Conceptos Fundamentales: Del Antiguo Régimen a la Era Contemporánea
Antiguo Régimen
El Antiguo Régimen es el sistema político, económico y social predominante en el mundo antes de las revoluciones liberales iniciadas a finales del siglo XVIII. Se caracteriza por una monarquía absoluta, cuyo poder, según la doctrina de la época, emanaba de Dios; una economía de base agraria y señorial; y una sociedad estamental donde la nobleza y el clero ostentaban privilegios, como la propiedad de la mayor parte de la tierra. El término fue acuñado por los revolucionarios franceses con una connotación peyorativa.
Openfield
El openfield o «campo abierto» es un sistema de explotación agrícola característico del Antiguo Régimen, especialmente en el sur y este de Europa. Se define por grandes extensiones de campos abiertos, sin cercados, dedicados a una agricultura extensiva de baja productividad y, a menudo, de propiedad comunal. Su transformación fue un elemento clave para la posterior Revolución Industrial del siglo XVIII, que a su vez provocó un cambio de era.
Bocage
El bocage o «campo cerrado» es un sistema de explotación agrícola desarrollado durante el Antiguo Régimen en la Europa atlántica y del norte. Se caracteriza por parcelas cercadas (con setos o muros), donde se practica una agricultura intensiva, la propiedad es privada y los cultivos son más diversificados. Este modelo es de gran importancia porque en él surgieron innovaciones tecnológicas que facilitaron el inicio de la Revolución Industrial y la llegada de la Edad Contemporánea.
Privilegio
Etimológicamente, privilegio significa «ley privada». Es el conjunto de derechos y exenciones de los que gozaban la nobleza y el clero en la Edad Moderna europea. Conllevaba varias ventajas, como el cobro de impuestos o impartir justicia, entre otros. Este concepto se encuadra en un sistema estamental preliberal donde los individuos no eran iguales ante la ley, existiendo una profunda desigualdad jurídica.
Absolutismo
El absolutismo es la forma de gobierno predominante en Europa durante la Edad Moderna, extendida a sus colonias en América y Asia a través del imperialismo. Se caracteriza por una concentración de poder en manos del monarca, quien lleva a cabo una política personalista y autoritaria, aunque con ciertos límites físicos, administrativos e institucionales, especialmente en los estados grandes. A lo largo de la Edad Media, los reyes fueron asumiendo más poder, y a finales de la Edad Moderna surgieron nuevas limitaciones que dieron paso a la monarquía parlamentaria liberal.
Despotismo Ilustrado
El despotismo ilustrado es una forma de gobierno de la Europa del siglo XVIII. Se caracteriza por la implementación de una serie de reformas que pretendían solucionar los problemas estructurales del Antiguo Régimen. Así, junto al reforzamiento del Estado, centralizando y profesionalizando la administración, se buscaba mejorar las condiciones de vida del pueblo (el tercer estado) a través de la economía y la educación, siguiendo los principios de la Ilustración. Este paternalismo político se resume en el lema: «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo».
Ilustración
La Ilustración es un movimiento ideológico que apareció en Inglaterra a finales del siglo XVII y se extendió por Europa durante el siglo XVIII, alcanzando gran importancia en Francia. Se caracteriza por el uso de la razón como herramienta para la crítica del Antiguo Régimen y por la defensa de la libertad como medio para alcanzar la felicidad. Entre sus pensadores destacan John Locke, Montesquieu, Voltaire o Jean-Jacques Rousseau. Su influencia fue decisiva durante toda la Época Contemporánea, impulsando las revoluciones liberales.
Separación de Poderes
La separación de poderes es una forma de organización política que caracteriza a la Época Contemporánea. Aunque sus antecedentes se encuentran en Inglaterra, fue el pensador ilustrado francés Montesquieu quien desarrolló este concepto en su obra de 1748, El espíritu de las leyes. Se basa en la división de las tres facultades que eran propias del rey absolutista: el poder legislativo (que elabora las leyes), el poder ejecutivo (que las hace cumplir) y el poder judicial (que juzga su incumplimiento). Los tres poderes son independientes y se controlan mutuamente. De este modo, se rompe con la concentración de poder característica del absolutismo y se sientan las bases del nuevo régimen que nace con las revoluciones liberales.
Revolución Industrial
La Revolución Industrial es un proceso de cambios rápidos en las estructuras económicas que tuvo lugar en la segunda mitad del siglo XVIII en Inglaterra. Su primera etapa se caracteriza por el uso del carbón como fuente de energía, la máquina de vapor y la fábrica como nuevo modelo de producción, siendo la industria textil la pionera. Constituye el pilar económico del mundo contemporáneo, provocando una revolución social con el nacimiento de la sociedad de clases y una revolución política que sentó las bases de la democracia liberal.
Siderurgia
La siderurgia es la técnica y la industria dedicadas a trabajar el mineral de hierro para obtener hierro y acero. Aunque sus orígenes se remontan a Anatolia en el tercer milenio a. C., consiguió un desarrollo sin precedentes durante la Primera Revolución Industrial, iniciada en Inglaterra en la segunda mitad del siglo XVIII. Fue la segunda industria en importancia tras la textil durante esta primera fase y sentó las bases para el posterior desarrollo del sector metalúrgico.
Metalurgia
La metalurgia es la técnica e industria que transforma el hierro obtenido de la siderurgia para fabricar maquinaria y otros productos metálicos. La metalurgia se convirtió en uno de los sectores más importantes durante la Revolución Industrial, fabricando elementos clave como raíles y locomotoras, que fueron fundamentales para conectar las minas con los centros industriales, y estos a su vez con las ciudades.