La Península Ibérica: De la Antigüedad a la Edad Media
La Conquista y Romanización de Hispania
La llegada de los romanos inició la conquista de Hispania en el marco de un proceso de expansión política entre los años 218 y 19 a.C. La existencia de pueblos en la península como los íberos, celtas, fenicios y cartagineses, con diferente desarrollo económico y cultural, hizo que la conquista se efectuara en tres etapas:
- Primera etapa (218 a 206 a.C.): Comenzó con la entrada de Roma, venciendo a los cartagineses en la Segunda Guerra Púnica, lo que supuso el dominio romano del Mediterráneo.
 - Segunda etapa (hasta 133 a.C.): Las Guerras Celtíberas culminaron en el año 133 a.C. tras la destrucción de Numancia.
 - Tercera etapa (133 a 19 a.C.): La conquista de Hispania se completó con las campañas de Octavio Augusto en el norte peninsular, en las que venció a astures y cántabros.
 
Características de la Romanización
La romanización se define como la imposición de los modelos de sociedad, economía, administración y cultura de Roma sobre los pueblos conquistados. La civilización romana se caracterizó por ser una civilización urbana, lo que dio lugar a una red de ciudades. Los funcionarios, comerciantes y soldados contribuyeron a difundir el uso del latín vulgar como elemento de cohesión lingüística, convirtiéndose en la lengua oficial del Imperio Romano. Se aplicó el Derecho Romano y se realizaron grandes obras públicas, como las vías de comunicación y las calzadas, para facilitar el control del territorio mediante desplazamientos militares. Por último, se introdujeron elementos artísticos y culturales, y se desarrollaron nuevas formas de religiosidad.
Organización Territorial y Política
Para ejercer el poder político y administrativo, Roma efectuó una división provincial. Cada provincia se subdividía en conventus iuridici (conventos jurídicos) con el fin de facilitar la administración de justicia y la recaudación de impuestos. En el año 197 a.C., el territorio conquistado se dividió en dos provincias: Citerior y Ulterior. En el año 284 d.C. se crearon Gallaecia y Cartaginense. Dentro de la romanización, los municipios tuvieron gran importancia como órgano de poder. Al iniciarse la conquista, los núcleos de población fueron denominados civitates, que recibieron diferente trato según el orden de aceptación de la conquista. También se fundaron colonias gobernadas por élites locales leales a Roma, como Legio (León). En el año 212 d.C., con la concesión del derecho de ciudadanía a todos los habitantes del Imperio (Constitutio Antoniniana), todos los núcleos recibieron el estatuto de municipio y fueron gobernados por una asamblea.
Economía y Sociedad Hispano-Romana
En cuanto a la economía, se impuso un régimen en el que destacaba la ciudad como centro de actividades y se basó en la exportación de recursos a gran escala. Las principales minas peninsulares pasaron a ser propiedad estatal y se arrendaron a compañías (publicani). Las explotaciones agrícolas latifundistas pertenecían al Estado, se introdujo tecnología agraria con la aplicación del barbecho y se dio un uso masivo de mano de obra esclava. La ganadería estaba muy cotizada gracias a la lana de la Bética. El comercio se practicaba a gran escala, favorecido por calzadas y puertos, y existía un sistema monetario eficaz en el que dominó la plata como moneda más común.
En la sociedad hispano-romana se impuso el modelo social romano, estructurado en esclavos y hombres libres. Se distinguían grupos sociales dominantes:
- Orden Senatorial: Ciudadanos romanos con plenitud de derechos civiles y políticos, con altos cargos y grandes propiedades.
 - Orden Ecuestre: Ciudadanos romanos de clase media, comerciantes, medianos propietarios y funcionarios.
 - Orden Decurional: Formado por los ciudadanos más ricos de los municipios.
 
También existían grupos humildes que se dividían en la plebe (rústica y urbana), que establecía lazos con los más ricos. Los hombres libres poseían el Derecho de Gentes. Es importante mencionar a los esclavos, quienes eran propiedad de un hombre libre; algunos podían conseguir la libertad y pasaban a ser libertos (hombres libres, pero sin la ciudadanía romana).
Arte y Cultura
El arte romano en Hispania se caracterizó por su utilitarismo; un ejemplo de ello fueron las obras públicas como los puentes de Alcántara o Córdoba. También hubo construcciones para los espectáculos públicos. A partir del siglo I a.C. se dio la presencia en Hispania de grandes filósofos y oradores como Mela. Por otro lado, Roma aportó gran cantidad de religiones, como el culto al panteón griego.
El Reino Visigodo de Toledo
El fin de Roma como entidad política se da con la entrada en Hispania de vándalos, suevos y alanos, pueblos germánicos que penetraron en el Imperio Romano. Para combatirlos, el Imperio firmó un pacto militar con los visigodos, pueblo germánico más romanizado. Los visigodos vencieron a los invasores y se establecieron, fundando el Reino Visigodo con capital en Tolosa. En 476 d.C. se convirtieron en independientes tras la caída del Imperio Romano de Occidente. En 507 d.C., los visigodos fueron derrotados en la batalla de Vouillé y trasladaron la capital de su reino a Toledo, donde mantuvieron las estructuras romanas. Finalmente, el Reino Visigodo terminó con la invasión musulmana de Táriq en el año 711, siendo derrotados en la batalla de Guadalete, donde murió el último rey, Rodrigo.
Al-Ándalus: La Presencia Musulmana en la Península Ibérica
Invasión y Emirato Dependiente
El islam tiene su origen en la península arábiga y comienza con las predicciones del profeta Mahoma. En su expansión, llega a la Península Ibérica. Al-Ándalus fue el territorio de la Península Ibérica dominado por los musulmanes y pasó de ser una provincia dependiente del califa de Damasco a un emirato y, posteriormente, a un califato independiente.
Un conflicto sucesorio por el trono visigodo motivó la intervención del gobernador musulmán de Tánger. Táriq invadió Al-Ándalus. En el verano del 711, desembarcó en Gibraltar con unos 7.000 bereberes y derrotó al ejército visigodo en las proximidades del río Guadalete. Un año después, el gobernador del norte, Musa, llegó a la península con nuevas tropas. Fue el comienzo de la presencia musulmana en la Península Ibérica.
El sistema de conquista se basaba en el reparto más equitativo de las tierras expropiadas a los nobles y eclesiásticos que no se entregaron a los musulmanes. Además, el sistema fiscal era más equitativo y menos gravoso. Las capitulaciones eran acuerdos entre invasores musulmanes y jefes visigodos. El Emirato Dependiente (711-756) dependía del califa de Damasco. Los califas eran la máxima autoridad en el mundo musulmán, con poder religioso, político y militar. Los primeros emires consolidaron el dominio musulmán y efectuaron incursiones al norte de los Pirineos, poniendo fin a su expansión en el año 732 (Batalla de Poitiers).
Los bereberes recibieron las peores tierras en las zonas montañosas más pobres. Para acabar con las luchas ocasionadas por dichos repartos, los emires solicitaron ayuda a los soldados sirios, que constituyeron un nuevo grupo étnico que se estableció en Andalucía. Los conflictos entre musulmanes debilitaron el emirato y permitieron la consolidación de los núcleos cristianos en el norte peninsular, que se deshicieron del dominio andalusí.
El Emirato Independiente y el Califato de Córdoba
En 750, los Omeyas fueron asesinados por la familia rival de los Abasíes. El único superviviente fue Abd al-Rahman, quien escapó a Al-Ándalus. Tras desembarcar en Almuñécar, derrotó al emir Yusuf cerca de Córdoba y proclamó el Emirato Independiente en 756.
- Abd al-Rahman I (756-788): Se enfrentó a los cristianos del norte y combatió los intentos de Carlomagno de invadir sus dominios. Las sublevaciones continuaron con sus sucesores debido a las disputas entre pueblos musulmanes. Además, hubo ataques vikingos en el valle del Guadalquivir.
 - Abd al-Rahman II (822-852): Con su reinado se alcanzó uno de los momentos más prósperos de la historia de Al-Ándalus, ya que venció a los vikingos y desarrolló una brillante vida cultural.
 - Abd al-Rahman III (912-961): Sofocó la revuelta de Úmar ibn Hafsún y, al año siguiente, en el 929, asumió el título de califa, dando comienzo al Califato de Córdoba. Consolidó el estado musulmán en Al-Ándalus y trasladó la administración a la ciudad de Medina Azahara. El sistema fiscal se basaba en la obligación coránica de la limosna por los creyentes.
 - Al-Hakam II (961-976): Fue el gran protector de las ciencias y las artes. Córdoba se convirtió en el centro cultural más importante de la época.
 - Hisham II (976-1009): Depositó su confianza en su primer ministro, Almanzor. El botín de las conquistas saneó los recursos del califato.
 
Decadencia y Fin de Al-Ándalus
Almanzor murió por las heridas sufridas en batalla en 1002, lo que supuso la desintegración del califato. En el año 1009, el califa Hisham II fue destronado y en Córdoba estalló una guerra civil. En el año 1031, fue expulsado el último califa de Córdoba, Hisham III. De las ruinas del califato surgieron alrededor de treinta reinos musulmanes, conocidos como Reinos de Taifas.
A principios del siglo XII, los almohades, también bereberes, se hicieron dueños del imperio almorávide. Los almohades conquistaron Al-Ándalus entre 1140 y 1203 y derrotaron a los castellanos en Alarcos en 1195. El imperio almohade se desmoronó tras la victoria cristiana en la Batalla de las Navas de Tolosa (1212).
A finales del siglo XIII, el único reino andalusí que pervivió era el Reino Nazarí de Granada. Este vivió su época de mayor esplendor con Mohammed V, pero tras la muerte del monarca entró en un declive continuado. Desde 1417, la guerra civil fue constante. En Al-Ándalus se desarrolló una civilización urbana que conoció una gran pujanza económica. La toma de Granada en 1492 supuso el final de ocho siglos de presencia musulmana en la Península Ibérica, un periodo que se caracterizó por el desarrollo de una cultura árabe de gran originalidad.
La Reconquista y la Consolidación de los Reinos Cristianos
El Inicio de la Reconquista y la Expansión Territorial
Tras la invasión musulmana se produjo el inicio de la Reconquista en la Batalla de Covadonga (722). Tras este hecho, se formaron los primeros núcleos cristianos. A partir de la victoria cristiana en la Batalla de las Navas de Tolosa y durante el siglo XIII, se produjo el hundimiento del poder musulmán en la Península Ibérica.
Fernando III de Castilla conquistó la zona del Guadalquivir y Jaime I de Aragón la zona de Levante y Baleares. Se consolidaron cinco reinos principales en el territorio peninsular: Portugal, la Corona de Castilla, la Corona de Aragón, Navarra y el Reino Nazarí de Granada.
León y Castilla se acabaron uniendo definitivamente en 1230 con Fernando III. Castilla se había consolidado como el Estado hegemónico. Respecto al reino musulmán de Granada, la frontera apenas se movió. Mientras tanto, la monarquía castellana se fortaleció, extendiendo su influencia hasta las Islas Canarias.
Estructura Política e Institucional de los Reinos Cristianos
La Corona de Castilla y la Corona de Aragón presentaban una estructura política similar basada en tres instituciones principales:
- La Monarquía: Los reyes se creían elegidos por Dios y gozaban de poder militar. Alfonso X de Castilla redactó el Fuero Real y el Código de las Siete Partidas, un documento jurídico donde se recopilaron la mayor parte de las cuestiones legales. Alfonso XI fijó el derecho de sucesión al trono por la línea de primogenitura. El ejército se fortaleció con un cuerpo semipermanente capaz de emplear las nuevas y costosas armas.
 - Las Cortes: Eran la reunión de los tres estamentos: la nobleza, el clero y el Estado llano.
 - Los Municipios: Disfrutaban de una cierta autonomía. En Castilla, Alfonso VI impulsó el regimiento, formado por regidores.
 
El Pactismo y las Instituciones de Gobierno
El pactismo se consolidó a finales del siglo XIII cuando las Cortes obtuvieron la función legislativa. Cada reino recogió sus derechos y costumbres en un código: *Usatges* (en Cataluña), fueros y *furs* (en Valencia).
Con respecto a las instituciones políticas de ambos reinos, muchas eran comunes, aunque existían diferencias:
- El Consejo Real: Organismo que aconsejaba y ayudaba al rey a tomar decisiones importantes.
 - Las Cortes de León y Castilla: Tenían un carácter consultivo, pero jugaron un papel importante en las crisis políticas y sociales. Estaban supeditadas al rey.
 - Las Cortes de Aragón: Disponían de mayores atribuciones que en Castilla, y cada territorio (Aragón, Cataluña, Valencia) contaba con sus propias Cortes.
 - La Cancillería Real: Era la encargada de la redacción de la documentación real y de la guarda del sello.
 - La Audiencia: El órgano supremo de justicia. En 1371, en Castilla, se crearon funciones judiciales en nombre del rey.
 - El Gobierno Nacional Real: Administraba la economía del reino y recaudaba los impuestos. Se creó el Consejo de la Mesta para evitar conflictos entre agricultores y ganaderos.
 - Los Virreyes: (Solo en Aragón) Eran representantes del rey en los distintos territorios.
 - Las Diputaciones: (Solo en Aragón) Se creaba una comisión para organizar y controlar la recaudación.
 - Administración de Justicia: Los veguers, los justicias y los batles impartían justicia en nombre del rey.
 
Tensiones Políticas y Guerras Civiles
Respecto a las tensiones políticas en la Edad Media, la nobleza y el clero chocaban con las pretensiones autoritarias de la monarquía. Esto provocó la Guerra Civil Castellana entre 1366 y 1369.
En la Corona de Aragón, los enfrentamientos se centraron entre el monarca y la nobleza. Pedro IV derrotó a los nobles en 1348 con la ayuda de la rica burguesía catalana. La muerte de Martín el Humano provocó una crisis política en Aragón que se resolvió con el Compromiso de Caspe (1412), que entronizó a Fernando I de Aragón (de la Casa de Trastámara).
La Guerra Civil Catalana enfrentó a la monarquía con la Generalitat y terminó con la rendición de Barcelona y la firma de la Capitulación de Pedralbes. En los siglos XIV y XV, las ciudades fueron ganando fuerza. En el siglo XV, los Reyes Católicos llevaron a cabo la unificación territorial y establecieron una nueva organización política.
Conclusión: El Fin de la Edad Media
Tras la muerte del último califa, se da comienzo al reinado de Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, formando la Monarquía Católica. Tras la conquista de Granada (1492) y la expulsión de los judíos, recibieron el nombre de Monarquía Católica.
Apéndice: Textos Adicionales No Históricos
Bungee Jumping in Cabezo Gordo
The day that I did my first bungee jump was a day that I’ll always remember. My friends had all tried it and persuaded me to have a go. When the big day came, I thought I was making a mistake.
Early in the morning, we headed for the bungee jumping center in Spain. As soon as we arrived, everyone started talking about the incredible views across Cabezo Gordo. Soon afterwards, getting the bungee jump over with was all that I could think about.
When we reached the center, we were greeted by the extremely friendly and enthusiastic team that was responsible for the bungee jumping. I stood looking down at the water, my heart was beating so loudly that I thought it would burst. At first I was hanging upside down and swinging on the bungee. And my friend had been right. I felt absolutely amazed, I’ll never forget that experience.
Social Networking Sites Destroy People’s Privacy. Do you agree?
Nowadays social networking sites allow people to post updates which even strangers can read. However, I do not believe this means people’s privacy is destroyed by using these sites.
First and foremost, when people post an update on a social network it is usually their decision. Most people only upload pictures or post comments they want people to see.
Also, most social networking media allow us to control who sees our information. For example, you can allow only some people you are connected with to see certain updates. If we do not agree, we can decide not to join the site.
In conclusion, I believe we choose what personal information others see on social media. Therefore, it is not the sites that destroy our privacy. By joining them in the first place we are agreeing to make our lives public.
