La Guerra Civil Española: Causas, Desarrollo y Consecuencias

La Guerra Civil Española (1936-1939)

Causas y Bandos Enfrentados

La Guerra Civil Española (GCE) fue un conflicto bélico que tuvo lugar entre 1936 y 1939, desencadenado por un pronunciamiento militar contra la Segunda República Española. El asesinato del líder derechista José Calvo Sotelo, el 13 de julio de 1936, fue el detonante del golpe de Estado que se venía gestando desde el triunfo del Frente Popular en las elecciones de febrero de ese mismo año.

El conflicto enfrentó a dos bandos:

  • El Bando Nacional: Liderado por militares sublevados, conocidos como «nacionales», que se consideraban los auténticos defensores de España. Contaban con el apoyo de la alta burguesía, la Iglesia Católica y la derecha política.
  • El Bando Republicano: Conocido por los rebeldes como «los rojos», estaba formado por el movimiento obrero, partidos de izquierda y grupos anticlericales. Se dividían en diversas formaciones de inspiración anarquista o marxista, que posteriormente se integrarían en el Ejército Popular.

El Bando Nacional recibió apoyo militar de Italia y Alemania, mientras que el Bando Republicano tuvo más dificultades para conseguir aliados debido a la política de no intervención de Francia y Gran Bretaña. La Unión Soviética organizó las Brigadas Internacionales para luchar contra el fascismo.

Desarrollo de la Guerra

La GCE se caracterizó por la brutalidad y la eliminación del rival ideológico. Ambos bandos cometieron atrocidades y ejecuciones. La guerra atravesó varias etapas:

La Batalla por Madrid (1936)

Tras el fracaso del golpe de Estado, los rebeldes intentaron tomar Madrid, pero fueron frenados por las fuerzas republicanas. Los intentos de llegar a la capital por el sur (Batalla del Jarama) y el norte (Batalla de Guadalajara) también fracasaron.

La Campaña del Norte (1937)

Franco centró sus esfuerzos en la conquista del norte republicano, desde el País Vasco hasta Asturias. Durante esta campaña tuvo lugar el bombardeo de Guernica, un hecho que conmocionó al mundo.

La Ofensiva de Aragón y Valencia (1938)

Tras la derrota del ejército republicano en Teruel, los nacionales avanzaron hasta el río Ebro, dividiendo la zona republicana en dos.

Batalla del Ebro y Final de la Guerra (1939)

La Batalla del Ebro fue el último intento desesperado de la República por cambiar el curso de la guerra. Tras su derrota, el ejército franquista conquistó Cataluña y Madrid. La guerra terminó oficialmente el 1 de abril de 1939 con la victoria del Bando Nacional.

Consecuencias de la Guerra

La Guerra Civil Española tuvo consecuencias desastrosas para el país. La infraestructura, los campos de cultivo y las ciudades quedaron devastados. Se estima que hubo cerca de medio millón de muertos y miles de refugiados que abandonaron España.

El Régimen Franquista (1939-1975)

Años 40: Autarquía y Aislamiento

Durante la Segunda Guerra Mundial, España se mantuvo neutral, pero su régimen dictatorial y su apoyo a las potencias del Eje la llevaron al aislamiento internacional. La autarquía económica, basada en la autosuficiencia, resultó en una época de miseria y hambre.

Años 50: Fin del Aislamiento

La Guerra Fría propició una apertura de España hacia el exterior. Se mejoraron las relaciones con Estados Unidos y el Vaticano, y España ingresó en la ONU. Sin embargo, el régimen franquista se mantuvo firme en su rechazo a la democracia.

Años 60: Cambio Social y Oposición

La reforma económica de 1959 produjo un crecimiento económico y un cambio social, con el surgimiento de una clase media que sería protagonista de la transición a la democracia. La oposición al régimen se fortaleció, con huelgas, manifestaciones y acciones terroristas de grupos como ETA y el FRAP.

Oposición al Franquismo

La oposición al franquismo se manifestó en diferentes etapas:

  • Primera Etapa (1939-1959): El movimiento obrero, los grupos monárquicos y el maquis (guerrilleros antifranquistas) fueron los principales frentes de oposición.
  • Segunda Etapa (1960-1975): La oposición se intensificó, con huelgas, manifestaciones estudiantiles y acciones terroristas. La conspiración monárquica continuó, y las críticas al régimen se extendieron a amplios sectores de la sociedad.

La muerte de Franco en 1975 abrió el camino a la transición democrática y al fin de la dictadura.

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