España en el Primer Tercio del Siglo XX (1902-1931)
La Monarquía de Alfonso XIII y la Crisis de la Restauración
España inició el siglo conmocionada por el Desastre del 98. El desfase entre la España «oficial» y la «vital» era patente. Era necesario regenerar el sistema político, económico y social. Poco a poco comenzó el despegue industrial, dando lugar a incipientes clases medias y al proletariado.
En la política, el sistema de turnos era un sistema parlamentario ficticio, apoyado en el caciquismo y la oligarquía. La implantación en 1890 del Sufragio Universal puso en evidencia el fraude electoral.
Subida al trono de Alfonso XIII
Declarado mayor de edad en 1902, continuó con el turno pacífico de partidos. Se ideó una «revolución desde arriba», asumiendo desde el poder las posturas regeneracionistas:
- Saneamiento financiero.
- Reforma social del Estado.
- Regeneracionismo educativo.
La oposición al sistema de turnos
Fueron dejados de lado en el sistema de Cánovas los Carlistas, Republicanos, Nacionalistas periféricos y el Movimiento Obrero (anarquistas y socialistas). Se crearon diversos grupos como la Lliga Regionalista, el Partido Reformista, y creció el movimiento obrero, pero ninguno constituía una amenaza real al turno de partidos.
El gobierno largo de Maura (1907 – 1909)
Estos dos años le permitieron realizar su programa regeneracionista, buscando la aproximación mutua entre Pueblo y Estado:
- Ley Electoral de 1907: Buscaba acabar con el caciquismo.
- Ley de Administración Local: Fracasó debido a la oposición de republicanos y socialistas.
- Ley de 1909 del Derecho a la Huelga: Incluía el derecho de asociación y sindicación.
- Creación del Instituto Nacional de Previsión (para cuestiones sociales).
- Política de signo nacionalista.
El envío de más tropas a Melilla originó la Semana Trágica de Barcelona (1909):
- Organizada por socialistas y anarquistas.
- Revolución de signo anticlerical.
- Duramente reprimida por el gobierno.
No obstante, forzó la dimisión de Maura.
El liberalismo de Canalejas (1909-1912)
Líder del Partido Liberal y última esperanza del regeneracionismo. Acciones principales de su gobierno:
- Sustitución del impuesto de consumos por el de la renta urbana.
- Servicio militar obligatorio.
- Continuación de las reformas sociales.
- Ley de presupuestos.
- Ley del Candado sobre congregaciones religiosas.
- Proyecto de mancomunidades.
Asesinado por un anarquista en noviembre de 1912, su muerte supuso la escisión definitiva de los «partidos turnantes» y el fin de la «revolución desde arriba».
Crisis de la Monarquía Parlamentaria y la Primera Guerra Mundial
Con la descomposición de los partidos turnantes se inició la crisis de la monarquía de Alfonso XIII. Se sucedieron diversos gobiernos incapaces de resolver el problema obrero y el económico. Estalló la I Guerra Mundial durante una profunda crisis, y España mantuvo la neutralidad.
Consecuencias de la Neutralidad
- Estímulo de la actividad económica, exportación de materias primas y artículos industriales a los países beligerantes.
- Recuperación de las inversiones extranjeras e incremento de las reservas de oro.
No obstante, la incapacidad de aumentar la producción causó una subida general de precios, pero no de salarios. Los cambios económicos favorecieron a la burguesía, mientras el proletariado y las clases medias se empobrecían. Esto alimentó a los sindicatos, que crecieron notablemente.
La Crisis de 1917
Este año España vivió una gran crisis que minaría lo que aún quedaba de la Restauración. Se manifestó en tres sectores:
- Juntas Militares de Defensa: Los militares, descontentos por el abandono del gobierno, se organizaron en Juntas, especie de sindicatos.
- Asamblea de Parlamentarios: El sistema parlamentario se hundía y Romanones gobernaba por decreto, prescindiendo de las Cortes. La oposición se organizó para obligar al gobierno a convocar Cortes Constituyentes. Algunos parlamentarios enfrentaron a Dato en 1917, amenazando con crear una Asamblea Nacional de Parlamentarios. Solo los catalanes la llevaron a cabo, pero se disolvieron ante los acontecimientos, evidenciando la imposibilidad de la colaboración de todas las fuerzas políticas.
- Huelga General Revolucionaria: Durante la guerra creció el movimiento obrero. Esto, sumado a la mala situación económica y la subida de precios, agravó la protesta social. En agosto de 1917 estalló una huelga dirigida por los socialistas para provocar un colapso del régimen. El método sería el paro general pacífico, con el objeto de implantar la república. Los anarquistas no secundaron la no violencia y se produjeron graves incidentes en las ciudades. Los militares sofocaron la rebelión proletaria.
La crisis de 1917 terminó realmente sin resultados concretos y todas las reformas quedaron pendientes.
El Camino hacia la Dictadura
Tras la crisis de 1917, el régimen quedó maltrecho. El sistema se hizo inviable y hasta 1923 se acudió a gobiernos de concentración. Estos gobiernos tuvieron grandes problemas:
- Heterogeneidad de las tendencias.
- Desaparición de la dinámica del turnismo.
1917 fue la caducidad definitiva del sistema de Cánovas. El problema de Marruecos terminaría con el Desastre de Annual en julio de 1921. Esto creó un resentimiento de los militares hacia los políticos, que les convenció de la idea de hacerse con el poder.
La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
El 13 de septiembre de 1923, el general Miguel Primo de Rivera dio un golpe de Estado que provocó la caída del gobierno. Primeras medidas:
- Suspensión de la Constitución.
- Disolución de las Cortes.
- Formación de un gobierno provisional, el Directorio Militar.
Actuación Política
El programa estaba en perfecto armonía con el espíritu regeneracionista y fue recibido con entusiasmo por la población.
Directorio Militar (1923-1925)
En el interior:
- Puso paz y orden, acabó con el terrorismo.
- Reducción al mínimo de las huelgas.
En el exterior:
- Solucionó el problema de Marruecos.
Directorio Civil (1925-1930)
Los militares fueron sustituidos por civiles, con una política que asegurase el desarrollo y progreso del país.
- En 1924 creó la Unión Patriótica.
- En 1927 se creó la Asamblea Nacional Consultiva, representante de todas las clases e intereses.
Marruecos: El Desembarco de Alhucemas
La solución del problema de Marruecos fue decisiva para la estabilidad del régimen. Primo de Rivera intentó negociar con los rifeños sin éxito. Junto a Francia, desembarcó en Alhucemas en septiembre de 1925 con un rotundo éxito. La victoria contra los rifeños permitió institucionalizar la dictadura como fenómeno estable.
Política Económica
Las acciones positivas del gobierno se centraron fundamentalmente en dos áreas: la hacienda pública y las obras públicas.
- Hacienda Pública: Se saneó el régimen tributario, lo que permitió aumentar los ingresos del Estado sin aumentar los impuestos. En 1927 el presupuesto se liquidó con superávit. Se creó CAMPSA.
- Obras Públicas: Se realizó un gran plan de construcción de embalses, mejora de los ferrocarriles y electrificación de líneas. También se impulsó el plan de «casas baratas» y la construcción de gran cantidad de edificios públicos.
En su conjunto, la política fue muy positiva debido al auge económico mundial y a planes estructurales realizados con anterioridad que no habían sido llevados a cabo.
Aspectos que la dictadura dejó sin abordar:
- Redistribución de la riqueza.
- Reforma tributaria profunda.
- Reforma agraria.
Pese al balance positivo, en los últimos años se devaluó la peseta, lo que produjo una crisis económica.
Política Social
Muy en la línea paternalista de Primo de Rivera:
- Legislación protectora del trabajo.
- Desarrollo del Instituto Nacional de Previsión.
- Código del Trabajo Corporativo (1926): Sobre la relación con los trabajadores. Sus órganos principales fueron:
- Comités Paritarios (órganos de arbitraje).
- Organización Corporativa (instancias de representación colectiva).
Oposición y Caída del Régimen
A pesar de la buena acogida general, el régimen cayó debido a tres frentes adversos:
- Intelectuales.
- Ejército.
- Financieros.
El gobierno se había mostrado indiferente hacia los intelectuales, y los estudiantes se manifestaban en las calles. La depresión de 1929 minó su popularidad. En enero de 1930, falto de apoyos, Primo de Rivera presentó su dimisión.
El Movimiento Obrero durante el Primer Tercio del Siglo XX
A principios de siglo, solo el 5% de los trabajadores estaba en organizaciones sindicales. En 1910, la UGT aumentó sus efectivos y el PSOE conquistaba sus primeros éxitos electorales (municipales y primer diputado nacional).
La CNT en 1914 tenía gran influencia en Cataluña. Este crecimiento de los grupos obreros hizo que las huelgas aumentasen. En 1919, la CNT derivó hacia la lucha armada anarcosindicalista. En 1921 se produjo la escisión comunista del PSOE, pero pese a esto, la UGT y el partido crecieron mucho.
Situación de las organizaciones obreras en 1923:
- CNT: Sin dirección clara.
- PSOE: Con 8.000 afiliados después de la escisión, guardaba intacta su estructura.
- UGT: 200.000 afiliados.
- PCE: (Recientemente creado) Era débil orgánica e ideológicamente.
Al conocerse el golpe de Estado, CNT y PCE se opusieron. PSOE y UGT se mostraron pasivos. Primo de Rivera, por su parte, quiso pacificar con la represión y declaró ilegales a PCE y CNT. Con los socialistas se mostró diferente, intentando atraerlos.
Caída de la Monarquía
Después de la marcha de Primo de Rivera, el rey dio la jefatura a Dámaso Berenguer. Su gobierno fue un puro «pasar el tiempo» (la Dictablanda). Berenguer dimitió.
Las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 fueron una catástrofe para la monarquía. El rey abandonó el poder y se instauró un gobierno provisional republicano.