Claves del Antiguo Régimen, la Ilustración y la Revolución Americana

El Antiguo Régimen

El Antiguo Régimen define la estructura social, económica y política predominante en Europa antes de la Revolución Francesa. Aunque el término se acuñó posteriormente, sus bases se gestaron en Francia alrededor del siglo XVI como una solución a las constantes luchas entre católicos y protestantes. Esta consolidación del poder monárquico no fue del agrado del clero y la nobleza, ya que veían mermados algunos de sus poderes, aunque seguían manteniendo una posición privilegiada.

Rasgos Característicos

  • Monarquía Absoluta: El rey concentraba todos los poderes.
  • Sociedad Estamental: Dividida en tres estamentos: clero, nobleza y pueblo llano (o Tercer Estado).

La Sociedad Estamental

El Campesinado

La mayoría de la población pertenecía al campesinado y sufría duras condiciones:

  • Sometidos a un régimen de servidumbre en muchas regiones.
  • Debían entregar gran parte de su producción a los propietarios de las tierras.
  • Pagaban numerosos tributos: el diezmo a la Iglesia, rentas y servicios a los señores, impuestos a la Hacienda Real, entre otros.
  • Vivían en condiciones de miseria, agravadas por los años de malas cosechas.

Clero y Nobleza

Estos dos estamentos eran los privilegiados, exentos de la mayoría de los impuestos y con leyes propias.

El Tercer Estado

Incluía a campesinos, artesanos, comerciantes y la burguesía. Esta última, enriquecida por el comercio y las finanzas, se sentía cada vez más frustrada por la falta de derechos políticos y las barreras estamentales. Aspiraban a establecer una sociedad con igualdad de derechos ante la ley y a terminar con los privilegios del clero y la nobleza.

La Monarquía Absoluta

  • Los monarcas se consideraban responsables solo ante Dios (derecho divino).
  • Su poder, en teoría, no tenía límites ni estaba sujeto a control.

El Pensamiento Ilustrado (Siglo de las Luces)

La Ilustración fue un movimiento intelectual que floreció en Europa durante el siglo XVIII, conocido como el «Siglo de las Luces». Se basaba en la razón y la ciencia como vías para el progreso humano. Los ilustrados cuestionaron los planteamientos religiosos tradicionales, las estructuras sociales, el pensamiento dogmático, el absolutismo monárquico y las creencias arraigadas que habían sostenido el Antiguo Régimen. Este período fue testigo de un gran avance en la ciencia y su enseñanza, con figuras eminentes como Gottfried Leibniz e Isaac Newton.

Pensamiento Económico Ilustrado

Adam Smith, en su obra fundamental «Investigación sobre la naturaleza y las causas de la riqueza de las naciones» (1776), sentó las bases del liberalismo económico y defendió los principios del capitalismo, entre ellos:

  • La libertad de los factores de producción.
  • El trabajo como la principal fuente de riqueza de una nación (a diferencia de los fisiócratas, quienes sostenían que la tierra era la única fuente de riqueza).
  • La no intervención del Estado en la economía (laissez-faire).

Liberalismo Político

Voltaire (François-Marie Arouet)

En obras como las «Cartas Filosóficas» o «Cartas Inglesas», Voltaire abogó por la libertad política, la tolerancia religiosa y los derechos individuales. Criticó el fanatismo y la intolerancia de las religiones tradicionales, defendiendo una religión natural basada en la razón (deísmo), que reconoce la existencia de un Ser Superior pero rechaza dogmas y rituales.

Montesquieu (Charles Louis de Secondat)

En su influyente obra «El Espíritu de las Leyes» (1748), Montesquieu propuso un sistema de gobierno monárquico moderado por una constitución (Monarquía Parlamentaria). Su contribución más destacada fue la teoría de la separación de poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) como garantía contra el despotismo. Sus ideas inspiraron la Constitución Norteamericana de 1787 y numerosas constituciones europeas posteriores.

Rousseau (Jean-Jacques Rousseau)

En «El Contrato Social» (1762), Rousseau desarrolló la idea de la soberanía popular: el poder reside en el pueblo, y el gobierno es meramente un ejecutor de la voluntad general, con representantes delegados y elegidos por el pueblo. Criticó las desigualdades generadas por la propiedad privada y fue un firme defensor de la igualdad entre todos los seres humanos.

La Enciclopedia

L’Encyclopédie, ou Dictionnaire raisonné des sciences, des arts et des métiers, dirigida por Denis Diderot y Jean le Rond d’Alembert, fue una obra monumental y un vehículo crucial para la difusión de las ideas ilustradas.

  • Aunque inicialmente su acceso estuvo limitado a los sectores más acomodados y cultos de la sociedad, principalmente la burguesía, su impacto fue profundo.
  • La Enciclopedia cuestionaba el principio de autoridad tradicional, que sostenía que las ideas debían aceptarse por el prestigio de quien las enunciaba, promoviendo en su lugar el conocimiento basado en la razón y la observación.
  • Sus 28 volúmenes (publicados entre 1751 y 1772) presentaron un compendio del saber de la época, difundieron las ideas de la Ilustración y criticaron abiertamente las instituciones y los principios del Antiguo Régimen.
  • Durante el siglo XVIII, la circulación de estas y otras ideas contribuyó a la formación de «corrientes de opinión pública», consideradas precursoras de los modernos partidos políticos.

El Despotismo Ilustrado

El Despotismo Ilustrado fue una forma de gobierno adoptada por algunos monarcas absolutos europeos durante la segunda mitad del siglo XVIII. Estos «déspotas ilustrados» implementaron reformas inspiradas en las ideas de la Ilustración, con el objetivo de fomentar el progreso económico, social y cultural de sus reinos y mejorar el bienestar de sus súbditos, pero sin renunciar a su poder absoluto ni contar con la participación del pueblo. Su lema podría resumirse en: «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo».

  • Este sistema político estuvo en boga en varias Cortes Reales europeas.
  • A pesar de su supuesta adhesión a las luces, muchos déspotas ilustrados no dudaron en censurar o prohibir obras de pensadores como Voltaire si las consideraban demasiado críticas o subversivas para el orden establecido.
  • La viabilidad del Despotismo Ilustrado se vio comprometida con el estallido de las revoluciones de finales del siglo XVIII y principios del XIX, que cuestionaron radicalmente el absolutismo monárquico, la figura del rey y la estructura social jerárquica.
  • No obstante, durante este período, en algunos estados se observaron progresos en la economía, la administración, la educación, el nivel de vida y la cultura.

La Primera Revolución Democrática: La Independencia de los Estados Unidos

La Sociedad de las Trece Colonias

En la costa atlántica de América del Norte existían trece colonias que pertenecían a Gran Bretaña. Su sociedad era diversa, resultado de oleadas de inmigrantes europeos, y, a diferencia de Europa, no estaba estructurada sobre un sistema feudal. Sin embargo, una contradicción fundamental existía en las colonias del sur, donde se mantenía un sistema esclavista basado en la mano de obra africana.

La población colonial estaba compuesta principalmente por:

  • Grandes y pequeños propietarios de tierras.
  • Trabajadores libres, artesanos y comerciantes, con la posibilidad de expandirse hacia nuevas tierras en el oeste.

Ciudades portuarias como Filadelfia y Boston eran importantes centros económicos y culturales.

Causas y Proceso de Independencia

Causas Principales:

  • Descontento político y económico: Las colonias se sentían injustamente tratadas por la metrópoli. Aportaban considerable riqueza al Imperio Británico a través del comercio y los recursos, pero carecían de representación en el Parlamento británico y, por tanto, no participaban en la toma de decisiones que les afectaban directamente. El lema «No taxation without representation» (Ningún impuesto sin representación) resumía esta queja.
  • Consecuencias de la Guerra de los Siete Años (1756-1763): Tras la victoria de Gran Bretaña sobre Francia en este conflicto, en el que los colonos habían colaborado significativamente, estos no solo no fueron recompensados, sino que la Corona impuso nuevas cargas fiscales para sufragar los enormes gastos de la guerra y el mantenimiento de tropas en América.

Desencadenantes y Desarrollo de la Guerra:

  1. Nuevos impuestos: El gobierno británico impuso una serie de impuestos sobre productos como el azúcar (Sugar Act, 1764), el timbre (Stamp Act, 1765) y otros bienes, lo que generó una fuerte oposición.
  2. El Motín del Té (Boston Tea Party): La imposición de un impuesto sobre el té (Tea Act, 1773), que además concedía el monopolio de su venta a la Compañía Británica de las Indias Orientales, provocó el famoso incidente en el puerto de Boston en diciembre de 1773. Un grupo de colonos disfrazados de indígenas arrojó al mar el cargamento de té de tres barcos de la compañía. Como represalia, las autoridades británicas impusieron las «Leyes Intolerables», que incluían el cierre del puerto de Boston y la restricción de las libertades en Massachusetts, lo que exacerbó el descontento general.
  3. Inicio de la Guerra de Independencia (1775-1783): Las crecientes tensiones y las medidas represivas británicas desembocaron en el estallido del conflicto armado. Los colonos organizaron un ejército continental, formado en gran parte por ciudadanos milicianos convertidos en soldados, cuyo mando se encomendó a George Washington. A pesar de enfrentar enormes dificultades en cuanto a armamento, municiones, financiación y la falta de una flota naval comparable a la británica, demostraron una gran determinación.
  4. Apoyo exterior: Los colonos buscaron activamente ayuda internacional. Francia, motivada por su rivalidad con Gran Bretaña y el deseo de revancha por la derrota en la Guerra de los Siete Años, proporcionó un apoyo militar y financiero crucial a partir de 1778. España (a partir de 1779) y los Países Bajos también se unieron a la guerra contra Gran Bretaña, con intereses propios como la recuperación de territorios (España esperaba recuperar Gibraltar y Menorca). Esta internacionalización del conflicto fue decisiva para la victoria de los colonos.
  5. Independencia: Tras varias batallas clave, y con el apoyo de sus aliados, los Estados Unidos de América (EE. UU.) lograron su independencia, reconocida formalmente por Gran Bretaña mediante el Tratado de Versalles (también conocido como Tratado de París) en 1783.

La Primera Constitución Democrática

  1. En 1787, se reunió en Filadelfia una Convención Constitucional que redactó la Constitución de los Estados Unidos, la primera carta magna escrita que establecía una república democrática y recogía muchos de los principios e ideas de la Ilustración, como la soberanía nacional y la separación de poderes.
  2. Tras la independencia, surgió un intenso debate entre las antiguas colonias sobre la forma de gobierno más adecuada: un Estado Federal (con un gobierno central fuerte y soberanía compartida) o una Confederación de Estados (donde los estados mantenían una mayor autonomía y soberanía).
    • A) Postura de las Colonias del Sur: Generalmente agrarias y dependientes de la esclavitud, se oponían a un gobierno central fuerte que pudiera interferir en sus «instituciones particulares», como la esclavitud. Preferían una mayor independencia para los estados y eran reticentes a medidas democráticas que afectaran sus derechos de propiedad, incluyendo sobre los esclavos.
    • B) Postura de las Colonias del Norte: Con una economía más diversificada (comercio, incipiente industria) y una sociedad donde la esclavitud era menos central o estaba en vías de abolición, tendían a favorecer un gobierno federal fuerte que pudiera regular el comercio, establecer una moneda única y garantizar la unión política entre los estados. Proponían medidas más radicales en cuanto a derechos y se oponían a la extensión de la esclavitud.
  3. Finalmente, la Convención de Filadelfia de 1787 llegó a un compromiso: se acordó crear un Estado Federal, con un Presidente de la República como jefe del poder ejecutivo, y un poder legislativo bicameral (el Congreso, compuesto por la Cámara de Representantes y el Senado). Cada estado conservaría un gobierno autónomo con competencias sobre asuntos internos, subordinado a la Constitución federal.

Repercusiones en Europa y Legado

  • La exitosa Revolución Americana y la promulgación de su Constitución tuvieron un enorme impacto en Europa y el resto del mundo. Se convirtieron en un poderoso ejemplo a seguir para los liberales, reformistas y revolucionarios que luchaban contra el absolutismo y por los derechos individuales en países como Francia, España y Portugal, así como en las colonias hispanoamericanas.
  • Sin embargo, la Constitución de EE. UU. no resolvió todas las contradicciones, siendo la más flagrante la pervivencia de la esclavitud de la población negra. Esta cuestión fundamental, junto con otras diferencias económicas y políticas entre el Norte y el Sur, fue una de las causas principales de la sangrienta Guerra de Secesión (Guerra Civil Estadounidense, 1861-1865). Tras la victoria de la Unión (el Norte), se abolió la esclavitud, aunque la lucha por la igualdad real de derechos para la población afroamericana continuaría durante más de un siglo.

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