Transformaciones Económicas y Sociales en España (1959-1973) y la Crisis Final del Franquismo

Transformaciones Económicas y Sociales en España (1959-1973)

Este periodo, denominado como Segundo Franquismo (1959-1975), se caracteriza por una nula evolución política (inmovilismo) pero con un cierto grado de desarrollo económico y de modificación de pautas y comportamientos sociales. En los sucesivos gobiernos franquistas dominan los llamados “tecnócratas”, procedentes del Opus Dei (fundamentalismo católico), los cuales, sin apartarse del Régimen, contribuyen a acabar con el estancamiento económico español.

Los años 60 se caracterizan por un rápido desarrollo económico, el cual se relaciona con las medidas liberalizadoras del “Plan de Estabilización”. Este plan, diseñado por el FMI (Fondo Monetario Internacional) y el Banco Mundial y llevado a cabo por los tecnócratas, tenía como objetivos acabar con la autarquía e incorporar España a la economía mundial. Entre sus medidas estuvieron:

  • Devaluar la peseta.
  • Reducir salarios (sector público y privado).
  • Controlar la inflación.
  • Aumentar los impuestos.
  • Reducir determinadas subvenciones (a empresas y productos de primera necesidad).

Bases del Crecimiento Económico («Milagro Español»)

Tres fueron las bases del crecimiento económico español (el llamado “milagro español”):

  1. Las inversiones extranjeras: Aprovechando el “Plan de Estabilización”, se invirtieron en España miles de millones de dólares debido al bajo coste y docilidad de la mano de obra española (sin derecho a huelga ni sindicatos libres).
  2. Las remesas de los emigrantes: Entre 2 y 4 millones de españoles salieron de forma legal e ilegal de las regiones más pobres de España con destino a Europa Occidental (Francia, Alemania, etcétera), estados que estaban en fase de crecimiento económico. Estos emigrantes no solían llevarse a su familia consigo, por lo que enviaban dinero a las mismas. Este dinero contribuyó a reactivar la economía del país y, de paso, a “eliminar” el paro existente en España.
  3. Los ingresos por turismo: A finales de los años 50, la mejora del nivel de vida de los europeos permitió el desarrollo de una corriente turística hacia el Mediterráneo. El número de turistas en España sufrió un aumento espectacular. Las divisas aportadas por la actividad turística contribuyeron a reactivar la economía española.

El Estado planificó el desarrollo económico mediante los “Planes de Desarrollo”, de carácter quinquenal y basados en la industria como motor del desarrollo económico español. También se crearon los llamados “Polos de Desarrollo”, los cuales se ubicaron en las zonas más atrasadas de España para intentar acabar con la diferencia entre las zonas más adelantadas con respecto a las menos. No alcanzaron los objetivos propuestos: el crecimiento económico español se debió más a la coyuntura económica internacional favorable que a la actividad del gobierno español.

Cambios Sociales

En este periodo se produjeron importantes cambios sociales, los más importantes fueron:

  • Un importante aumento demográfico debido al crecimiento vegetativo. Los nacidos en los 60 (baby-boom) constituyen la generación más numerosa de la Historia de España.
  • Un importante crecimiento de la población urbana debido a lo anterior, a lo que se une un fuerte éxodo rural.
  • El aumento de la migración exterior, hacia Europa fundamentalmente: Alemania, Suiza, Francia, etcétera (los canarios emigraron principalmente a Venezuela).
  • El “boom” turístico de los años 60, el desarrollo de los medios de comunicación y el conocimiento cada vez mayor del exterior (viajes y sobre todo emigración) fueron el detonante de un importante cambio de mentalidad de la población española: el Régimen se consideraba como algo anacrónico y se deseaba vivir como el resto de los europeos.

Todo ello coincidió con el debilitamiento de los tres pilares sobre los que se sostenía el Régimen:

  1. Falange: Ya no tenía capacidad para amedrentar ni aglutinar a la población.
  2. La Iglesia Católica: Se dividió en dos sectores: los que permanecían fieles al Franquismo y aquellos que creían que el Estado debía democratizarse (influidos por el Concilio Vaticano II).
  3. El Ejército: Dividido hacia fines de 1973, con sectores que abogaban por la democratización del país.

En estas condiciones, a medida que disminuía su apoyo social, el Régimen solo podía subsistir con el uso de la fuerza y la represión.

Causas de la Crisis Final del Franquismo (desde 1973)

Entre 1973 y 1975, el Régimen entra en crisis, recayendo las funciones efectivas de gobierno en Carrero Blanco, franquista profundo (miembro de “El Búnker”, el sector más inmovilista del Franquismo, frente al cual estaban los partidarios de unas reformas muy limitadas, los llamados “aperturistas”), el cual es nombrado presidente de gobierno (como preveía la LOE – Ley Orgánica del Estado) a principios de 1973. Su eliminación por ETA a finales del mismo año marca el principio del fin. En septiembre de 1975, se produce la condena internacional del Régimen por las últimas ejecuciones (hasta el Papa Pablo VI se pronunció a favor de la conmutación de la pena).

Aumento de la Oposición Política

Toman cada vez más fuerza e influencia la oposición pacífica al Régimen, a pesar del carácter ilegal y clandestino de la misma. La primera que surge es la “Assemblea de Catalunya” (1972) y plataformas similares en el resto de España dos años más tarde.

En 1974 surgen dos grandes plataformas de oposición:

  • Junta Democrática: Formada por el PCE (Partido Comunista de España), PEP, CCOO (Comisiones Obreras) y otros.
  • Plataforma de Convergencia Democrática: PSOE (Partido Socialista Obrero Español), democracia cristiana, etcétera.

Ambos grupos convergen en la llamada “Platajunta”, siendo sus principales reivindicaciones una ruptura pactada con el Régimen, iniciándose un periodo constituyente (redactar una constitución), amnistía, retorno de los exiliados y respeto a los derechos humanos.

Contexto Final

En estas condiciones, a medida que disminuía su apoyo social, el Régimen solo podía subsistir con el uso de la fuerza y la represión. A los problemas políticos se une la crisis económica de 1973 y la muerte del presidente de gobierno, Carrero Blanco. Por otro lado, la sociedad española había evolucionado de forma considerable: contactos frecuentes con el exterior, mayor nivel de consumo y mejora del nivel de vida, la enseñanza universitaria se multiplicó por diez, una sociedad urbana con nuevas formas de vida… la alejan del Franquismo de forma definitiva.

En resumen, al inicio de la crisis económica internacional causada por la crisis del petróleo (1973), España había reducido parcialmente su diferencia con el nivel de vida de Europa y los españoles vivían mejor, aunque cada vez se producía una mayor demanda de libertades por el conjunto de la población. Ello contribuyó a acelerar el fin del Régimen, lo cual se produjo a la muerte de Franco en noviembre de 1975.

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