La Construcción del Estado Liberal en España: Carlismo, Regencias y el Reinado de Isabel II (1833-1868)

Las Guerras Carlistas (1833-1876): La Lucha por el Trono

Primera Guerra Carlista (1GC: 1833-1840)

Tras la muerte de Fernando VII, Carlos Isidro reivindica el trono mediante el Manifiesto de Abrantes, siendo proclamado rey en varios puntos de España.

Etapas de la 1GC:

  • 1833-1835: Los carlistas llevan la iniciativa. Controlan el territorio vasco-navarro. El ejército liberal es dirigido por Zumalacárregui. María Cristina busca apoyos en Gran Bretaña (GB), Portugal (PORT) y Francia (FRANC).
  • 1836-1837: Desde el País Vasco, Cataluña, Maestrazgo y Navarra, los carlistas organizan expediciones militares por España. Espartero logra una victoria clave en la Batalla de Luchana.
  • 1837-1840: Crisis en ambos bandos. Maroto y Espartero firman el Convenio de Vergara (1839), por el que se mantienen los fueros vascos y navarros, los carlistas mantienen sus pagas y Carlos Isidro se exilia a Francia. La guerra continuó en Cataluña y Levante.

Consecuencias de la 1GC:

  • 200.000 muertos.
  • Radicalización de la vida política.
  • Intensificación del desorden y la inseguridad.

Segunda Guerra Carlista (2GC: 1846-1860)

Se desarrolla principalmente en Cataluña y se prolonga hasta 1860. El motivo fue el matrimonio fracasado de Isabel II con su primo Francisco de Asís. Las consecuencias incluyeron muertes, la inclinación de la monarquía al liberalismo y enormes gastos de guerra que condujeron a la desamortización de Mendizábal.

Tercera Guerra Carlista (3GC: 1872-1876)

Se produce en los mismos territorios. Estalla tras la Revolución de 1868 y la instauración de Amadeo I. Los carlistas apoyan a Carlos VII. Los carlistas apoyan la Batalla de Montejurra y fracasan en la toma de Bilbao. La Restauración Borbónica acabó por hundir al carlismo. Carlos VII huye a Francia.

Las Regencias (1833-1843): La Transición al Liberalismo

Tras la muerte de Fernando VII y durante la minoría de edad de Isabel II, se establecieron unas regencias: la de María Cristina y la de Espartero.

Las regencias estuvieron envueltas en la Primera Guerra Carlista y en el establecimiento del régimen constitucional y la implantación del sistema liberal. En el ámbito político, supuso el triunfo del liberalismo y de la Constitución de 1837; en el ámbito económico, supuso la abolición del régimen feudal y la desamortización.

Regencia de María Cristina (1833-1840)

Coincide con la 1ª Guerra Carlista y con esta regencia se inicia la transición del absolutismo al liberalismo. El principal objetivo fue el desmantelamiento de la monarquía absoluta e implantar una monarquía parlamentaria y constitucional.

Gobiernos y Partidos Políticos:

Los primeros gobiernos estuvieron protagonizados por monárquicos reformistas. CEA BERMÚDEZ inició una serie de reformas: liberación de comercio e industria, libertad de prensa y división territorial. Estas reformas resultaron insuficientes para los liberales, planteándose la necesidad de cambio político y una convocatoria a Cortes.

La reina confía el gobierno a Martínez de la Rosa: durante su gobierno nacen los partidos políticos. Los liberales se dividen en moderados y progresistas (en los años 40 se dividirán en demócratas y republicanos).

  • Moderados: Clases medias y alta burguesía, militares, abogados.
  • Progresistas: Clases medias urbanas, generales del ejército.

A. Implantación del Régimen Liberal

La implantación del régimen liberal fue difícil por la falta de coherencia entre progresistas y la estructura social del país. El constitucionalismo se concretó en el Estatuto Real y la Constitución de 1837.

El Estatuto Real (1834)

En enero, Martínez de la Rosa subió al poder y confió en la elaboración del Estatuto Real con el objetivo de preparar un tránsito al sistema liberal, donde la Reina renunciaba a algunos poderes y competencias. Características:

  • Las Cortes no tienen capacidad legislativa.
  • No hay reconocimiento de derechos.
  • Cortes bicamerales:
    • Cámara Alta: Miembros de la aristocracia.
    • Cámara Baja: 118 elegidos por sufragio censitario indirecto.

Los liberales reclamaron una nueva constitución. Ni Martínez de la Rosa ni Toreno fueron capaces de vencer a los carlistas por la lentitud de los cambios políticos. El pronunciamiento militar de La Granja de San Ildefonso obligó a suspender el Estatuto Real, iniciándose el periodo progresista que dio impulso a la ruptura del Antiguo Régimen.

La Constitución de 1837

El gobierno de Calatrava elaboró una nueva Constitución. Los puntos más destacados son:

  • Soberanía nacional.
  • Derechos de libertad de imprenta, prensa y expresión.
  • División de poderes.

B. Desamortización de Mendizábal (1836)

Fue la medida más revolucionaria del gobierno liberal. La necesidad de apoyo al clero impuso la obra desamortizadora. La Iglesia y la nobleza tenían bienes amortizados (manos muertas). La desamortización consistió en adoptar medidas legislativas para permitir su venta.

C. Otras Medidas Económicas Liberales

Medidas encaminadas al libre funcionamiento del mercado que completaron el marco jurídico de implantación del liberalismo económico:

  • Abolición de la Mesta.
  • Libertad de arrendamientos agrarios.
  • Libertad de precios y almacenamiento.
  • Abolición de los privilegios de los gremios.
  • Libertad de industria y comercio.
  • Eliminación de aduanas interiores.
  • Abolición de los diezmos eclesiásticos.

D. Militarismo

La Guerra Carlista y la burguesía convirtieron al ejército en árbitro de la situación política, transformándolo en un arma decisiva en las grandes revoluciones.

Regencia de Espartero (1840-1843)

El liberalismo radical de Calatrava y Mendizábal alarmó a los moderados y conservadores, lo que llevó a una oposición que buscaba limitar la Milicia Nacional y los gobiernos municipales.

La Ley de Ayuntamientos, que establecía que los alcaldes serían nombrados por la Reina, provocó un choque entre moderados y progresistas, estallando disturbios en numerosas ciudades.

Ello provocó que María Cristina marchara al destierro. Espartero fue elegido regente por las Cortes. Durante su gobierno:

  • Se recortaron los fueros vascos y navarros.
  • Se reformó la desamortización de los bienes del clero secular.
  • Adoptó una política librecambista con Gran Bretaña, lo que lo enfrentó a la burguesía industrial textil catalana.

Finalmente, las Cortes se exiliaron y declararon mayor de edad a Isabel II.

El Reinado de Isabel II (1843-1868)

La mayoría de edad de Isabel II estuvo marcada por la Década Moderada (1844-1854) y el Bienio Progresista (1854-1856), seguido por un periodo de gobiernos moderados y la Unión Liberal.

En 1833 se asentaron las bases jurídicas del nuevo Estado y la transición a la nueva sociedad de clases. Se consolidó el aparato político, administrativo y fiscal. La exclusión de los progresistas debilitó política y socialmente al régimen. El Estado liberal respondía a los intereses de la gran y mediana burguesía, lo que resultó en el fracaso del régimen.

La Década Moderada (1844-1854)

El presidente fue Narváez, quien dio estabilidad política a esta década, reponiendo los intereses de la oligarquía. Las Cortes se suspendieron con frecuencia, debido a la corrupción administrativa y la marginación de los progresistas del gobierno.

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