respaldo del pueblo (sigue la guerra y el hambre).
Revolución de octubre de 1917:
Los bolcheviques, con el apoyo de los soviets, protagonizan una segunda revolución. Las primeras medidas tomadas por Lenin fueron: firmar con Alemania la paz a cambio de grandes pérdidas territoriales; expropiar las grandes propiedades agrarias; y dar el control de las fábricas a los trabajadores.
Las medidas anteriores dieron lugar a una cruenta guerra civil.
Stalin:
A Lenin lo sustituyó Stalin, quien instauró un sistema político totalitario. Fue considerado un líder infalible, cuyas decisiones había que acatar sin crítica; quienes se atrevieran eran eliminados (política de terror mediante las purgas). El principal objetivo de Stalin fue convertir a la URSS en una gran potencia económica mundial.
Los felices veinte:
Se llama así al periodo posterior a la Primera Guerra Mundial en el que se iba olvidando lo ocurrido y el nivel de vida prosperaba.
La Gran Depresión:
Es el momento en que se produce la caída de la bolsa de Nueva York y su repercusión.
Causa:
La economía americana adolecía de una dependencia excesiva de los créditos: las empresas para crecer pedían préstamos; los consumidores, movidos por el afán de consumo, pedían préstamos para adquirir viviendas, automóviles, electrodomésticos; incluso, algunos, movidos por las ganancias de la bolsa, solicitaban préstamos para invertir en bolsa.
Las primeras bajadas de las acciones el jueves 24 de octubre de 1929 provocaron el pánico y el deseo de vender para devolver los préstamos; sin embargo, al no haber compradores, estas bajaron mucho de valor y los préstamos no pudieron ser devueltos. A partir de aquí todo se encadena y se interrelaciona: los bancos van a la bancarrota y no pueden devolver los ahorros de particulares y empresas; estas cierran y despiden a los obreros que pierden su poder adquisitivo y no pueden devolver préstamos o comprar productos que no venden las empresas, que tienen que cerrar.
Al repatriar Estados Unidos sus inversiones y exigir el pago de sus préstamos a los países extranjeros, la crisis se extendió.
¿Cómo accedió Mussolini al poder?
Italia quedó descontenta por el reparto tras la victoria en la Primera Guerra Mundial; la política se radicalizó entre comunistas y fascistas.
Ante el fracaso del fascismo en las elecciones, su líder, Benito Mussolini, organizó la «Marcha sobre Roma». El rey, Víctor Manuel III, ofreció a Mussolini la formación de un nuevo gobierno. Poco a poco fue acabando con el régimen democrático.
¿Cómo accedió Hitler al poder?
Los alemanes consideraron el Tratado de Versalles humillante; además, la situación económica era mala y después del Crac del 29 empeoró aún más. Este ambiente fue aprovechado por Hitler para llegar al poder en las elecciones de 1930. Una vez instalado en el gobierno, eliminó a sus oponentes ayudado por la SS y la Gestapo.
Política expansionista de Hitler:
La doctrina nazi defendía la necesidad de un espacio vital para los germanos; de tal manera, contraviniendo los acuerdos de Versalles, llevó una política de expansión de Alemania que fue la causa de la Segunda Guerra Mundial.
1936: Ocupación de la zona desmilitarizada de Renania.
1938: Anexión de Austria.
1939: Ocupación de Checoslovaquia y, por último, Polonia, lo que supuso la declaración de guerra por parte de Reino Unido y Francia.
Características de la Segunda Revolución Industrial:
Nuevas fuentes de energía como la electricidad y el petróleo.
Otras industrias como la química (farmacéutica, abonos, tintes, explosivos) y las eléctricas (alumbrado público, tranvías, radio…).
Desarrollo de nuevos medios de transporte: aviación y automóvil.
Nuevos sistemas de producción: división del trabajo y cadena de montaje.
Publicidad para inducir al consumo.
Aparición de uniones empresariales (trust y holding).
El movimiento obrero:
La situación del proletariado (jornadas de 14 horas, sueldos bajos, insalubridad, falta de seguros, trabajo de mujeres y niños…) era lamentable. Varios pensadores analizaron esta situación, destacando Karl Marx y Bakunin.
Marxismo:
Para Karl Marx, esta situación se producía porque los capitalistas poseían los bienes de producción. Pero una vez se produjera la revolución y tras una fase de dictadura del proletariado en la que el Estado dominaría y regularía la sociedad, se establecería una sociedad más justa: el comunismo.
Marx defendió la participación de las organizaciones y partidos obreros en la vida política, lo que dio origen a los partidos socialistas.
Anarquismo:
Los anarquistas se oponen al Estado y, por tanto, a participar en la política; preconizan la violencia.
Los sindicatos:
Para unir sus fuerzas y conseguir mejoras laborales, los obreros se unieron en organizaciones que recibieron el nombre de sindicatos. Ni que decir tiene que, en un principio, los empresarios y el Estado los persiguieron.
El instrumento de presión de los sindicatos es la huelga.
Para coordinar sus acciones mundiales, los sindicatos crearon la Primera Internacional y la Segunda Internacional.
La emigración en el siglo XIX:
El aumento de población produjo un éxodo rural hacia las ciudades, pero no siempre estas pudieron absorberlo y emigraron, gracias a los nuevos medios de transporte, al otro lado del Atlántico.
Cambios en la vida cotidiana:
Debido a la industrialización y el aumento de producción, comienza la aparición de una sociedad de consumo.
La reducción de la jornada laboral permite disfrutar del ocio. Aparecen los locales de diversión y cultura (ateneos, teatros, bailes, cafés, tabernas…); deportes de masas, el fútbol en las clases populares y el tenis en la alta; también el veraneo se hace popular con los famosos «baños de mar».
Otro cambio es el de la situación de desigualdad de la mujer: sin derecho a votar, salarios más bajos y dependencia del padre o esposo. La primera lucha será para votar en las elecciones; las luchadoras recibirán el nombre de sufragistas. Hasta después de la Primera Guerra Mundial, y debido a su demostrada valía en la retaguardia, no empezaron a obtener su derecho al voto.
Todavía hay países donde la situación de la mujer difiere poco de lo que era una esclava. En España, antes de la democracia, una mujer casada no podía vender propiedades que eran suyas sin el consentimiento de su esposo, y si abandonaba el hogar, podía ir a la cárcel.
Consecuencias del imperialismo:
Políticas: Delimitaron las fronteras sin tener en cuenta las diferencias tribales.
Económicas: No fomentaron la industrialización, puesto que buscaban materias primas y un lugar donde vender sus productos.
Sociales y culturales: Aumento de población; ruptura de la sociedad tradicional; imposición de la civilización occidental.
Ideologías políticas:
Conservadurismo:
Defienden la permanencia de las tradiciones y valores como orden, patriotismo y religión. No aceptan la división entre Iglesia y Estado.
Liberalismo:
Defienden un sistema político y económico donde el Estado intervenga lo menos posible.
Socialismo:
Aunque con origen en las doctrinas de Marx, muchos de ellos las han abandonado. Proponen una mayor intervención del Estado y una redistribución de la riqueza mediante el pago de impuestos, que permiten incrementar el gasto público.
Comunismo:
También sigue las doctrinas de Marx. Desde la caída de la URSS en 1991, ha perdido influencia.
Anarquismo:
Rechaza la existencia del Estado. Hoy tiene poca importancia.
Nacionalismo:
Recogen el sentimiento de pertenencia a una comunidad por razones históricas, lengua, tradiciones… con fines partidistas e independentistas.
Fascismo:
Propugnan una economía aislada del exterior, defensa del orden público, e ideas xenófobas.
El incremento del papel del Estado:
El Estado moderno tiende a intervenir más en la vida de sus ciudadanos.
Fomentan un sentimiento de orgullo de pertenencia a la patria.
Tras el Crac del 29, intervienen en la economía para evitar algo parecido.
Los Estados modernos garantizan lo que se ha llamado «estado de bienestar» (seguridad social, jubilación, enseñanza obligatoria…).
Innovaciones en la arquitectura:
La utilización de nuevos materiales como el acero, el hormigón armado o el cristal permitieron edificar más rápido y más barato.
El cine:
Aparece con los hermanos Lumière en 1885. Al principio fue como algo de circo y mudo; más tarde se fue perfeccionando hasta adquirir el nombramiento de séptimo arte. Por fin, en los años 20, se hace sonoro y en los treinta, en color.
Como nueva industria, será Estados Unidos la que lleve la batuta.