Resumen del régimen franquista


Carácterísticas: El general Franco, vencedor en la Guerra Civil, gobernará España como dictador hasta su muerte (1975).
El franquismo constituye un sistema político extraordinariamente duradero dentro del cual, pese a su apariencia monolítica, se produjo una indudable evolución, fruto del contexto mundial y de las transformaciones de la sociedad española. Nada más hacerse con la victoria, el régimen de Franco intentó eliminar la masonería de la “Anti-España” junto con todas las fuerzas modernizadoras del Siglo XIX y XX, convirtiéndose en un régimen antiliberal, antidemocrático y anticomunista, y estableciendo un nacionalismo a ultranza.

Bases sociales: El nacimiento del Estado franquista se vio respaldado por aquellos grupos que habían apoyado la sublevación militar: grandes propietarios rurales, sectores financieros, pequeños propietarios del interior peninsular o sectores de la burguésía provinciana. Las bases sociales de los primeros momentos se verán progresivamente ampliadas por los esfuerzos de la dictadura por ampliar su clientela. De esta manera la Falange y la Iglesia participaron en el intento de atraer a las clases medias. La primera medida fue la obligatoriedad de cursar “El espíritu Nacional”, la creación del Frente de Juventudes, la Sección Femenina o del aparato vertical del sindicato único y la segunda fue imponer sus normas morales (puritanismo) a la mayoría de la población.

Familias del Régimen: Franco no sustentó nunca su régimen en un solo grupo político o ideológico. El poder se manifestó siempre en tres vertientes: civil, militar y eclesiástica, que se denominaron las “familias” del régimen.

– A través de la Iglesia, el régimen se convirtió en un nacionalcatolicismo. La Iglesia impuso un puritanismo con un férreo control de las vidas privadas, de la cultura y la subordinación de la mujer al varón. Fue derogada toda la legislación laica anterior. A cambio de su apoyo, la Iglesia gozó de poder, privilegios económicos, controló el sistema educativo y se excluía cualquier otra religión. Asociaciones como el Opus Dei o Los Propagandistas de Acción Católica tuvieron un notable papel político. El Concilio Vaticano II supuso los primeros enfrentamientos con el régimen, una parte minoritaria de la Iglesia se enfrentó a partir de los años 60 al Dictador.

-La Falange fue otro de los grandes pilares como partido único y depositario de los Principios del Movimiento. Aunque fue muy influyente en los primeros años fue perdiendo poder y sus principios fascistas se convirtieron en una ciega lealtad al Caudillo. Al final se convirtió en un aparato burocrático que sólo conservaría algún poder en el Consejo Nacional del Movimiento (segunda cámara de legislación), y en el sindicalismo vertical.

-El Ejército fue siempre la columna vertebral del franquismo y nunca discutíó el poder de Franco. Tan sólo tuvo algunos problemas con algunos militares monárquicos (Aranda, Kindelán, Galarza). Franco elegía directamente a los generales. El Ejército, como garante del orden público, adquiere jurisdicción sobre los delitos políticos.  

1939-1959. Posguerra, Segunda Guerra Mundial, aislamiento y autarquía.
Al declararse la Segunda Guerra Mundial en Septiembre de 1939, España se declara neutral. Aunque España no estaba en condiciones de participar en nueva guerra, dada la afinidad con los países del Eje, se planteó la integración española en el conflicto. Franco mantuvo entrevistas con Hitler (1940) y con Mussolini (1941). El representante más claro del intervencionismo fue Serrano Suñer, Franco tampoco era contrario a la entrada en la guerra (Gibraltar y colonias francesas en África). Las compensaciones, especialmente económicas que Franco exigíó a las potencias del Eje hizo que no se concretara  la entrada de España. Así España pasó de neutral a no beligerante en 1941. Tropas españolas ocuparon Tánger y España mandó al frente ruso una división de voluntarios, para combatir al lado de Alemania, que se llamó División Azul.  En 1943 la guerra parecía favorable a los aliados y España volvíó a la neutralidad. El ministro de exteriores Gómez Jordana, enfrió las relaciones con Alemania retirando la División Azul.Una vez que acabó la guerra el franquismo quedó aislado, no fue admitido en la ONU y los aliados, siguiendo las recomendaciones de Postdam propusieron una caída del régimen por medios pacíficos. Este momento de incertidumbre lo aprovechó D. Juan (hijo de Alfonso XIII) para pedir la restauración monárquica a través del manifiesto de Lausana. En 1946 la ONU recomendaba a los países que retirasen los embajadores de España y se dio un boicot político y económico. El franquismo reacciónó aumentando la propaganda contra la conspiración internacional con el eslogan “judeo-masónico marxista” la lucha contra el comunismo.


El comienzo de la Guerra Fría cambió el papel de España, aunque no fue admitida en la OTAN, se reanudaban las relaciones diplomáticas y se admitíó a España en un organismo internacional como la FAO.

La Guerra Civil tuvo efectos demográficos evidentes, como el descenso de la población activa, y económicos, con la desarticulación del sistema productivo. La producción agraria e industrial era muy inferior a la etapa republicana y las infraestructuras estaban seriamente dañadas. En conclusión, la economía era incapaz de alimentar a la población. La política económica de los vencedores sustituyó el mercado libre por la filiación de precios por debajo de la oferta y la demanda, lo que implicó el desabastecimiento de productos básicos y la entrada del racionamiento.
Así aparecíó el mercado negro de productos al margen de la ley.
El régimen pretendíó la autosuficiencia económica, a través de la autarquía que tuvo dos ejes de actuación: la reglamentación de las relaciones económicas con el exterior, con el encarecimiento de los productos importados y el fomento industrial, se creó el INI, un conglomerado de empresas públicas, a veces sin condiciones favorables, con independencia de los costes (nacen empresas como SEAT, Iberia).

El régimen fue especialmente represivo en estos años. Siguió vigente la Ley de
Responsabilidades Políticas de 1939 y se añadió en 1940 la Ley de Represión del Comunismo y la Masonería. Cuando acaba la Guerra Civil más de 200 000 personas van a campos de concentración. A partir del año 40 se eliminan y pasan a las cárceles. Los presos no tienen ninguna garantía legal y hay más de 100 000 fusilados. En los años 40 cobró cierta importancia la guerrilla opositora a Franco, el maquis (más de 10.000 guerrilleros), protagonizada sobre todo por el PC. El hecho más notable fue la invasión (1944) del valle de Arán.

A partir de los años 50 se dan los primeros intentos de apertura. En 1955 España ingresó en la ONU y se producen dos hechos para constatar el final del aislamiento: la firma del Concordato con la Santa Sede y los acuerdos militares con los Estados Unidos, que entendían que Franco podía ser un valioso aliado en la Guerra Fría. En 1951 se remodeló el gobierno, en una combinación de falangistas y católicos y se introdujo un político que sería clave, Carrero Blanco. En 1957 entraron los primeros ministros del Opus (Navarro Rubio y Ullastres). Unido al proceso de descolonización, en 1956, Francia había aceptado la descolonización de Marruecos y España la ratificó. En 1957 hubo enfrentamientos en Ifni y España cedíó la zona sahariana de Tarfaya.



El franquismo desarrollo económico  y transformaciones sociales. El régimen se institucionaliza y en España se da un cierto desarrollo económico, para lo que se oficializa el denominado gobierno de los tecnócratas. Se daba mucha más importancia al progreso económico que a determinados principios políticos, aunque los tecnócratas nunca discutieron los principios represivos y antidemocráticos del franquismo. A los ministerios llegan miembros del Opus Dei (Laureano López Rodó, López Bravo). En 1962 se creó la figura del Vicepresidente del Gobierno, cargo que ocupó desde 1967 Luís Carrero Blanco. Alguna mínima apertura supone la nueva Ley de Prensa de 1966, en la que se elimina la censura previa, aunque el Estado podía inspeccionar y secuestrar lo que considerara oportuno. El régimen se institucionalizó definitivamente con la publicación de la Ley Orgánica del Estado, qué fue una especie de recapitulación del conjunto de Leyes Fundamentales, aunque es obvio que carecía de cualquier legitimación democrática. La única novedad fue la creación de los procuradores familiares en Cortes, elegidos directamente, con igual número por cada provincia y que tan sólo representaban una parte de las Cortes Orgánicas.
La ley fue sometida a referéndum y aprobada por una amplia mayoría de españoles/ España entró en una sociedad de consumo, que se generaliza en la segunda mitad de los años 60, descendía el porcentaje de presupuesto familiar dedicado a la alimentación frente a productos de consumo.

Socialmente, el hecho más relevante es la fuerte emigración.
Más de un millón de españoles emigraron a Europa en busca de trabajo. Además, más de cuatro millones  de personas cambiaron el campo por la ciudad. Del interior peninsular se desplazó la población a las regiones más dinámicas (Cataluña y el País Vasco). A la vez, España experimentó una transformación social, aumentando las clases medias. Esta nueva sociedad experimentó cambios de comportamiento social, como el significativo aumento de la educación de masas (Ley General de Educación de 1970), la llegada  de un mayor número de estudiantes a la universidad. La familia tiende a hacerse nuclear, con una nueva mentalidad en el terreno religioso y la mujer, empieza a incorporarse al mundo del trabajo.

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