La Segunda Guerra Mundial y sus Consecuencias
Desde 1945 hasta 1990, el mundo estuvo dividido en dos bloques antagónicos: el socialista, dirigido por la URSS, y el capitalista, liderado por EE. UU. La tensión permanente entre estos dos mundos se tradujo en una situación de constante confrontación, la llamada Guerra Fría. En la década de 1960, la tensión disminuyó y se inauguró un nuevo marco de relaciones internacionales: la coexistencia pacífica.
Las Causas del Conflicto
Los orígenes remotos de la Segunda Guerra Mundial hay que buscarlos en el nuevo orden internacional surgido tras la Primera Guerra Mundial. El Tratado de Versalles, en lugar de crear un clima de reconciliación entre las naciones, fomentó la humillación y el resentimiento. Muchos alemanes e italianos no aceptaron las imposiciones de Versalles, y eso estimuló el revanchismo. La crisis de 1929 creó un contexto de depresión que favoreció el surgimiento de los fascismos. Mussolini en Italia y, sobre todo, Hitler en Alemania, desarrollaron una política exterior agresiva y de expansionismo militar. La debilidad de las democracias y el fracaso de la Sociedad de Naciones ante las agresiones de los regímenes nazi y fascista estimularon el belicismo y acabaron conduciendo a la guerra.
La Marcha Hacia la Guerra
Desde principios de la década de 1930, los Estados autoritarios impulsaron una serie de agresiones bélicas hacia otros países:
- En Asia, Japón buscaba ampliar sus territorios.
- En África, en 1935, Italia ocupó Etiopía.
- Italia y Alemania intervinieron en la Guerra Civil española entre 1936 y 1939, facilitando soldados y armamento.
- Alemania desarrolló una política de expansión territorial con la idea de crear un gran imperio con las tierras habitadas por pueblos germánicos. Francia y Gran Bretaña convocaron la Conferencia de Múnich (1938) para frenar las aspiraciones alemanas, pero acabaron claudicando ante las promesas de Hitler de detener su expansionismo. Como resultado, Checoslovaquia desapareció como Estado: Bohemia y Moravia se convirtieron en protectorado alemán, y Eslovaquia pasó a ser un Estado satélite.
Las Alianzas y el Estallido del Conflicto
Esta política expansionista se apoyó en una serie de tratados internacionales de apoyo mutuo. En 1936, Alemania firmó una alianza con Italia, conocida como el Eje Roma-Berlín. Esta se renovó en 1939 con el nombre de Pacto de Acero. Ese mismo año, en 1936, Alemania firmó con Japón el Pacto Antikomintern. Francia y Gran Bretaña se habían mantenido al margen de estas alianzas. Cuando en 1939 Hitler reclamó el corredor de Danzig (territorios que separaban Alemania de Prusia Oriental), Francia y Gran Bretaña se comprometieron con Polonia a ir a la guerra si era necesario. Para evitar que la URSS se aliara con Francia y Gran Bretaña para ayudar a Polonia, Hitler firmó con Stalin el Pacto Germano-Soviético (1939), tras el cual inició la invasión de Polonia (septiembre de 1939). Entonces, los Aliados (Francia y Gran Bretaña) declararon la guerra a Alemania. Este fue el inicio de la Segunda Guerra Mundial.
Las Victorias del Eje
Con la invasión de Polonia (septiembre de 1939), Hitler inició la guerra relámpago, basada en el uso de divisiones acorazadas (los panzer) y en un importante apoyo aéreo. Este tipo de guerra permitió el ataque sorpresa y avanzar con rapidez. Polonia se hundió en tres semanas y el país fue dividido entre Alemania y la URSS, según lo acordado en el Pacto Germano-Soviético. En 1940, los ejércitos alemanes invadieron la mayor parte de Europa Occidental (Dinamarca, Noruega, Países Bajos, Bélgica y el Norte y Oeste de Francia). En el verano de ese mismo año, solo Gran Bretaña resistía a Alemania. Gran Bretaña resistió el ataque y Hitler tuvo que renunciar al desembarco, pero decretó el bloqueo de las Islas Británicas y desencadenó la Batalla del Atlántico. En junio de 1941, Hitler lanzó la Operación Barbarroja y atacó Rusia, llegando con rapidez hasta las puertas de Moscú y Leningrado. En diciembre, Japón destruyó la flota estadounidense en Pearl Harbor y Estados Unidos entró en la guerra.
Europa Bajo el Nazismo
La ocupación nazi tenía como finalidad el sometimiento de los territorios europeos en beneficio de Alemania. En función de ello, los nazis organizaron los territorios conquistados en regiones incorporadas al Reich (Alsacia, Lorena, Luxemburgo, Bohemia…), regiones colonizadas (Polonia Oriental, Países Bálticos…) y Estados satélites (Francia, Ucrania, Países Bajos…). La GESTAPO y las SS implantaron un régimen de violencia y terror sobre la población, especialmente sobre los resistentes, que fueron detenidos, torturados y deportados o ejecutados. En todas partes se desencadenó la persecución y fue especialmente dura la de los judíos, en el llamado Holocausto.
El Triunfo Aliado
En junio de 1942, la situación de la guerra dio un vuelco cuando la URSS y Estados Unidos reforzaron a los Aliados. En junio, los estadounidenses frenaron a los japoneses en el Pacífico (Batalla de Midway) y los británicos a los alemanes en el Norte de África (El-Alamein). Pero el primer gran fracaso de Hitler tuvo lugar en Stalingrado (agosto 1942-febrero 1943).
A partir de este momento, los Aliados empezaron su ofensiva. El desembarco estadounidense en Normandía (junio 1944) permitió la entrada en Europa de numerosos soldados y vehículos. Los angloamericanos iniciaron el avance desde el Oeste, mientras los rusos avanzaban por el Este; ambos ejércitos se encontraron en el río Elba el 26 de abril de 1945. El día 30, Hitler se suicida y el 8 de mayo, Alemania capituló. Pero en Asia los japoneses continuaban combatiendo. Para precipitar la rendición japonesa, el presidente estadounidense Truman decidió utilizar un arma nueva: la bomba atómica, que fue lanzada sobre Hiroshima y Nagasaki (agosto 1945). El 2 de septiembre Japón capituló. La guerra había terminado.
El Impacto de la Guerra
Cuando acabó la Segunda Guerra Mundial, Europa estaba material y moralmente destrozada y su población, diezmada. Sobre este paisaje de ruina y desolación emergieron dos nuevas potencias, Estados Unidos y la URSS, que relegaron a Europa a un segundo plano.
- 50 millones de muertos, de los cuales casi la mitad correspondieron a la URSS, seguida de Alemania y Polonia.
- Las destrucciones materiales fueron muy importantes y afectaron, sobre todo, a las ciudades, los medios de comunicación y las instalaciones industriales.
- La guerra dejó un profundo impacto moral. Las modificaciones de fronteras y las expulsiones de minorías étnicas comportaron un elevado número de desplazamientos forzosos de población. Durante la contienda, los derechos humanos habían sido sistemáticamente vulnerados y la violencia y la crueldad se habían instalado en Europa durante seis largos años. Además, el conocimiento del Holocausto judío y las consecuencias de la bomba atómica dejaron un profundo trauma sobre la población.
Las Conferencias de Paz
Los tres grandes Aliados (Gran Bretaña, Estados Unidos y la URSS) se reunieron por primera vez en la Conferencia de Teherán (noviembre de 1943), a la que asistieron Churchill, Roosevelt y Stalin. Allí se tomaron las primeras medidas militares conjuntas para acelerar el final de una guerra que ya se consideraba ganada. La segunda gran conferencia de los tres grandes tuvo lugar en la ciudad de Yalta (febrero de 1945), donde se decidió la eliminación del régimen nazi en Alemania. La tercera conferencia de paz se celebró en Potsdam (agosto de 1945). Los nuevos protagonistas (Attlee, Truman y Stalin) se pusieron de acuerdo en diversos aspectos referentes a Alemania.
La Creación de la ONU
La ONU (Organización de las Naciones Unidas) se fundó en la Conferencia de San Francisco (abril de 1945) para sustituir a la Sociedad de Naciones.
En la ONU, todos los Estados miembros están representados en la Asamblea General y para adoptar una decisión es necesaria una mayoría de dos tercios.
El Deterioro de las Relaciones entre los Aliados
Finalizada la Segunda Guerra Mundial, se evidenció un gran antagonismo entre los países occidentales y la Unión Soviética. Las Conferencias de Yalta y Potsdam habían dividido Europa en dos zonas de influencia, y tanto estadounidenses como soviéticos estaban decididos a mantenerlas y a impedir que su rival pudiese ganar nuevas posiciones. Británicos y estadounidenses recelaban del dominio que estaban ejerciendo los soviéticos en las zonas liberadas por el Ejército Rojo, y la Unión Soviética se sentía amenazada por la bomba atómica que poseía únicamente Estados Unidos. Pero las discrepancias no consistían tan solo en motivos territoriales o militares, sino que eran fundamentalmente de tipo ideológico, ya que ambos Estados representaban dos modelos antagónicos de organización política, social y económica.
La Ruptura: El Telón de Acero
La ruptura definitiva entre los dos bloques tuvo lugar en 1947, cuando el presidente estadounidense expuso la que se conoce como Doctrina Truman. En ella denunciaba la creación de regímenes comunistas en los países ocupados por el Ejército Rojo y proponía la intervención americana para frenar la amenaza comunista en Europa. Para ello se aumentó el número de soldados y bases estadounidenses en Europa y se propuso el Plan Marshall, una ayuda económica para impulsar la reconstrucción del viejo continente. Como contrapartida, la URSS propuso el Informe Jdanov, que denunciaba la actuación de Estados Unidos como una vía de dominio de Europa. La URSS manifestó su decisión de ayudar a los países que no quisiesen someterse a la influencia estadounidense y potenció la fundación del Kominform, una organización que reunía a los países comunistas.
La Partición de Alemania en Dos Estados
El primer escenario de enfrentamiento entre los dos bloques tuvo lugar en Alemania. Una vez finalizada la guerra, este país había quedado dividido en cuatro zonas ocupadas por británicos, franceses, estadounidenses y soviéticos. En julio de 1948, los tres Aliados occidentales decidieron unificar sus territorios y crear un Estado federal alemán. La crisis aceleró la división de Alemania en dos Estados: la República Federal de Alemania, que se encuadró dentro del bloque occidental, y la República Democrática de Alemania, bajo influencia soviética. Berlín, a su vez, quedó dividida en dos zonas entre las que se levantó un muro en el año 1961.
Guerra Fría y Coexistencia Pacífica
¿Qué es la Guerra Fría?
La Guerra Fría consiste en un modelo de relaciones internacionales que se desarrolla después de la Segunda Guerra Mundial y que se basaba en un permanente antagonismo entre los bloques liderados por Estados Unidos y la Unión Soviética. Fue un enfrentamiento muy tenso, sin llegar nunca a una confrontación directa.
Los Conflictos de la Guerra Fría
La rivalidad entre las superpotencias se manifestó también en conflictos bélicos alejados de su territorio, en los que el enfrentamiento se producía indirectamente a través de aliados periféricos.
- La Guerra de Corea: En 1950, Corea del Norte invadió el Sur con el apoyo soviético, y las tropas estadounidenses, apoyadas por la ONU, intervinieron en defensa de Corea del Sur. El conflicto finalizó en 1953 con la Paz de Panmunjom, que consagró la división de las dos Coreas.
- La Guerra de Vietnam: En la Indochina francesa, las fuerzas comunistas del Viet Minh proclamaron la independencia en 1945. Francia no la aceptó y se inició una guerra entre las fuerzas nacionalistas. La guerra finalizó en 1954 y consolidó la división de Vietnam del Norte, dirigido por un gobierno comunista, y Vietnam del Sur, con un régimen prooccidental.
- La Crisis de los Misiles: En 1959 se había instalado en Cuba un régimen revolucionario dirigido por Fidel Castro, régimen que nunca fue aceptado por EE. UU. Para ahogar al régimen castrista, el gobierno estadounidense declaró el boicot económico a la isla, que pronto recibió el apoyo de la URSS y fue alineándose con el bloque comunista. El momento de máxima tensión se vivió en 1962, cuando, ante la amenaza de que los soviéticos iban a instalar misiles nucleares en la isla, Estados Unidos ordenó un bloqueo marítimo. Después de días de elevada tensión internacional, los soviéticos se retiraron con el compromiso de desmontar las bases militares y EE. UU. levantó el bloqueo.
La Coexistencia Pacífica
Las nuevas relaciones entre los bloques vinieron propiciadas por una nueva generación de dirigentes (Jruschov en la URSS y Kennedy en EE. UU.). Estos se mostraron ante el mundo con una actitud más tolerante.
El Fin de los Imperios Coloniales: La Descolonización
Las Causas de la Descolonización
Diversas causas favorecieron el proceso descolonizador:
- El deseo de independencia de la mayoría de la población de las colonias.
- Los movimientos nacionalistas se vieron con fuerzas para enfrentarse a los colonizadores.
- La disminución del prestigio de las potencias coloniales.
- La ONU (1946) y la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), que proclamaron el derecho de los pueblos a disponer de sí mismos (derecho de autodeterminación).
- El apoyo a la descolonización de las dos grandes potencias (EE. UU. y la URSS).
El Proceso Descolonizador
La descolonización se realizó a lo largo de más de treinta años y pasó por diferentes etapas:
- La primera etapa se inició en Asia tras el fin de la Segunda Guerra Mundial. En 1954, y tras una guerra de nueve años, Francia abandonó Indochina y como consecuencia Vietnam se proclamó Estado.
- La segunda etapa afectó al Norte de África y se inició en 1951, cuando la colonia italiana de Libia accedió a la soberanía. En 1956, Francia reconoció la independencia de Marruecos y Túnez, pero intentó mantener Argelia, hecho que comportó una larga y cruenta guerra que finalizó con la independencia en 1962.
- La última fase afectó al Cono Sur africano y fue bastante tardía. En 1975 desaparecieron las colonias portuguesas. En Sudáfrica, cuya independencia había sido declarada por los colonos blancos en 1961, el régimen del apartheid se mantuvo hasta 1993, cuando se abolieron las leyes discriminatorias para la población negra.
El Conflicto de Oriente Medio
Palestina era un protectorado británico. En 1945, las milicias judías de Palestina declararon una insurrección para forzar la retirada de los ingleses. En 1947, una resolución de la ONU propuso la partición en dos Estados, uno judío y otro palestino, y en 1948, Ben Gurion proclamó el Estado de Israel. Los palestinos y sus vecinos musulmanes no reconocieron el nuevo Estado israelí, formaron la Liga Árabe (Egipto, Siria, Arabia Saudí, Jordania, Irak, Líbano…) y desencadenaron la primera guerra árabe-israelí (1948-1949), que finalizó con la adquisición de nuevos territorios palestinos por parte de Israel. Para defender los intereses palestinos, en 1964, se creó la OLP (Organización para la Liberación de Palestina), dirigida por Yaser Arafat, que fomentó el terrorismo contra Israel y sus aliados. En 1993 se acordó la creación en Israel de un territorio autónomo bajo autoridad palestina. Sin embargo, los enfrentamientos prosiguen y la convivencia entre judíos y palestinos continúa siendo muy conflictiva.
Descolonización y Tercer Mundo
El Surgimiento del Tercer Mundo
La mayoría de los nuevos Estados surgidos de la descolonización coincidían en el hecho de sentirse marginados. En 1955 se reunió la Conferencia de Bandung, que acogió a los representantes de 29 países africanos y asiáticos recientemente descolonizados. Se acordó una serie de principios: condena del colonialismo, soberanía e igualdad de todas las naciones, rechazo de la injerencia en los asuntos internos de los Estados, arreglo de los conflictos por vía pacífica y creación de planes de ayuda al desarrollo económico y cultural de los países afro-asiáticos. Como resultado, en la Conferencia de Belgrado (1961) se estableció el Movimiento de Países No Alineados, que integró a 25 países.
El Neocolonialismo, una Herencia Colonial
La independencia política no fue acompañada de una independencia económica, ya que en la mayoría de los nuevos Estados se mantuvieron muchos de los intereses económicos de las antiguas metrópolis. Esta situación se conoce como neocolonialismo, una nueva forma de dominio que comporta una dependencia económica y cultural de la antigua metrópoli.
Disputas Étnicas y Territoriales
La descolonización dio origen a innumerables disputas étnicas y territoriales entre los nuevos Estados, sobre todo los africanos. El interés de algunos pueblos por imponerse sobre sus vecinos generó un buen número de enfrentamientos armados. Algunos de los nuevos dirigentes instauraron gobiernos dictatoriales y corruptos, sustentados por el ejército.