La Constitución de 1876 estableció una rígida separación de poderes, la monarquía constitucional en España, unas Cortes elegidas por el pueblo que controlaban al Gobierno y estaban divididas en Congreso y Senado, la independencia del Poder Judicial y una amplísima declaración de derechos individuales.
Entre estos derechos individuales se incluían una serie de derechos procesales, la inviolabilidad del domicilio, el derecho de propiedad y de sufragio, las libertades de expresión, imprenta, Seguir leyendo “Justicia y Gobierno Local en la Constitución Española de 1876” »