Cronología de la Independencia Argentina: De las Reformas Borbónicas a la Caída de Rosas (1776-1852)

I. Antecedentes Coloniales y la Revolución de Mayo

Reformas Borbónicas y el Virreinato del Río de la Plata

Las Reformas Borbónicas buscaron centralizar el poder y optimizar la explotación económica de las colonias. Sus objetivos principales eran:

  • Controlar el comercio y la extracción de metales preciosos.
  • Implementación de Navíos de Registro.
  • Prohibición de la venta de cargos públicos y creación de la Junta Central de Hacienda.
  • Promoción del Comercio Libre (reglamentado).
  • Creación de nuevos virreinatos, destacando el Virreinato del Río de la Plata (VRP), establecido para controlar la producción de materias primas y defender la región de las incursiones inglesas.

Las Invasiones Inglesas y la Crisis de la Monarquía

Las invasiones inglesas (1806-1807) demostraron la debilidad de la defensa española y fortalecieron el poder militar local, especialmente las milicias criollas (lideradas por Cornelio Saavedra). Figuras clave fueron Santiago de Liniers y Martín de Álzaga. El fracaso inglés se consolidó con la derrota de Whitelocke.

El Camino hacia el 25 de Mayo de 1810

La crisis en España, marcada por la Farsa de Bayona y el encarcelamiento de Fernando VII, llevó a la imposición de José Bonaparte y la creación de la Junta Central de Sevilla. En América, esto impulsó la formación de Juntas de Gobierno en los cabildos. Cuando la Junta de Sevilla cayó, se convocó un Cabildo Abierto en Buenos Aires. El virrey Liniers fue reemplazado por Cisneros, quien, tras la caída de Sevilla, fue forzado a aceptar una junta inicial. Finalmente, el 25 de mayo de 1810, se designó la Primera Junta, compuesta por Cisneros, dos españoles, y los criollos Saavedra y Castelli, entre otros.

II. La Lucha por el Poder Central y la Independencia (1810-1820)

Conflictos Internos y Regionales

Buenos Aires intentó expandir su dominio sobre el antiguo Virreinato, encontrando resistencia inmediata:

  • Paraguay no aceptó la autoridad de Buenos Aires y mantuvo su propia autonomía.
  • La Banda Oriental se negó a someterse al centralismo porteño, aunque José Gervasio Artigas inicialmente apoyó a Buenos Aires.
  • En 1811, se produjo el Sitio de Montevideo y el posterior Éxodo Oriental. Montevideo fue finalmente tomada en 1815.

La Disputa Política: Moderados vs. Radicales

La Primera Junta se dividió entre dos facciones principales:

  • Saavedra (moderado): Partidario de un cambio gradual y de incorporar a las provincias.
  • Mariano Moreno (radical): Impulsor de reformas profundas y centralizadas.

La facción de Saavedra prevaleció, lo que llevó a la creación de la Junta Grande, que incorporó delegados del Interior. Los morenistas, por su parte, formaron la Sociedad Patriótica. Aprovechando la ausencia de Saavedra, la oposición designó el Primer Triunvirato (con figuras como Bernardino Rivadavia).

Los Triunviratos y la Logia Lautaro

El Primer Triunvirato enfrentó problemas internos y fue criticado por su política de no combatir activamente a los realistas. Cuando el Triunvirato ordenó a Belgrano abandonar la lucha, este se negó y obtuvo victorias cruciales, debilitando al gobierno central. La oposición, impulsada por la Logia Lautaro, provocó la caída del Primer Triunvirato y la creación del Segundo Triunvirato.

La Asamblea del Año XIII y el Congreso de Tucumán

Asamblea General Constituyente de 1813

Aunque no declaró formalmente la independencia ni sancionó una constitución, la Asamblea de 1813 estableció importantes bases para la soberanía:

  • Creación de símbolos patrios (escudo e Himno Nacional).
  • Abolición de la mita, el yanaconazgo y la tortura.
  • Declaración de la libertad de vientres (liberación de los hijos de esclavos).
  • Reemplazó al Triunvirato por la figura del Director Supremo (siendo Posadas el primero, seguido por Alvear).

El Directorio y la Declaración de 1816

En 1816, el Congreso de Tucumán se reunió para definir la situación política. El 9 de julio, se declaró la independencia de las Provincias Unidas de Sud América. A pesar de la declaración, persistía la inestabilidad, los desacuerdos internos y la guerra. Se designó a Juan Martín de Pueyrredón como Director Supremo.

El Fin del Centralismo (1820)

El Directorio cayó en 1820 tras la Batalla de Cepeda, donde las fuerzas del Director Supremo (Rondeau) fueron derrotadas por los caudillos del Litoral, Estanislao López (Santa Fe) y Francisco Ramírez (Entre Ríos). Este evento marcó el fin del gobierno central y el inicio de las Autonomías Provinciales, dando origen a la Provincia de Buenos Aires como entidad autónoma.

III. La Anarquía y la Experiencia Porteña (1820-1827)

Pactos Interprovinciales

Tras la caída del Directorio, las provincias buscaron establecer nuevas formas de convivencia:

  • Tratado de Pilar: Estableció la federación como sistema de gobierno y garantizó la libre navegación de los ríos Paraná y Uruguay.
  • Tratado de Benegas: Firmado entre Santa Fe y Buenos Aires para establecer la paz.

La “Feliz Experiencia” de Buenos Aires (1820-1824)

Bajo el liderazgo de Martín Rodríguez y su ministro Bernardino Rivadavia (Partido del Orden), Buenos Aires experimentó un periodo de modernización y centralización provincial:

  • Reforma Política: Se eliminaron los cabildos de la provincia, reemplazados por la Junta de Representantes (Poder Legislativo), y se implementó el sufragio universal masculino.
  • Reforma Militar: Buscó profesionalizar el ejército y liberar mano de obra indígena para la producción pecuaria.
  • Reforma Económica (Ley de Enfiteusis): Permitió el alquiler de tierras públicas a bajo costo para proyectos agropecuarios, aunque benefició principalmente a grandes propietarios.
  • Reforma Eclesiástica: Secularización del clero regular y unificación de la Iglesia bajo control estatal.
  • Reforma Educativa: Fundación de la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1821.

El Congreso Constituyente de 1824

Convocado por Las Heras, el Congreso buscó dar forma constitucional a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Se sancionó la Ley Fundamental, que otorgaba un Poder Ejecutivo provisorio a Las Heras, manteniendo el autogobierno provincial.

La Presidencia de Rivadavia y la Constitución de 1826

En 1826, se sancionó la Ley Presidencial, nombrando a Rivadavia como primer presidente. La Ley de Capitalización, que federalizaba Buenos Aires, generó fuerte oposición de los federales (incluido Rosas). La Constitución de 1826, de carácter marcadamente centralista, fue rechazada por las provincias. En medio de la guerra contra Brasil, Rivadavia renunció a la presidencia.

IV. El Ascenso y la Hegemonía de Juan Manuel de Rosas (1827-1852)

La Crisis de 1827 y el Primer Gobierno de Rosas

Tras la renuncia de Rivadavia, Manuel Dorrego (federal con apoyo popular) asumió el gobierno de Buenos Aires. En 1828, el general unitario Juan Lavalle dio un golpe de Estado y fusiló a Dorrego. Este acto unió a los sectores populares y federales contra Lavalle, encabezados por Juan Manuel de Rosas. Las fuerzas de López y Rosas derrotaron a Lavalle en el Combate de Puente Márquez. Tras los Pactos de Cañuelas y Barracas, se designó a Viamonte como gobernador interino, allanando el camino para Rosas.

Primer Mandato (1829-1832)

Rosas asumió con el objetivo de restaurar el orden. Recibió Facultades Extraordinarias (suspender garantías individuales). Políticamente, se caracterizó por:

  • Búsqueda de unanimidad política (solo federales de su facción).
  • Amplio apoyo popular, del clero y de los sectores propietarios.
  • Conflicto entre la facción dorreguista (que buscaba la normalidad institucional) y los rosistas (que defendían las facultades extraordinarias).

La Confederación y la Campaña al Desierto

Los unitarios, liderados por José María Paz, formaron la Liga del Interior. En respuesta, Rosas impulsó el Pacto Federal de 1831, que unió a Buenos Aires, Santa Fe (López) y Entre Ríos (Quiroga). Este pacto estableció la Confederación de Provincias, delegando las relaciones exteriores en Buenos Aires hasta la sanción de una Constitución (que no llegaría hasta 1853).

Al finalizar su primer mandato, la Sala de Representantes ofreció la reelección a Rosas, pero sin facultades extraordinarias, lo cual él rechazó. Asumió Balcarce. Rosas, como Comandante General de la Campaña, lideró una ofensiva contra los malones de la pampa para ampliar la frontera, un movimiento que lo mostró como un líder desinteresado en las pugnas políticas y enfocado en el bienestar de la sociedad.

Segundo Mandato: La Suma del Poder Público (1835-1852)

La Revolución de los Restauradores forzó la renuncia de Balcarce y Martínez. Tras el asesinato de Facundo Quiroga en 1835, Rosas fue llamado a asumir nuevamente, esta vez con la Suma del Poder Público.

Características del Régimen Rosista

  • Represión y Control: Uso de la Sociedad Popular Restauradora y su brazo armado, La Mazorca, para eliminar opositores.
  • Control Político: Implementación de la lista única en las elecciones.
  • Conflictos Externos: Enfrentó la Coalición del Norte (unitarios), la invasión de Lavalle y el apoyo de Oribe en Uruguay. También resistió el Bloqueo Anglofrancés.

La Caída de Rosas

El fin de la hegemonía rosista llegó con el Pronunciamiento de Urquiza en 1851, cuando Justo José de Urquiza (gobernador de Entre Ríos) se rebeló contra Rosas, exigiendo manejar las relaciones exteriores de su provincia. El conflicto por la libre navegación de los ríos fue clave. Urquiza formó el Ejército Grande, aliado con fuerzas del Litoral y Brasil. Rosas fue derrotado definitivamente en la Batalla de Caseros en 1852, marcando el inicio del proceso constitucional argentino.

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