La Edad Moderna en la historia de España se caracteriza por el inicio de la globalización cultural, económica y social, un proceso impulsado por los Reyes Católicos a partir del descubrimiento de América en 1492. Isabel I de Castilla (1451-1501) y Fernando II de Aragón (1452-1516) no solo culminaron la Reconquista, sino que sentaron las bases de la Monarquía Hispánica, que se consolidaría como una potencia mundial defensora de la Iglesia Católica.