La Crisis del Antiguo Régimen y el Origen del Estado Liberal
El liberalismo político
En el ámbito político, el liberalismo consideraba a los habitantes del Estado como un conjunto de ciudadanos libres e iguales ante la ley, y no como súbditos de un monarca. Sostenía que los Estados debían organizarse en un sistema parlamentario, poseer una Constitución que garantizase la división de poderes y la soberanía nacional, y en la que quedara reflejada la forma del Estado.
La Revolución Americana: El Nacimiento de una Nación
La Guerra de Independencia
Los primeros colonos ingleses se asentaron en la costa este de América del Norte. El territorio se organizaba en trece colonias, independientes entre sí, que gozaban de una gran prosperidad. La sociedad colonial no estaba organizada en estamentos; en su mayoría era población blanca, y una cuarta parte era población negra que trabajaba como mano de obra esclava en las colonias del sur. Los colonos no tenían representación en el Parlamento británico, ni se les permitía ocupar nuevas tierras, pero pagaban altos impuestos a la metrópoli. Una parte importante de la población comenzó a romper sus lazos sentimentales con el Reino Unido y se fue potenciando un sentimiento de rebeldía y unidad contra lo que consideraban abusos por parte del gobierno británico y del rey Jorge III. Esta situación de tensión entre las colonias y la metrópoli se intensificó a partir de 1767 con la negativa de estas a pagar las continuas subidas de impuestos y terminó estallando en 1773 con el Motín del Té en Boston. Los representantes de las trece colonias, en la Guerra de Independencia, organizaron entonces un ejército bajo la dirección del general y político George Washington. El 4 de julio de 1776, en el Congreso de Filadelfia, aprobaron la Declaración de Independencia, redactada por Thomas Jefferson. Aunque el Reino Unido dominó en un principio, la victoria final fue de los colonos, gracias al apoyo de Francia y, en menor medida, de España y los Países Bajos.
El proceso político: República federal y constitucional
La Declaración de Derechos de Virginia fue la más importante por su influencia en la Constitución de los Estados Unidos y en los futuros textos de derechos en Europa. Los representantes del nuevo Estado redactaron una Constitución que completaba dicha declaración. Las diferencias sociales y económicas entre las colonias hacían difícil la creación de un Estado unificado. Finalmente, Estados Unidos se organizó como una república federal de estados, donde cada uno conservaba su soberanía a cambio de ceder algunas competencias al gobierno federal. El proceso revolucionario americano, con sus textos legales y declaraciones de derechos, tuvo una influencia determinante en los liberales europeos.
La Revolución Francesa: El Fin del Absolutismo
La inexistencia de una base feudal en la organización social y política de las colonias norteamericanas facilitó la aceptación y puesta en práctica de las ideas liberales.
Las causas de la Revolución
Las estructuras del Antiguo Régimen en Francia entraron en una profunda crisis social, política y económica. A partir de 1789 se inició un proceso revolucionario que tuvo como objetivo poner fin al modelo absolutista de Luis XVI y a la sociedad estamental. Las principales causas fueron:
- La crisis social: Originada por el descontento de los grupos no privilegiados o Tercer Estado, puesto que estos carecían de derechos y, además, sobre ellos recaía la mayor carga de impuestos del Estado. Las clases bajas urbanas, artesanos y los campesinos se habían empobrecido por las crisis de subsistencia de las décadas anteriores.
- La difusión de las ideas liberales: Que revelaron las contradicciones entre un sistema antiguo y la nueva realidad social y económica.
- La crisis del Estado absolutista: Las estructuras judiciales y administrativas de la monarquía absoluta se mostraban cada vez más ineficaces. Para solucionar la situación de bancarrota, se recurrió a la subida continua de impuestos y a una reforma fiscal.
Las etapas del proceso revolucionario
Los Estados Generales y la Asamblea Nacional Constituyente
Los Estados Generales se reunieron en el Palacio de Versalles bajo la presidencia del rey. El Tercer Estado, compuesto básicamente por la burguesía, no aceptó el antiguo sistema de voto por estamento y propuso el voto individual. Junto con algunos nobles liberales y parte del bajo clero, se autoproclamaron Asamblea Nacional Constituyente. Ante la escasez de alimentos, estalló la revuelta popular el 14 de julio, cuando el pueblo de París tomó la prisión de la Bastilla, de gran importancia simbólica, ya que era la cárcel real y el símbolo del absolutismo.
Asamblea Nacional Constituyente (1789-1791)
Esta asamblea:
- Suprimió los privilegios feudales, como los derechos señoriales sobre los campesinos o la recaudación del diezmo.
- Inició la separación Iglesia-Estado.
- Proclamó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, que recogía los principios de libertad individual, de propiedad y de igualdad ante la ley.
- Aprobó una Constitución que reflejaba los principios de soberanía nacional con sufragio censitario. Como forma de Estado se estableció una monarquía constitucional.
Asamblea Legislativa (1791-1792)
Fue elegida una Asamblea Legislativa, aunque el rey tenía derecho de veto sobre las leyes aprobadas por la asamblea. Fuera de Francia, ante el temor de que la revolución se extendiera, las monarquías absolutistas de Prusia y Austria declararon la guerra a Francia. La guerra fue vista como una oportunidad para derrotar a los revolucionarios.
La Convención Nacional (1792-1795)
El ejército revolucionario francés derrotó al ejército prusiano. La Convención abolió la monarquía y proclamó la Primera República. Luis XVI fue juzgado y ejecutado en enero de 1793. La Convención contó con una mayoría de girondinos. La falta de apoyo popular y una nueva guerra declarada por una coalición de monarquías europeas fueron aprovechadas por los jacobinos, apoyados por los sans-culottes. Durante esta fase se aprobó una nueva Constitución más radical que la anterior, que reconocía el sufragio universal masculino, aunque no llegó a entrar en vigor. La situación de emergencia generada por la guerra contra la Francia revolucionaria provocó que un Comité de Salvación Pública asumiera el poder ejecutivo.
El Directorio (1795-1799)
La Convención finalizó con el golpe de Estado del 9 de Termidor, que dio paso a una fase moderada dirigida por los girondinos. Se aprobó una nueva Constitución que restableció el sufragio censitario, y el poder político pasó a manos de un Directorio.
La Europa Napoleónica
En 1799, el joven general Napoleón Bonaparte, que había adquirido un gran prestigio en el campo de batalla, aprovechó la situación para dar un golpe de Estado. Elaboró varios códigos de leyes, como el Código Civil, centralizó la estructura político-administrativa del Estado con la creación de la figura de los prefectos, y firmó un concordato con la Iglesia, con lo que se restablecía el culto católico y se ponía fin a los enfrentamientos religiosos. Napoleón formó un imperio anexionando territorios, donde se difundieron las ideas revolucionarias.
La Restauración y las Revoluciones Liberales
El Congreso de Viena (1815)
Tras el derrocamiento de Napoleón, las potencias europeas se reunieron con el objetivo de dejar atrás el liberalismo y el nacionalismo. Sus objetivos fueron:
- Restauración de las monarquías absolutistas.
- Establecimiento de nuevas fronteras.
- Regulación de una nueva política internacional.
- Se establecieron sistemas de alianzas, entre las que destacó la Santa Alianza.
Las Revoluciones Liberales
Se produjo en Europa una serie de levantamientos revolucionarios dirigidos por la burguesía con la intención de derrocar el absolutismo para instaurar gobiernos liberales.
Las revoluciones de 1820
Consistieron en insurrecciones armadas de militares que contaban con el apoyo de la burguesía. Su objetivo era poner fin al absolutismo y establecer monarquías de carácter liberal y constituciones moderadas. El ciclo revolucionario de 1820 se desarrolló en la Europa mediterránea. Se inició en España contra la monarquía absoluta de Fernando VII. En Grecia, en 1822, tuvo lugar una insurrección nacionalista que reclamaba la independencia del Imperio otomano, que finalizó con la independencia de Grecia en 1829.
Las revoluciones de 1830
Se produjo un segundo ciclo revolucionario protagonizado por la burguesía, que expresó su descontento en un contexto de crisis social. Hubo varias revueltas, como la revuelta francesa, que se extendió por otros países europeos como Polonia, Prusia, Suiza y el norte de Italia. Únicamente la revuelta nacionalista en Bélgica fue un éxito y supuso su independencia de los Países Bajos. Se creó un nuevo Estado en el que se inauguró una monarquía constitucional y cuyo primer rey fue Leopoldo I.
La revolución de 1848: De la «Primavera de los Pueblos» al inicio de la cuestión social
Una grave crisis económica, las malas condiciones de vida del proletariado y el descontento por las insuficientes reformas políticas desembocaron en el ciclo revolucionario de 1848. En él, las reivindicaciones liberales de la alta burguesía se unieron con las demandas sociales de las clases medias y el proletariado. La ola revolucionaria de 1848 se extendió a otras ciudades europeas donde, a menudo, a las demandas del liberalismo se sumaron las reivindicaciones nacionalistas. En Berlín y otras ciudades alemanas, la revuelta liberal fue acompañada de la reivindicación de la unidad de los estados alemanes bajo la corona del rey de Prusia.
Balance de las revoluciones
La mayoría de los procesos revolucionarios acabó en fracaso. En general, se impuso el liberalismo moderado, pero la aristocracia conservaba su poder económico. Se forjó una élite liberal que pronto entró en conflicto con las clases medias y el proletariado, más afines a un liberalismo radical. Ante los problemas sociales surgidos de la Revolución Industrial, se instituyó el movimiento obrero como una nueva fuerza política.
Los Movimientos Nacionalistas del Siglo XIX
Origen y concepto ideológico
El sentimiento nacional no es un concepto permanente, sino que adopta distintos matices según las condiciones ideológicas, políticas y socioeconómicas de un lugar y un período histórico determinados. Hasta finales del siglo XVIII, el concepto de nación tenía un significado más geográfico que político. La dimensión política del término surgió con las ideas de la Ilustración, que defendía los derechos de la nación, entendida como el conjunto de ciudadanos libres. El nacionalismo inició su desarrollo como una corriente ideológica relacionada con las revoluciones liberales. Aunque al principio la ideología nacionalista estuvo solo presente en minorías políticamente activas, poco a poco se fue arraigando en los pueblos europeos. La irrupción del nacionalismo como ideología política dio lugar a movimientos de separación, como sucedió en los imperios plurinacionales austriaco u otomano, y a movimientos de unificación de naciones divididas en varios estados. También fue utilizado para homogeneizar cultural y lingüísticamente.
El proceso de unificación italiano: El Risorgimento
A comienzos del siglo XIX, la península itálica estaba dividida en varios estados. En el proceso de unificación italiano influyeron diversos factores:
- La voluntad de independencia de los territorios del norte, que pertenecían al Imperio austriaco y que ya habían protagonizado insurrecciones en la primera mitad del siglo.
- La influencia del Risorgimento, un movimiento cultural e intelectual que promovía la unidad.
- La influencia de las sociedades secretas.
- El interés en crear un Estado liberal y unitario que permitiera eliminar fronteras y ampliar mercados.
El proceso de unificación italiano se llevó a cabo mediante la acción militar y la diplomacia. Estuvo dirigido por el reino de Piamonte-Cerdeña, que gozaba de un importante desarrollo industrial y económico, y estaba gobernado por una monarquía constitucional cuyo rey era Víctor Manuel II. El proceso se inició en 1859, cuando el conde de Cavour consiguió el apoyo de Napoleón III para luchar contra el Imperio austriaco y conquistar la Lombardía. Aunque no logró el Véneto, en marzo de 1861, el parlamento de Piamonte proclamó a Víctor Manuel II como rey de Italia. En 1866 se incorporó el Véneto y en 1870 el territorio que quedaba de los Estados Pontificios, cuya capital, Roma, se convirtió en la de la nueva Italia unificada.
El proceso de unificación alemana
En 1815, tras el Congreso de Viena y la desaparición del Sacro Imperio Romano Germánico, se creó la Confederación Germánica. En el proceso de unificación alemán influyeron diversos factores:
- La influencia del Romanticismo y del nacionalismo conservador.
- La influencia del liberalismo, que había protagonizado un intento de unificación previo.
La unificación alemana también se llevó a cabo tanto por la vía militar como por la diplomática. El gran artífice del proceso fue el canciller prusiano Otto von Bismarck. La unificación alemana se produjo entre 1862 y 1871 en tres fases que tuvieron como marco otros tantos conflictos bélicos. En 1864, Prusia y Austria se aliaron contra Dinamarca y conquistaron los ducados de Schleswig y Holstein. La falta de acuerdo entre Prusia y Austria por la administración de estos territorios provocó una guerra entre ambas, que culminó con la creación de la Confederación Alemana del Norte, de la que Austria quedó excluida. El tercer conflicto se produjo entre Prusia y Francia. Este enfrentamiento tuvo la novedad de ser presentado como una guerra nacional de los alemanes contra Francia. El conflicto acabó con la derrota francesa, lo que dio lugar a una fuerte reacción patriota. También se reconoció a Guillermo I de Prusia como emperador, proclamándose así el Segundo Imperio Alemán (II Reich). El nuevo Estado alemán estuvo dirigido por Bismarck, que desarrolló una política basada en el nacionalismo conservador y en un poder autoritario.
Las nuevas naciones de los Balcanes
La península balcánica continuaba en manos del Imperio otomano. En este territorio se mezclaban varias naciones y culturas. El Imperio otomano perdió muchos de esos territorios: Grecia era independiente desde 1830; Rumanía, Serbia y Montenegro alcanzaron la independencia en 1878. Ese mismo año, Bosnia y Herzegovina fue ocupada por el Imperio austrohúngaro, Bulgaria se convirtió en un principado autónomo y, finalmente, Albania se declaró independiente en 1912.
Glosario de Términos Clave
- Constitución
- Conjunto de reglas fundamentales por las que se rige un Estado y fuente primaria del ordenamiento jurídico.
- Liberalismo político
- Corriente ideológica que nace con la Ilustración y defiende el derecho de todas las personas a la libertad.
- Monarquía constitucional
- Monarquía en la que el poder del rey está limitado por el parlamento.
- Monopolio comercial
- Concesión otorgada por la autoridad a una empresa para el ejercicio exclusivo del tráfico comercial de un puerto o un territorio.
- Nacionalismo
- Movimiento político que reclama el derecho a constituir un Estado-nación.
- Revolución
- Cambio en la estructura política, económica o social que supone una transformación rápida y radical.
- Soberanía nacional
- Principio según el cual la fuente de poder de un Estado reside en el conjunto de los ciudadanos libres de una nación.
- Sufragio universal
- Tipo de votación en el que todos los ciudadanos pueden votar.
