La Configuración de la España Moderna: De los Austrias a la Constitución de 1978

Comparativa de los Imperios de Carlos I y Felipe II y sus Conflictos

PREGUNTA 6. Compara los imperios territoriales de Carlos I y el de Felipe II, y explica los diferentes problemas que acarrearon.

El Imperio Universal de Carlos I (1516-1556)

Carlos I, hijo de Juana la Loca y de Felipe el Hermoso, recibió una herencia territorial inmensa, que se constituyó como un “Imperio Universal”. Su mantenimiento y esplendor fue el gran objetivo de su paso por el poder.

Herencia Territorial de Carlos I

  • De los Reyes Católicos (abuelos maternos): La Corona de Castilla (con Navarra y las posesiones americanas) y la Corona de Aragón (Aragón, Cataluña, Valencia, Cerdeña, Sicilia y el reino de Nápoles).
  • De María de Borgoña (abuela paterna): Los Países Bajos y el Franco Condado.
  • De Maximiliano I (abuelo paterno): Los territorios patrimoniales de Austria, que además permitieron su candidatura a la cabeza del Sacro Imperio Romano Germánico.

Sus dos grandes objetivos fueron conservar intacta dicha herencia y la defensa del catolicismo frente a las nuevas interpretaciones del cristianismo (protestantismo).

Conflictos Internacionales de Carlos I

Podemos clasificar sus conflictos internacionales de la siguiente manera:

  • Guerras con Francia (1521 – 1544): La rivalidad con la otra gran potencia europea, rodeada por territorios controlados por Carlos I, fue constante. El emperador salió victorioso e incluso incorporó el Milanesado a sus posesiones.
  • Guerras contra los turcos: En consonancia con el objetivo de batallar contra el islam que representaban los otomanos, el emperador entabló luchas con desigual resultado en el Mar Mediterráneo (victoria en Túnez en 1535 y derrota en Argel en 1541).
  • Lucha contra los príncipes alemanes protestantes: Tras la difusión de las ideas de Martín Lutero, Alemania se convirtió en el principal escenario de conflicto entre católicos y protestantes. El emperador defendió la ortodoxia católica frente a los protestantes del interior del Imperio y obtuvo la victoria en Mühlberg (1547), pero la Paz de Augsburgo (1555) significó el reconocimiento de la existencia de dos religiones dentro del Imperio por parte de Carlos I.

La Monarquía Hispánica de Felipe II (1556-1598)

En 1556, Carlos I abdicó, se retiró al monasterio de Yuste y otorgó la mayor parte de su herencia a Felipe II, dejando a su hermano Fernando las posesiones de Austria y, con ellas, los derechos a aspirar a la corona imperial alemana. De esta manera, el “Imperio Universal” dio paso a la “Monarquía Hispánica” de Felipe II.

Conflictos y Logros de Felipe II

  • Hegemonía frente a Francia: Heredó los enfrentamientos con Francia (1556-1559) donde se produjeron las victorias de San Quintín y Gravelinas, que desembocaron en la Paz de Cateau-Cambresis (1559). Esta paz consagró la hegemonía de la corona española en Europa y puso fin a las aspiraciones francesas sobre Italia. Felipe II no volvería a participar en los asuntos franceses hasta la década de los noventa, cuando se produjeron las guerras de religión en el país galo.
  • Amenaza Otomana y Berberisca: La piratería de turcos y berberiscos era una amenaza para las costas de Aragón y para las comunicaciones con Nápoles y Sicilia, sobre todo tras la toma de Constantinopla en 1453 y el apoderamiento de Chipre y Túnez. Felipe II, Venecia y el Papa Pío V formaron una alianza, la Santa Liga, y reunieron una flota al mando de Juan de Austria, que salió victoriosa frente a los turcos en Lepanto (1571), asegurando la paz en el Mediterráneo occidental.
  • Anexión de Portugal (1580): Tras la muerte sin descendencia del rey portugués Sebastián, Felipe II hizo valer sus derechos dinásticos como hijo y nieto de princesas portuguesas a partir de 1580 y consiguió la Corona de Portugal y sus posesiones ultramarinas, no sin dificultades ante el rechazo de buena parte de la nobleza portuguesa.
  • Conflicto con los Países Bajos: El conflicto más importante, a largo plazo, fue el de los Países Bajos, provocado por el establecimiento de nuevos impuestos (problema económico), el surgimiento de un sentimiento nacionalista (problema político) y la extensión del protestantismo (problema religioso). El control fue impuesto de manera violenta. En 1598, Felipe II cedió todos los derechos a su hija Isabel Clara Eugenia, pero el conflicto continuó con los rebeldes holandeses, apoyados por las potencias protestantes europeas, sobre todo Inglaterra.
  • Rivalidad con Inglaterra: Las relaciones con Inglaterra no eran cordiales debido a la rivalidad económica (comercio americano) y a las diferencias religiosas (catolicismo contra protestantismo). Después de la muerte de la católica María Tudor (tía y esposa de Felipe II), subió al trono de Inglaterra Isabel I, anglicana y medio hermana de María Tudor (tenían el mismo padre, Enrique VIII), quien persiguió a los católicos al recibir el trono. Por todo lo mencionado, Felipe II preparó una potente flota, la Grande y Felicísima Armada (denominada sarcásticamente la Armada Invencible por los ingleses), para apoyar el desembarco en suelo inglés del ejército procedente de Flandes. Fue derrotada en 1588 y destrozada por los temporales.

Los Decretos de Nueva Planta: Centralización Borbónica

PREGUNTA 7. Define qué fueron los Decretos de Nueva Planta.

Siguiendo el modelo centralista francés, el nuevo Estado borbónico procedió a la uniformización político-institucional del Estado y al fortalecimiento del poder real, concebido como absoluto e ilimitado. El instrumento fundamental de esa política fueron los llamados Decretos de Nueva Planta de Felipe V, símbolo del centralismo borbónico.

Estos decretos supusieron una serie de reformas que reorganizaron el sistema político-administrativo en un sentido centralizador, sentando las bases del estado español (creación de Secretarías de Estado y de Despacho, supresión de las Cortes excepto las de Castilla que pasaron a ser testimoniales, creación de intendencias, reformas en América y en Hacienda y cambios en las relaciones Iglesia-Estado).

Conforme al desarrollo de los acontecimientos militares se produjeron los avances administrativos de estos decretos. Así, en 1707 se suprimen los fueros de Aragón y Valencia, en 1715 los de Mallorca y en 1716 los de Cataluña.

Consecuencias de los Decretos de Nueva Planta

En definitiva, los Decretos de Nueva Planta supusieron:

  • La unificación jurídica e institucional de la monarquía y la extensión del derecho e instituciones de Castilla a todo el estado.
  • La supresión, como castigo por su apoyo al candidato austríaco en la Guerra de Sucesión, de los fueros e instituciones particulares de los territorios de la Corona de Aragón y luego los de Cataluña.
  • Solo los territorios vascos y navarros conservaron sus fueros como recompensa a su fidelidad al bando borbónico durante la guerra.

La Guerra de la Independencia (1808-1814)

PREGUNTA 8. Describe la Guerra de la Independencia: sus causas, la composición de los bandos en conflicto y el desarrollo de los acontecimientos.

La Guerra de la Independencia es el conflicto que se produce a partir de la invasión de las fuerzas francesas de España y se desarrolla entre 1808 y 1814. Coincide con el período histórico conocido como la Crisis del Antiguo Régimen (1788-1833), que se caracteriza por el enfrentamiento constante de dos ideologías: absolutismo y liberalismo.

Se inicia con la invasión napoleónica, trastocando las bases económicas y sociales del viejo sistema y precipitando un cambio político (influenciado por las ideas de la Revolución Francesa) que culminará en el liberalismo político identificado con las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812.

Causas y Antecedentes

Los antecedentes parten de la situación marcada por la firma, entre España y Francia, del Tratado de Fontainebleau (1807) que autorizaba a los ejércitos franceses a atravesar la Península con el objetivo de invadir Portugal. Los franceses, en su paso, ocuparon plazas estratégicas, generando el descontento popular contra los gobernantes.

Este hecho fue aprovechado por Fernando VII para que con el Motín de Aranjuez (1808) su padre, Carlos IV, abdicase en él. Napoleón, observante de la debilidad de la Corona, convocó a ambos en Bayona (Abdicaciones de Bayona) y les obligó a renunciar al trono a favor de la familia Bonaparte, nombrando a su hermano, José I, rey de España. Como consecuencia, el Dos de Mayo de 1808, estalló en Madrid un levantamiento popular, en contra de la invasión francesa, que fue duramente reprimido.

El levantamiento se fue extendiendo por gran parte de España y se organizó desde abajo, desde el pueblo, con las Juntas Locales y Provinciales. Una Junta Suprema Central pretendía coordinar la lucha contra los franceses y asumir la autoridad, ante el vacío de poder generado por las abdicaciones y la guerra, hasta el retorno de Fernando VII.

Composición de los Bandos en Conflicto

La Guerra de la Independencia tuvo una dimensión de guerra civil.

Afrancesados

Parte de la población aceptó el reinado de José I, formando el bando de los afrancesados, que provenían del Despotismo Ilustrado y creían que Bonaparte podía traer la modernización del país. Tenían en común el apoyo a José I, aunque los motivos de esta adhesión variaban desde el interés por mantener su posición social hasta la creencia de que la modernización de España dependía de la adopción de las ideas napoleónicas. Cuando la guerra acabó, Fernando VII los reprimió duramente.

Patriotas

La mayoría de la población conformó el grupo de los patriotas, con una heterogénea composición ideológica:

  • Absolutistas: Un sector cercano al absolutismo (nobleza y clero) que eran defensores de la monarquía borbónica y del viejo orden, sin reformas.
  • Reformistas Moderados: Una minoría liberal de origen burgués. Pensaban que la guerra propiciaría cambios para modernizar España. Defendían el regreso del rey, pues creían que significaría el desarrollo de un programa de reformas dentro del Antiguo Régimen.
  • Liberales: Deseaban un cambio profundo que permitiese acabar con el absolutismo y esperaban que Fernando VII fuese un nuevo rey constitucional.

El resto de la población, sin ideología definida, aunque de mentalidad conservadora, apoyó la lucha contra el francés. El conflicto también tuvo una dimensión internacional, pues el ejército inglés desembarcó en la Península para ayudar a los portugueses y, desde allí, aliado con el ejército español, hizo retroceder a los franceses.

Desarrollo de los Acontecimientos (Fases de la Guerra)

  1. Primera Fase (Hasta noviembre de 1808): El levantamiento del Dos de Mayo se propaga por diversas ciudades (Zaragoza, Girona…) que fueron sitiadas y se resistieron heroicamente. Éxitos de la resistencia española, como la victoria en la Batalla de Bailén, frenaron la ocupación francesa de Andalucía. José I abandonó Madrid y las tropas francesas se replegaron al norte.
  2. Segunda Fase (Noviembre de 1808 a enero de 1812): La presencia francesa en España es hegemónica. Napoleón decidió venir con un gran ejército de 150.000 soldados. Tras la toma de Zaragoza, Gerona y Madrid, los franceses ocuparon toda España salvo Cádiz y Alicante. Restablecieron a José I en Madrid. La resistencia española se vio reforzada por la ayuda inglesa al mando del general Wellington, al tiempo que surgía la guerrilla como forma de hostigamiento continuado al ejército enemigo, aunque no conllevase ocupación territorial.
  3. Tercera Fase (1812 al final de la guerra): El dominio francés se debilita. Napoleón retiró su ejército para reforzar la campaña de Rusia, mientras que las tropas españolas y angloportuguesas contraatacaron venciendo a un ejército en retirada: Arapiles y Madrid en 1812, Vitoria y San Marcial en 1813.

A finales de 1813, Napoleón, al borde de la derrota en Europa, firmó con Fernando VII el Tratado de Valençay, que supuso el final de la ocupación francesa y el reconocimiento de este como rey de España.

Características Esenciales de la Constitución de 1812

PREGUNTA 9. Comenta las características esenciales de la Constitución de 1812.

Contexto y Elaboración de las Cortes de Cádiz

La Constitución de 1812 se enmarca dentro de la etapa histórica conocida como la Crisis del Antiguo Régimen (1788-1833), periodo en el que las ideas liberales de la Revolución Francesa, extendidas por Napoleón por toda Europa, España incluida, pusieron fin al viejo orden absolutista.

Durante la Guerra de la Independencia (1808-1814), en la zona no ocupada, se combatió y se intentó afianzar las bases para la modernización del país, terminar con el Antiguo Régimen y sentar los principios del liberalismo político, económico y social con la elaboración de la Constitución de 1812.

Tras el fracaso de la Junta Suprema Central, se realizó una convocatoria a Cortes por parte del Consejo de Regencia en Cádiz, única ciudad que resistía al asedio francés con la ayuda de Gran Bretaña. Los liberales consiguieron que la convocatoria no se realizara por estamentos como en el Antiguo Régimen, sino como Asamblea única, en la que a cada diputado le correspondía un voto, sin estamentos.

El proceso de elección y reunión de diputados se realizó mediante el voto de varones mayores de 25 años. Fue difícil reunirlos por la situación de guerra, por lo que fueron sustituidos por ciudadanos gaditanos de ideología liberal, representados por la incipiente clase media urbana o servidores del estado (militares, magistrados, funcionarios), de profesiones liberales o de actividades mercantiles. Casi todos eran burgueses liberales. También había aristócratas y eclesiásticos, sobre todo estos últimos. Faltaban en las Cortes representantes de los grupos sociales más populares.

Obra Legislativa y Constitucional

La labor de las Cortes se puede clasificar en dos apartados: la obra legislativa y la Constitución de 1812.

Obra Legislativa

La Obra Legislativa tenía como objetivo acabar con el Antiguo Régimen e instaurar un sistema liberal en lo político y económico. En este contexto destaca la abolición del régimen señorial, de los gremios, de la Mesta y de la Inquisición. Decretó también una desamortización de bienes de los afrancesados y de los monasterios destruidos por la guerra.

Características de la Constitución de 1812 (La Pepa)

La obra más destacada fue la Constitución de 1812, primera Constitución española y resultado del compromiso entre liberales y absolutistas, aunque tiene más en cuenta los principios liberales. Tras año y medio de redacción y debate, fue aprobada el 19 de marzo de 1812. Es muy extensa y meticulosa, consta de 10 títulos y 384 artículos. Sus características son:

  1. Soberanía Nacional: Concepto jurídico que significa que el poder reside en el pueblo, el cual lo ejerce a través de los órganos que lo representan en las Cortes (el Parlamento).
  2. Amplia Declaración de Derechos Fundamentales del Individuo: Incluye la igualdad jurídica y fiscal con un mismo código civil y penal; la inviolabilidad de domicilio; la libertad de pensamiento, opinión e imprenta; el derecho a la educación y propiedad; la garantía penal y procesal; y la abolición de la tortura.
  3. Confesionalidad del Estado: La religión oficial es la católica.
  4. Estructura del Estado: Monarquía moderada limitada con división de poderes, ya que los poderes de la monarquía se hallan limitados por una Constitución y además del Rey hay un Jefe de Gobierno y unas Cortes.
División de Poderes
  • Poder Ejecutivo: Reside en el rey, que nombra libremente a los secretarios que responden ante las Cortes, pero no pueden ser cesados por estas. No hay, por tanto, control parlamentario del Gobierno. El Rey tiene una serie de limitaciones: no puede disolver las Cortes, no puede abdicar, abandonar el país, contraer matrimonio, etc., sin permiso de las Cortes.
  • Poder Legislativo: Reside en las Cortes unicamerales, junto con el Rey, que puede promulgar, sancionar y vetar las leyes por dos veces en un período de dos años.
  • Poder Judicial: Reside en los Tribunales establecidos por la ley, reconociéndose el fuero eclesiástico y militar como jurisdicciones especiales.

La Constitución también determinaba el procedimiento para la elección de diputados mediante sufragio universal masculino indirecto para mayores de 25 años. Para ser elegido Diputado había que ser español y debía tributar a la Hacienda una cierta cantidad (elegibilidad restringida de género y dinero).

La Constitución estuvo vigente entre 1812 y 1814, aunque apenas fue efectiva por la situación de guerra; fue abolida por Fernando VII en 1814 e instaurada de nuevo entre 1820 y 1823 y, por un breve periodo, entre 1836 y 1837. A nivel nacional, ha sido, junto con la Constitución de 1931, modelo de varias constituciones liberales europeas, influyendo en las revoluciones liberales del siglo XIX.

Evolución Política del Reinado de Isabel II (1843-1868) y el Papel Militar

PREGUNTA 13. Resume la evolución política del reinado de Isabel II durante la etapa de la mayoría de edad (1843-1868) y explica el papel de los militares.

El reinado de Isabel II (1833-1868) supuso la definitiva implantación del sistema liberal en España, aunque de forma convulsa por la presión de los carlistas, al principio del reinado y, después, por un predominio del liberalismo moderado en detrimento de los progresistas por los caprichos de la reina. La Minoría de edad se divide en dos etapas: Regencia de María Cristina de Borbón (1833-1840) y la Regencia de Espartero (1840-1843). La tercera etapa se corresponde a la Mayoría de edad de la Reina Isabel II (1843-1868).

La derrota de Espartero supuso la declaración de Isabel II mayor de edad con 13 años, comenzando un nuevo periodo que se puede dividir en tres etapas en función del partido gobernante:

1. La Década Moderada (1843-1854)

En este periodo gobernaron los moderados liderados por el general Narváez y tomaron una serie de medidas que podemos calificar como conservadoras:

  • Constitución de 1845: Moderada, vigente hasta 1868. Sustituyó el principio de soberanía nacional por la soberanía compartida (Cortes y Rey). Amplió los poderes reales (libre nombramiento y cese de los ministros, veto legislativo).
  • Cortes Bicamerales: Senado de designación real y Congreso elegido por sufragio censitario muy restrictivo (limitado a solo el 1% de la población).
  • Confesionalidad: El Estado es confesional y se comprometía además a mantener el culto y al clero (Concordato con la Santa Sede).
  • Centralización Administrativa: Se reformó administrativamente el estado en un sentido centralista a partir de la división provincial. Desde Madrid se nombraba un gobernador civil para cada provincia y este a su vez nombraba y controlaba a los alcaldes de cada municipio.
  • Reforma Fiscal: Se eliminaron impuestos no rentables y se simplificó el número de estos, que pasaron a ser unos directos (sobre actividades y territorio) y otros indirectos (como los impopulares consumos).
  • Educación y Orden: La Ley Moyano estableció la enseñanza primaria pública gratuita y obligatoria. Se creó la Guardia Civil para el mantenimiento del orden (por el navarro Duque de Ahumada) y se suprimió la Milicia Nacional.

En 1854, el descontento y los casos de corrupción mermaron la popularidad de los moderados hasta el punto de que el general O’Donnell se pronunció contra el gobierno en Vicálvaro, y la reina se vio obligada a llamar a los progresistas al gobierno.

2. El Bienio Progresista (1854-1856)

Tras el pronunciamiento de O’Donnell, la reina llamó a Espartero, progresista, al gobierno. De este periodo hay que destacar una serie de medidas claramente económicas:

  • Desamortización de Madoz (1855): Extendió el proceso desamortizador a los bienes de los ayuntamientos (bienes de propios y comunes) y todos los que quedaban amortizados, siendo el objetivo obtener dinero para financiar la construcción del ferrocarril.
  • Ley de Ferrocarriles: Favoreció a las empresas que invirtiesen en el ferrocarril (extranjeras en su mayoría).
  • Leyes Financieras: La Ley de Banca ordenó el sistema financiero y la emisión de moneda, y la Ley de Sociedades de Crédito posibilitó la aparición de las Sociedades Anónimas.

3. La Etapa Final del Reinado (1856-1868)

Hasta 1868 se alternaron en el poder la Unión Liberal de O’Donnell y el partido moderado de Narváez. Se restableció la Constitución de 1845. Es interesante destacar de este periodo la política exterior activa con expediciones a Marruecos, Conchinchina, Perú y la reincorporación de Santo Domingo y México, aunque con pocas consecuencias reales.

El Papel de los Militares y la Crisis Final

El papel de los militares fue crucial durante todo el reinado de Isabel II. Los generales (como Narváez, O’Donnell y Espartero) no solo lideraban las facciones políticas (moderados, unionistas y progresistas, respectivamente), sino que también eran el instrumento principal para el cambio de gobierno a través del pronunciamiento, dada la escasa representatividad del sistema electoral y la intervención constante de la Corona.

De 1866 a 1868, la monarquía entró en una profunda crisis al tiempo que se producía una gran crisis financiera, industrial y de subsistencias. El gobierno aumentó la represión, conocida como “Retraimiento”, al tiempo que la oposición se organizaba. En 1866, progresistas, demócratas y republicanos firmaron el Pacto de Ostende, donde acordaron la expulsión de los Borbones y la democratización de la vida política.

En septiembre de 1868, la flota al mando del general Topete se sublevó en Cádiz. Un manifiesto al grito de “¡Viva España con honra!” recogió las razones que justificaban el levantamiento. Además de Topete, figuraban el general Prim y el general Serrano. El movimiento se extendió por todo el país y la reina optó por huir a Francia. Se le conoce como la Revolución de la Gloriosa e inaugura un nuevo periodo: el Sexenio Democrático (1868-1874).

Elaboración y Características de la Constitución de 1978

PREGUNTA 32. Explica el proceso de elaboración y aprobación de la Constitución de 1978, y sus características esenciales.

Proceso de Elaboración y Aprobación

Las Cortes elegidas el 15 de junio de 1977 pronto elaboraron una Constitución democrática. La Constitución de 1978 se redactó mediante un amplio consenso de los partidos. El borrador lo propusieron 7 diputados de todos los partidos que tenían representación en las Cortes (excepto minorías vascas).

La redacción de la Constitución inició la llamada política de consenso y la resolución de los problemas mediante la negociación y el acuerdo entre las fuerzas políticas. La constitución adoptó un carácter progresista.

La “ponencia constitucional” la formaron José Pedro Pérez Llorca, Miguel Herrero de Miñón y Gabriel Cisneros por UCD; Gregorio Peces-Barba por el PSOE; Jordi Solé Tura por el PCE-PSUC; Miguel Roca por Minoría Catalana y Manuel Fraga Iribarne por AP. El PNV quedó descolgado de la dinámica constitucional, al no recoger el reconocimiento pleno de los derechos forales que el partido defendía, por lo que recomendaron la abstención.

El texto constitucional se presentó el 6 de noviembre y se sometió a referéndum el 6 de diciembre de 1978, siendo ratificado por una amplia mayoría.

Características Esenciales de la Constitución de 1978

La Carta Magna de 1978 presenta las siguientes características:

  • Definición del Estado: Define España como un “Estado social y democrático de Derecho”.
  • Modelo Territorial: Establece la “indisoluble unidad de la nación española, integrada por “nacionalidades y regiones”, a las que garantiza el “derecho de autonomía”. Consagra un nuevo modelo del Estado no centralista: El Estado de las Autonomías.
  • Forma de Gobierno: Monarquía parlamentaria. La Corona, el Rey, es Jefe de Estado, tiene función representativa y funciones moderadoras. Es el jefe de las Fuerzas Armadas.
  • Clara División de Poderes:
    • Poder Legislativo: Lo encarnan las Cortes, formadas por dos Cámaras, el Senado y el Congreso de los Diputados, elegidas por sufragio universal.
    • Poder Ejecutivo: Descansa en el Gobierno, con un presidente elegido por los diputados (el Congreso) a través de una votación de investidura.
    • Poder Judicial: Debe ser independiente. Está formado por jueces y magistrados. El máximo órgano es el Tribunal Supremo. Se crea el Tribunal Constitucional para decidir sobre recursos de inconstitucionalidad, recursos de amparo y conflictos de competencia.
  • Derechos y Libertades: Establecimiento de una amplia declaración de derechos fundamentales y libertades civiles y políticas (incluye el derecho a huelga y sindicatos). Incluye la mayoría de edad a los 18 años, la libertad religiosa, la libertad de expresión, el derecho al trabajo y a una vivienda digna, o el derecho a una educación gratuita y de calidad.
  • Aspectos Sociales y Económicos: Se garantiza la propiedad privada y se reconoce la libertad de mercado, pero también la posibilidad de planificación económica y la intervención del Estado en la propiedad por motivos de interés público.
  • Otros Aspectos: Supresión de la pena de muerte. Se reconoce el divorcio cuyos términos serán regulados en una ley posterior. Se reconoce como lengua oficial el castellano, así como otras lenguas propias en las respectivas comunidades autónomas. El ejército debe quedar sometido al poder civil (Estado no confesional).

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