El Reinado de Isabel II: Oposición al Liberalismo, Carlismo y la Cuestión Sucesoria y Foral
En 1833, muere Fernando VII, dejando abierto el problema de su sucesión. Su hija Isabel tenía solo 3 años, por lo que hasta su mayoría de edad debería reinar su madre, **María Cristina**. La oposición a María Cristina, partidarios del reinado del hermano de Fernando, Carlos, eran los **carlistas**, de ideología absolutista. Ante esta situación, María Cristina tuvo que buscar el apoyo de los **liberales**.
Elementos del Conflicto y Desarrollo de las Guerras Carlistas
La Primera Guerra Carlista (1833-1839)
El **primer enfrentamiento** entre carlistas (absolutistas) e isabelinos (liberales), conocido como la **Primera Guerra Carlista**, se desarrolló entre **1833 y 1839**.
Actores y Facciones en Conflicto
Los **liberales** apoyaban la **separación de poderes**, pero a su vez se dividían en dos corrientes principales:
- Moderados: No apoyaban el **sufragio universal**, sino uno muy **censitario** (solo los más ricos). Buscaban que el monarca tuviera un mayor poder.
- Progresistas: Buscaban ampliar el voto a los sectores comerciales y las clases medias-altas. De este segundo grupo, desde el sector de los exaltados, se disgregaría posteriormente (en **1848**) el **Partido Demócrata**.
El **ejército**, por su parte, actuó como una institución clave, pero ideológicamente estaba muy dividido entre moderados, carlistas y progresistas. De todos modos, mediante **pronunciamientos** impulsó importantes cambios políticos.
**España** entera estaba muy **polarizada socialmente**. Prácticamente no existía una clase media consolidada, y los sistemas liberales suelen ser más estables cuanto más amplia es esta. El país era principalmente **campesino**. Las ciudades eran pequeñas; Madrid, aun siendo capital del reino, solo disponía de una clase media artesana, y la industria estaba exclusivamente localizada en **Barcelona** y, mucho más tarde, también en **Bilbao**.
La **Iglesia**, durante el reinado de Isabel II, fue una institución de gran importancia. Se identificaba el ser español con ser **católico**, y el ser liberal con ser ‘francés’ y ‘desarraigado’. La Iglesia solo aceptó las fórmulas más conservadoras, y por ello se mantuvo con los carlistas hasta un posterior acercamiento a los moderados.
Ideología Carlista y sus Apoyos
El **objetivo de los carlistas** se oponía al **capitalismo**, las **libertades sociales** (económicas, etc.), el **liberalismo político**, el **laicismo** y el **centralismo**. Defendían la **descentralización**, los **fueros locales**, las **corporaciones** (esquema gremial) y consideraban que la verdad se encontraba en la **tradición**. Aunque su base principal eran los **campesinos** (quienes estaban en contra del capitalismo, ya que la propiedad privada y el capitalismo no eran bien recibidos en el campo, donde causaban paro estacional y donde el régimen feudal era preferido), contaban también con el apoyo de la **pequeña nobleza** (que se sentía desplazada por el capitalismo).
Zonas de Mayor Arraigo Carlista
Las zonas con mayor arraigo carlista eran el **País Vasco**, **Navarra**, **Cataluña**, **Galicia**, **Valencia** y algunas zonas de **Aragón**.
Apoyos del Bando Liberal
Los **liberales**, por su parte, contaban con el apoyo de los **trabajadores de las ciudades**, de la **burguesía**, de la **alta nobleza** y de la mayor parte del **ejército**.
Contexto Internacional y Apoyos Externos
Además, después de los **años 30**, Europa occidental era predominantemente liberal (en parte a causa de la **Revolución de 1830** que llevó a Francia a la república), por lo que los liberales contaban con el apoyo de **Francia**, **Inglaterra** y **Portugal**. Por el contrario, Europa oriental y central era absolutista, por lo que los carlistas tenían el apoyo de **Austria**, **Hungría**, **Rusia**, **Prusia** y el **Vaticano**. En Portugal también se dio un conflicto similar entre liberales y miguelistas.
Desarrollo y Fin de la Primera Guerra Carlista
En el desarrollo de la guerra, destacaron las operaciones en el **País Vasco** y **Navarra**. El general más brillante del carlismo fue **Tomás de Zumalacárregui**. La resistencia carlista en el País Vasco ejerció una presión muy fuerte hasta su muerte.
Las **expediciones carlistas** se extendieron desde el País Vasco hasta Cádiz, buscando obtener nuevos militantes. Se autodenominaban ‘las cruzadas de la causa’. Esto provocó una extremización de las posturas liberales y la refundación de las Juntas. Las luchas se producían entre el ejército regular y la **Milicia Nacional**.
Destaca la expedición de **Carlos María Isidro**, aspirante a la corona, quien llegó a las puertas de Madrid en **1837** pero fue detenido antes de entrar.
A partir de **1836** aproximadamente, se produjo un giro en contra de los carlistas. En ese año, **Juan Álvarez Mendizábal**, un liberal progresista, llegó al gobierno. Desarrolló la mayor **desamortización** de bienes eclesiásticos, que sirvió para armar al ejército isabelino y consiguió abatir el foco carlista del norte de la península.
Las victorias liberales y la muerte de Zumalacárregui provocaron que en **1838** el **General Rafael Maroto** pactara con el **General Baldomero Espartero** un acuerdo para cerrar el frente del norte, conocido como el **Abrazo de Vergara**. Los compromisos consistían en disolver las guerrillas carlistas y cesar las batallas, a cambio de **respetar los fueros vascos y navarros**. Además, se permitió a los militantes carlistas integrarse en el ejército. Esto tuvo consecuencias en el ejército, que se llenó de demasiados altos cargos.
En el frente de **Castellón y Aragón**, el **General Ramón Cabrera** fue derrotado en **1839** y marchó al exilio en Inglaterra.
**Espartero** se declaró progresista y fue considerado la esperanza de esta facción.
La Segunda Guerra Carlista (1846-1849)
La **Segunda Guerra Carlista** se desarrolló entre **1846 y 1849**. Su origen fue un problema dinástico: el fallido matrimonio entre Isabel II y un candidato carlista, el **Conde de Montemolín**. Esto provocó la **revuelta dels Matiners**, un levantamiento popular en distintos puntos de **Cataluña**, y el General Cabrera regresó de Londres para dirigir a los carlistas. En **1849** fueron de nuevo derrotados.