Introducción: La España del Siglo XVIII bajo los Borbones
En el siglo XVIII, España experimentó la llegada de una nueva dinastía, los Borbones, y una Guerra de Sucesión que culminó en acuerdos de paz, donde España perdió todas sus posesiones europeas. La dinastía borbónica impuso en España el modelo francés de monarquía absoluta, implementando nuevas reformas para fortalecer el poder, el prestigio y la riqueza de los monarcas. Se intentó modernizar España y sacarla de su atraso económico y social, aplicando un amplio programa de reformas impuestas desde la monarquía, lo que se conoció como Despotismo Ilustrado. Carlos III es el mejor ejemplo de déspota ilustrado. La alta nobleza y gran parte del clero se opusieron a cualquier cambio, viendo en el absolutismo borbónico y sus reformas una amenaza para sus intereses. Durante el siglo XVIII, España mantuvo intacto su imperio colonial americano, aplicando medidas administrativas y comerciales, especialmente frente a la voracidad de países como Inglaterra.
1. La Guerra de Sucesión (1701-1715) y el Sistema de Utrecht: Política Exterior en Europa
1.1. La herencia de Carlos II y la Guerra de Sucesión
a) Los pretendientes al trono español
Dos sobrinos de Carlos II aspiraban a heredar su corona: el archiduque Carlos de Habsburgo y el príncipe Felipe de Anjou. Ambos, a su vez, eran descendientes de los Austrias españoles. Carlos II nombró heredero a Felipe de Anjou. El nuevo monarca debería comprometerse a mantener íntegros todos los territorios de la monarquía española. Muerto Carlos II, Felipe V fue coronado rey y jurado por las Cortes de los diferentes reinos en 1701.
b) Conflicto internacional
Las otras potencias europeas temieron que se pusiera fin al equilibrio entre estados. Se creó la Gran Alianza de La Haya contra los Borbones, a la que se unirían otros países europeos. Al año siguiente, declararon la guerra a Francia, iniciándose la Guerra de Sucesión española, un conflicto internacional con escenarios de lucha en las fronteras de Francia y en las colonias americanas, pero también dentro de la propia Península Ibérica, donde adquirió el carácter de guerra civil entre dos bandos que apoyaban a uno u otro pretendiente.
c) Guerra civil
En España, los diferentes reinos y territorios se dividieron a favor de uno u otro, teniendo en cuenta el modelo de Estado que defendía cada uno:
- Los felipistas o borbónicos fueron mayoría en Castilla; estaban a favor de la centralización política de la monarquía absoluta y contaban con el apoyo de los sectores populares, los grandes sufridores de la decadencia económica y del poder de los Austrias. La nobleza castellana recelaba de los Borbones y esperaba el desarrollo del conflicto para colocarse del lado del candidato que fuera ganando.
- Navarra, el País Vasco y la Corona de Aragón, especialmente Cataluña, apoyaban al candidato austriaco, que defendía un modelo de Estado confederal, basado en el pactismo y en la soberanía de las Cortes de los diferentes reinos. En Cataluña existía un fuerte sentimiento antifrancés desde la ocupación de su territorio durante la Guerra de los Segadores (1640-1652).
d) Desarrollo de la guerra
- Los primeros momentos de la guerra fueron favorables a la Liga antiborbónica. Disponía de una flota superior, y la armada inglesa estableció dos bases navales en Gibraltar y Menorca. Gracias al apoyo de la población, ocuparon todos los territorios de la Corona de Aragón. Carlos de Habsburgo entró en Madrid, obligando a Felipe V a salir. Pero el ejército borbónico recuperó pronto parte de los territorios perdidos (Valencia y Aragón), mientras Cataluña y Baleares quedaron fuera de su dominio.
- En 1711, el candidato austriaco se convirtió en emperador de Austria al morir su hermano sin descendencia. Inglaterra y la mayor parte de la Gran Alianza perdieron interés por el conflicto, ante el temor de que se repitiese la misma situación de dos siglos antes con Carlos V.
1.2. Fin de la guerra: El Sistema de Utrecht (1713)
a) Acuerdos de paz
Ambos bandos firmaron la Paz de Utrecht; los aliados se retiraron de Cataluña y Baleares, que continuaron la guerra por su cuenta hasta su derrota final. Menorca y Gibraltar permanecieron en manos inglesas. A cambio del reconocimiento internacional de su nieto Felipe V como rey de España, el monarca francés Luis XIV permitió el reparto de los territorios de la monarquía española entre las potencias europeas, incumpliendo el testamento de Carlos II.
b) Consecuencias de la aplicación de estos acuerdos de paz o Sistema de Utrecht
- Inglaterra se consolidó como una gran potencia naval y comercial. Se apoderó de Gibraltar y Menorca, obtuvo concesiones en el comercio con las Indias españolas y el envío anual de un barco con mercancías a las colonias españolas, conocido como navío de permiso. Además, obtuvo el monopolio del tráfico de esclavos africanos en América, conocido como el asiento de negros.
- Los Habsburgo de Austria controlaron el Imperio alemán y se apoderaron de los territorios españoles en Europa: Flandes, Luxemburgo, Milán, Nápoles y Sicilia.
- Cerdeña fue para Saboya.
- Portugal se anexionó Uruguay (Colonia del Sacramento). Esta ciudad se convirtió en un centro muy importante para el comercio y el contrabando de portugueses y británicos en las Indias españolas.
- España fue la gran derrotada, convirtiéndose en una potencia de segunda fila. Cedió la mayor parte de sus posesiones europeas, perdió enclaves estratégicos como Gibraltar y Menorca, y entregó el control del comercio americano, quedando reducida a los límites actuales, con la excepción del imperio americano.
1.3. Política exterior: Recuperación de territorios en Europa
a) Líneas que definieron la política exterior española en el siglo XVIII
- La recuperación de los territorios perdidos en el Tratado de Utrecht, tanto en el Mediterráneo como en el Atlántico, lo que supuso enfrentarse al poder marítimo y comercial de Inglaterra.
- Se hizo necesario reforzar la flota naval y buscar aliados.
- Francia fue el aliado con el que se firmaron sucesivos Pactos de Familia (ambas dinastías reinantes eran familia). Los Pactos de Familia, a los que se unió más adelante el reino de Nápoles, acordaron que España ayudaría a Francia en las guerras europeas a cambio de que esta defendiera los intereses españoles en Italia. Los dos primeros se firmaron durante el reinado de Felipe V y el tercero en el de Carlos III. A los franceses les favoreció esta alianza; la unión de ambas flotas contrarrestó la superioridad marítima británica y, de esta manera, protegieron sus intereses en las Indias.
b) Actuaciones y territorios recuperados
- Sicilia y Nápoles (Reino de las Dos Sicilias): Felipe V, presionado por su segunda esposa, Isabel de Farnesio, y gracias al apoyo francés (Primer y Segundo Pacto de Familia), consiguió vencer en las guerras de Italia y convertir a su tercer hijo Carlos en rey de las Dos Sicilias (futuro Carlos III).
- Fernando VI, hijo del primer matrimonio de Felipe V, mantuvo una política de neutralidad con el objetivo de sanear la Hacienda y reforzar la flota de guerra.
- Carlos III abandonó la política de neutralidad de su antecesor y firmó el Tercer Pacto de Familia, debiendo apoyar a Francia en dos nuevas guerras contra Inglaterra: la Guerra de los Siete Años (1756-1763) tuvo resultados desastrosos: España perdió La Habana y Manila, sustituidas después por la Florida. Pero el apoyo franco-español a los colonos independentistas de Norteamérica frente a Inglaterra (Guerra de Independencia de Estados Unidos, 1776-1783) permitió a España recuperar Florida y Menorca (1788).
- No se recuperaron Gibraltar, Flandes, Milán ni Cerdeña.
- Carlos IV mantuvo la alianza con Francia, pero fueron años de revolución en el país vecino. Tras la ejecución de Luis XVI, decidió ayudar a Inglaterra en su lucha contra la Convención francesa.
2. Reformas en la Organización del Estado: La Monarquía Centralista
La nueva dinastía de los Borbones y sus ministros:
a) Los monarcas reinantes
Los monarcas reinantes en el siglo XVIII fueron Felipe V (1700-1746), Fernando VI (1746-1759), Carlos III (1759-1788) y Carlos IV (1788-1808). Estos monarcas no gobernaron directamente, sino que contaron con colaboradores. El primer Borbón, Felipe V, dejó el gobierno en manos de favoritos y más tarde en manos de una burocracia de funcionarios absolutistas y reformistas. Su hijo Fernando VI dejó igualmente actuar a estos funcionarios reformistas.
b) Los altos funcionarios
Estos altos funcionarios, denominados secretarios de despacho y posteriormente ministros, procedían, generalmente, de la baja nobleza y dependían totalmente del favor del monarca, por lo que sus actuaciones se sometían a los deseos del rey. Las reformas que promovieron tuvieron como finalidad consolidar y fortalecer el poder absoluto de los reyes. De entre todos, sobresalió el Marqués de la Ensenada, ministro de Fernando VI, el político español más importante del siglo XVIII y promotor de la construcción del Canal de Castilla.
2.2. La reforma del gobierno y la administración del Estado
Fue el primer objetivo a conseguir, siguiendo un modelo de Estado centralizado y uniforme. Estas reformas políticas se pusieron en práctica durante los reinados de Felipe V y su hijo Fernando VI.
a) Creación de una nueva administración central (Gobierno central)
- El sistema tradicional de gobierno de los Austrias, basado en consejos, quedó relegado. Solo el Consejo de Castilla tuvo un papel importante y pasó a serlo de todo el reino, con funciones de Consejo de Estado.
- Los secretarios fueron ahora los funcionarios imprescindibles en el gobierno de los Borbones; eran técnicos con gran poder de decisión en un campo determinado. Las secretarías y los secretarios de despacho fueron los precedentes de los ministerios y los ministros.
- Las cinco secretarías principales fueron la de Estado, Guerra, Marina e Indias, Gracia y Justicia y Hacienda.
b) Hacia la reunificación y centralización de los reinos peninsulares
- Los reinos de la Corona de Aragón perdieron su autonomía. A medida que fueron siendo ocupados y reconquistados por el ejército borbónico, perdieron todos sus privilegios, como castigo por haberse rebelado contra su rey. La aplicación de nuevas leyes para cada uno de los reinos y territorios de la Corona de Aragón, denominadas Decretos de Nueva Planta, supuso la supresión de todas las instituciones y privilegios particulares de los reinos de Valencia, Aragón, Cataluña y Mallorca. En su lugar se impusieron las leyes, instituciones y cargos de Castilla. El castellano se impuso como lengua oficial. Se suprimieron las aduanas y puertos secos interiores. Se estableció un impuesto único, que debían pagar todos los estamentos sociales. Los antiguos virreinatos se transformaron en provincias, dirigidas por un Capitán General, con atribuciones militares, civiles y judiciales.
- Provincias exentas: Los únicos territorios que siguieron manteniendo sus privilegios, fueros e instituciones, quedando fuera de esta uniformidad administrativa, fueron Navarra y el País Vasco, como recompensa por haber apoyado al candidato Borbón en la Guerra de Sucesión.
- Los Decretos de Nueva Planta, aunque medidas represoras contra los territorios rebeldes, sirvieron muy bien a los objetivos unificadores y centralizadores de los Borbones.
c) Nueva administración territorial
Se dividió el país en provincias e intendencias, precedente de nuestra actual división provincial. Al frente de estas nuevas unidades administrativas podía haber tres tipos de autoridades:
- Los intendentes fueron la autoridad civil y económica; se encargaron de la recaudación de impuestos, el equipamiento militar y las obras públicas. Nombrados por el Secretario de Estado, al que informaban directamente de la situación de su provincia, sirvieron de enlace entre el poder central y las provincias. Se les consideró el antecedente de los gobernadores civiles.
- Los capitanes generales tuvieron la autoridad militar y se establecieron en aquellas áreas donde la defensa era esencial.
- Las Audiencias fueron los órganos judiciales.
d) Sometimiento de las Cortes
Unas solas Cortes representaron a todos los territorios de España, a excepción de Navarra. Cada una de las 36 ciudades con derecho a acudir a Cortes estuvo representada por dos procuradores. Apenas se convocaron en todo el siglo.
e) Reformas en el ejército y la armada
- Los famosos tercios fueron sustituidos por una nueva unidad de combate: el regimiento.
- Se buscó crear un ejército permanente para la defensa de España, potente y sometido directamente a la autoridad del rey y su gobierno.
- Este nuevo ejército se compuso de un triple reclutamiento: voluntarios, levas obligatorias de vagos y maleantes, y las quintas.
- Era imprescindible disponer de una armada poderosa para la defensa de la ruta de las Indias y los intereses españoles en el Mediterráneo.
- Durante el reinado de Carlos III, la construcción de buques recibió fuerte impulso.
2.3. Control sobre la Iglesia
Los Borbones aplicaron la política regalista iniciada por los Reyes Católicos.
a) Patronato universal
Los acuerdos con la Santa Sede permitieron a los monarcas españoles ejercer el derecho de patronato universal.
b) Expulsión de los jesuitas
Los jesuitas se opusieron intelectualmente a la Ilustración y a las iniciativas reformistas de los reyes y sus ministros; controlaban la educación secundaria y universitaria. Por su voto de obediencia directa al Papa, escapaban al control del Estado. Acusados de organizar los motines de 1766 (“Motín de Esquilache”), fueron expulsados de España y América en 1767.
c) Limitación del poder de la Inquisición
Se limitó el poder de la Inquisición. No destruyeron su capacidad de control social, pero paralizaron su actuación durante gran parte del siglo XVIII.
2.4. Intervención del Estado en la economía
Buscó mejorar el bienestar de los súbditos, pero sobre todo incrementar las finanzas públicas para atender los gastos militares, la burocracia y el mantenimiento de la corte. Para conseguirlo, reformaron la Hacienda, crearon manufacturas reales y construyeron obras públicas:
a) Nueva fiscalidad
- El Estado recuperó el cobro de impuestos arrendados a particulares.
- El Marqués de la Ensenada intentó crear en Castilla una única contribución sobre la renta para todos los estamentos, al igual que se había aplicado en los reinos de la Corona de Aragón.
- Previamente, encargó la realización de un catastro o censo en el que se recogían los habitantes de cada localidad de Castilla y las propiedades que cada uno tenía.
- Este intento de reforma fiscal en Castilla fracasó por la oposición de los grupos privilegiados.
- No obstante, al finalizar el reinado de Fernando VI, un reinado de paz exterior, la Hacienda pública había conseguido aumentar los ingresos y contaba con un elevado superávit.
b) Creación de manufacturas estatales
Grandes talleres dedicados a la fabricación de objetos de lujo destinados al rey y a la Corte; monopolios del Estado o de interés militar.
c) Construcción de obras públicas
- El Marqués de la Ensenada fue el gran promotor de las obras públicas.
- Su objetivo era mejorar la comunicación del interior con la periferia.
- Su proyecto fue crear una red de caminos carreteros que atravesarían los puertos de montaña y enlazarían con canales de navegación interior en las llanuras, permitiendo un mercado más integrado.
- Inició la construcción del Canal de Castilla y los caminos reales del Guadarrama y Reinosa.
3. La Práctica del Despotismo Ilustrado: Carlos III y las Obras Públicas (Ejemplo del Canal de Castilla)
La Práctica del Despotismo Ilustrado: Carlos III
a) El reinado de Carlos III
El reinado de Carlos III respondió al modelo de despotismo ilustrado: Su reinado supuso la aplicación en España de una manera de gobernar en la Europa de este tiempo, conocida como Despotismo Ilustrado, una mezcla de racionalidad y modernidad por un lado, y de inmovilismo y autoritarismo por otro. Se pretendió enriquecer el país y realizar cambios económicos, sin tocar el orden social ni el absolutismo político. Su lema fue “Todo para el pueblo pero sin el pueblo”.
b) La política reformista de Carlos III
- Reformas sociales: Se mantuvieron los privilegios de la nobleza y los derechos señoriales; se limitó el número de hidalgos y se declararon honestas todas las profesiones manuales y el comercio. El monarca premió con títulos nobiliarios a quienes se destacaron en la administración del reino.
- Reformas agrarias: Se impulsó la agricultura como eje del crecimiento económico y se vio necesario emprender una reforma agraria que permitiera el aumento de la producción y la productividad.
- Los diferentes planes y proyectos reformistas presentados por los políticos ilustrados buscaron un triple objetivo:
- Aumentar la producción agraria y crear un mercado interior libre de trabas institucionales para aumentar el beneficio de los agricultores.
- Fomentar la estabilidad social, creando un sector de propietarios rurales enriquecidos con los beneficios que darían apoyo al gobierno.
- Elevar los ingresos del Estado procedentes de la agricultura con nuevos impuestos sobre la compraventa de bienes agrícolas.
- Las soluciones que propusieron para conseguirlo fueron variadas, pero todas vieron necesario un cambio en la estructura de la propiedad de la tierra. Las tierras muertas deberían poder comprarse y venderse libremente (desamortizarse).
- No se tomó ninguna decisión; la estructura de la propiedad de la tierra no se modificó.
- Algunas de las medidas que se tomaron para mejorar el medio rural:
- Se liberalizó el comercio de cereales, esperando que esta medida incentivara la agricultura, pero solo benefició a los propietarios de las tierras, lo que provocó fuertes subidas de precios, crisis de subsistencia y motines populares.
- La subida del precio de los cereales redujo los intereses ganaderos de la Mesta.
- Los grandes propietarios prefirieron aumentar la superficie de cultivo y reducir los derechos de paso de los rebaños de la Mesta, que inició su declive.
- La repoblación de comarcas deshabitadas en los pasos de Sierra Morena permitió reducir el bandolerismo y crear nuevas poblaciones con el asentamiento de colonos españoles, alemanes y flamencos.
- La creación del Banco Nacional de San Carlos como medio de financiación de la deuda del Estado.
- Los diferentes planes y proyectos reformistas presentados por los políticos ilustrados buscaron un triple objetivo:
4. La Política Borbónica en América
4.1. El absolutismo borbónico en las colonias
El absolutismo borbónico buscó en las colonias americanas reforzar el poder del Estado para convertirlas en una fuente de riqueza e ingresos. Al igual que en los siglos anteriores, los Borbones pretendieron explotar los recursos coloniales para extraer sus riquezas y convertirlas en una fuente de ingresos. Sin embargo, como la situación económica de las colonias había cambiado, fue necesario explotarlas con más eficacia, protegerlas de los extranjeros y no permitir la libre iniciativa de los propios habitantes de los territorios coloniales. Todo ello propició una progresiva oposición de la población americana hacia la administración colonial española y la aparición de un incipiente nacionalismo hispanoamericano.
4.2. Medidas administrativas: Búsqueda de mayor control sobre recursos y población americana
a) División territorial
Se dividió América en unidades más pequeñas que permitieran un mayor control político y fiscal. Hubo cuatro virreinatos en lugar de los dos anteriores: el de Nueva España, el del Perú (que se redujo) y se crearon dos nuevos: el de Nueva Granada y el del Río de la Plata. Nuevas capitanías generales y audiencias se sumaron a las ya existentes.
b) Creación del puesto de intendente
Se creó un nuevo puesto, el de intendente para América, que sustituyó a los antiguos gobernadores, corregidores y alcaldes mayores. Los intendentes tuvieron amplias atribuciones: recaudaron impuestos, tomaron decisiones políticas y militares. A través de ellos, se pretendía reforzar el control de la Corona sobre las colonias. Estos cargos estuvieron en manos de españoles.
c) Control de cargos administrativos
Los principales cargos de la administración colonial estaban en manos de criollos, que los habían comprado a la Corona a lo largo del siglo XVII. Esta situación favorecía la autonomía de las colonias. Para evitarlo, se paralizó la venta de cargos administrativos y se enviaron funcionarios españoles para ocuparlos.
d) Revitalización de la emigración
Se revitalizó la emigración hacia América en la segunda mitad del siglo XVIII; los inmigrantes procedieron del norte de España.
e) Expulsión de los jesuitas
Con la expulsión de los jesuitas se debilitó la posición de la Iglesia en América y la Corona recuperó el control sobre importantes tierras.
4.3. Medidas comerciales
a) Objetivos comerciales
Buscaron revitalizar el comercio para hacer de América un mercado colonial para la metrópoli, centro exportador de materias primas e importador de productos industriales españoles. Fue necesario eliminar la competencia extranjera en la zona, acabar con la industria colonial y suprimir el monopolio de Sevilla y Cádiz, permitiendo intercambios de América con otros puertos peninsulares.
b) Liberalización del comercio
Poco a poco se liberalizó el comercio con América. En 1717 se trasladó la Casa de la Contratación de Sevilla a Cádiz. En 1765 se suprimió el monopolio de Cádiz, abriendo el comercio con América a nueve puertos españoles; en 1778 se amplió a trece puertos españoles y veinticuatro americanos.
c) Compañías comerciales monopolísticas
Se autorizó a compañías comerciales para que explotaran en régimen de monopolio algunas áreas y productos coloniales.
d) Lucha contra el contrabando
Se luchó contra la intromisión comercial y el contrabando de otros países, sobre todo Inglaterra, a quien se terminó quitando el monopolio del tráfico de esclavos y el navío de permiso adquiridos en el Tratado de Utrecht. Los navíos de registro sustituyeron a las flotas o convoyes, blanco frecuente de los ataques británicos.
4.4. Consecuencias de la política borbónica en las colonias: El descontento social
Esta nueva política, enfocada al beneficio de la metrópoli, aumentó el descontento de los criollos y, sobre todo, de los indígenas. En 1780-1781 se inició una revuelta en Perú dirigida por los criollos, pero pronto se convirtió en una rebelión indígena, dirigida por un indígena que adoptó el seudónimo de Túpac Amaru, tomado de un antepasado suyo. Todas estas revueltas fueron aplastadas por las autoridades coloniales.