El Antiguo Régimen: Estructura y Fin
El Antiguo Régimen fue un sistema económico, político, social y cultural que predominó en Europa entre los siglos XVI y XVIII, y que finalizó con las Revoluciones Francesa e Industrial. Sus características principales fueron:
Economía del Antiguo Régimen
- Demografía del Antiguo Régimen: Caracterizada por altas tasas de natalidad y mortalidad, lo que resultaba en un crecimiento vegetativo o natural muy escaso.
- Autoconsumo: Sistema económico predominante. La propiedad de la tierra se organizaba en señoríos, que podían ser de dos tipos:
- Territoriales: Aquellos en los que el señor era propietario de la tierra.
- Jurisdiccionales: En los que el señor no era propietario de la tierra, pero ejercía derechos de jurisdicción sobre ella y sus habitantes.
- Agricultura: Principal actividad económica y método de subsistencia.
- Comercio: Aunque limitado, fue ganando importancia. Se distinguían varios tipos:
- Interno: Desarrollado dentro de las fronteras de un mismo país.
- Externo: Llevado a cabo entre países, principalmente de productos manufacturados y materias primas.
- Gremios: Asociaciones de maestros artesanos que regulaban la producción y defendían sus intereses.
Sociedad del Antiguo Régimen
La sociedad del Antiguo Régimen estaba organizada en estamentos, grupos sociales cerrados a los que se pertenecía por nacimiento.
- Privilegiados: Exentos de impuestos y con acceso a cargos públicos y beneficios económicos. Incluían a la nobleza y al clero.
- No privilegiados: Carecían de privilegios y estaban obligados a pagar impuestos. Comprendían a campesinos, burgueses y marginados.
Gobierno del Antiguo Régimen
- Monarquía Absoluta: El rey concentraba los tres poderes (legislativo, ejecutivo y judicial), y su autoridad se consideraba de origen divino.
- Absolutismo Ilustrado: Forma de gobierno en la que monarcas absolutistas adoptaron algunos principios de la Ilustración, buscando el bienestar del pueblo sin renunciar a su poder. Su lema era: «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo».
La Revolución Francesa y el Pensamiento Ilustrado
La Revolución Francesa fue un proceso de cambios profundos que se inició en Francia y que marcó el inicio de la Edad Contemporánea en Europa, estableciendo un nuevo orden social y político. El Estado francés atravesaba una profunda crisis económica, lo que llevó a proponer una reforma fiscal que fue rechazada. La Revolución Francesa se desarrolló en diferentes fases:
Fases de la Revolución Francesa
- Fase Inicial (Asamblea Nacional): El 14 de julio de 1789 ocurrió la Toma de la Bastilla, protagonizada por diversos grupos de ciudadanos. Se creó una Asamblea Nacional compuesta por facciones como los jacobinos, girondinos y sans-culottes. Posteriormente, Luis XVI fue guillotinado.
- Fase Exaltada (La Convención): Se le denomina la fase de «El Terror» porque, tras la ejecución de Luis XVI, Robespierre y los jacobinos tomaron el poder, instaurando un periodo de represión.
- Fase Moderada (El Directorio): Robespierre fue guillotinado, y a esta fase se la conoce como fase Termidoriana. La Revolución Francesa finalizó con el golpe de Estado del 18 de Brumario protagonizado por Napoleón Bonaparte.
El Pensamiento Ilustrado
El Pensamiento Ilustrado fue un conjunto de ideas que, al cuestionar las bases del Antiguo Régimen, sentaron las bases para la Revolución Francesa y la Revolución Industrial. Sus principios generales fueron:
- La razón como principal instrumento para encontrar la verdad y explicar la realidad.
- La razón como vía para alcanzar la felicidad humana.
- La moral y la educación no deben estar bajo el control de la religión.
Principios Político-Económicos de la Ilustración
- Soberanía Nacional: Se opone a la concentración de poderes, afirmando que la soberanía reside en el pueblo, que la ejerce a través del voto. (Propuesta por Rousseau).
- División de Poderes: Los poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) deben estar separados en tres instituciones distintas. (Defendida por Locke y Montesquieu).
- Sociedad Civil: Crítica al control de la Iglesia sobre la sociedad y el pensamiento durante el Antiguo Régimen. (Defendida por Voltaire).
- Libertad Económica: Defensa de la libertad para emprender negocios sin necesidad de permisos reales o gremiales, en contraste con las restricciones del Antiguo Régimen.
La Ilustración fue clave para el advenimiento de la Edad Contemporánea.
El Reinado de Fernando VII y el Liberalismo en España
Tras la Guerra de la Independencia española, las Cortes se trasladaron a Madrid para preparar el regreso de Fernando VII. Sin embargo, el monarca abolió toda la obra legislativa de las Cortes de Cádiz y restauró el absolutismo. Durante el reinado de Fernando VII se distinguen varias etapas:
Etapas del Reinado de Fernando VII
- El Sexenio Absolutista (1814-1820): Durante esta etapa, Fernando VII abolió la obra de las Cortes de Cádiz, influenciado tanto por su voluntad como por el contexto de la Europa de la Restauración, donde triunfaba la Santa Alianza tras la derrota de Napoleón. Además, fue influenciado por el Manifiesto de los Persas, redactado por diputados realistas, que le aconsejaban ignorar la Constitución. Con la anulación de la obra legislativa de las Cortes de Cádiz, se suprimió la libertad de prensa y se restableció la Inquisición. También se devolvieron los privilegios a la Mesta y se repusieron los fueros (privilegios específicos de los que gozaban ciertas personas o territorios). Los liberales intentaron realizar pronunciamientos (golpes de Estado) bajo el influjo de sociedades secretas, lo que llevó a la persecución de muchos militares descontentos.
- El Trienio Liberal (1820-1823): En 1820, el pronunciamiento de militares destinados a América para detener la secesión, dirigido por Rafael del Riego, estableció un régimen liberal. Fernando VII, asustado por los acontecimientos, juró la Constitución de Cádiz, que volvió a ponerse en vigor. Con ello, los fueros fueron suprimidos, la Iglesia sufrió una gran represión y se suprimieron Órdenes Religiosas. Se produjo una división entre los liberales, distinguiéndose entre moderados y exaltados (o progresistas). Los absolutistas intentaron varios golpes de Estado. Como consecuencia, Fernando VII pidió ayuda a la Santa Alianza. Esta ayuda se concretó con la entrada en España de un cuerpo del ejército denominado los Cien Mil Hijos de San Luis, al mando del duque de Angulema, que repusieron a Fernando VII como rey absoluto. Tras ello, se invalidó la legislación anterior y la Constitución.
- La Década Absolutista (1823-1833): En este periodo, la persecución contra los liberales fue constante. Hubo un restablecimiento parcial del Antiguo Régimen, con la reposición de algunos fueros. La situación del país era precaria (endeudamiento, producción paralizada, una población hambrienta y extenuada por los impuestos), y el régimen absolutista de Fernando VII solo era apoyado por la nobleza y la Iglesia.
- La Cuestión Sucesoria: El nacimiento de Isabel.
Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812
La principal obra legislativa de las Cortes de Cádiz fue la elaboración de la Constitución española de 1812 (conocida como «La Pepa»), pero también tomaron otras decisiones que significaron el fin del Antiguo Régimen y el primer gran intento de liberalización económica y social en España. Destacan:
Reformas de las Cortes de Cádiz
- Libertad de Imprenta: Se permitía la creación de imprentas y la edición de libros sin necesidad de permiso previo.
- Abolición de los Señoríos Jurisdiccionales: Se suprimieron los señoríos jurisdiccionales (donde el señor ejercía derechos sobre el territorio sin ser propietario), manteniendo los señoríos territoriales (donde el señor era propietario de la tierra).
- Degradación de los Gremios: Se suprimieron estas asociaciones de maestros artesanos que controlaban la producción y el acceso a los oficios, buscando la libertad económica.
- Supresión de la Mesta: Se eliminó esta poderosa asociación de propietarios de grandes rebaños de ovejas (principalmente nobles), que gozaba de amplios privilegios y controlaba la trashumancia.
- Abolición de la Tortura: Se suprimió esta práctica en los procesos judiciales, en línea con los principios de un sistema de justicia que debía presumir la inocencia hasta que se demostrara lo contrario.
- Supresión de la Inquisición: Se eliminó este tribunal eclesiástico que juzgaba delitos religiosos, debido a las acusaciones de arbitrariedad y falsedad en sus procesos.
- Definición de España como Nación Única: Se estableció el concepto de España como una nación indivisible.
Principios Fundamentales de la Constitución de Cádiz
- Soberanía Nacional: Reside esencialmente en la Nación, entendida como la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios (España y América), a quienes pertenece el derecho de establecer sus leyes.
- Separación de Poderes: Se distinguen claramente el poder Legislativo (encargado de hacer las leyes), el poder Ejecutivo (encargado de ejecutarlas) y el poder Judicial (encargado de juzgar su cumplimiento).
- Derecho de Representación: La Nación está representada por unas Cortes cuyos diputados son elegidos por la población de forma igualitaria en ambos hemisferios.
- Derechos Fundamentales del Individuo: Se reconocen derechos como la libertad de expresión, libertad de prensa e imprenta, derecho a la integridad física, libertad personal, inviolabilidad del domicilio y garantías procesales y penales.
- No se reconocía la libertad de culto: Se imponía el catolicismo como religión oficial y única.
El Reinado de Isabel II: Desarrollo Básico
El reinado de Isabel II transcurrió de 1843 a 1868. Se inició con la proclamación anticipada de su mayoría de edad y finalizó con el golpe de Estado de septiembre de 1868. Los gobiernos estuvieron en manos de moderados y progresistas. Se distinguen diferentes etapas:
Etapas del Reinado de Isabel II
- La Década Moderada (1843-1854): Se promulgó la Constitución de 1845, que estableció la Soberanía Nacional compartida (entre la Corona y las Cortes), la restricción del sufragio (censitario), la cooperación entre el Congreso y el Senado, y la oficialidad de la religión católica. Se firmó el Concordato de 1851 con la Santa Sede. Este convenio buscaba reanudar las relaciones entre España y el Vaticano. La Iglesia renunció a reclamar sus bienes desamortizados, y el Estado, a cambio, suspendió la venta de bienes eclesiásticos y reconoció el catolicismo como religión oficial.
- Bienio Progresista (1854-1856): Destacaron dos leyes importantes: la Ley de Ferrocarriles (1855), que permitió la construcción de una red ferroviaria gracias al capital extranjero y las facilidades otorgadas; y la Desamortización de Madoz (1855), que afectó a los bienes de los municipios y del Estado.
- Gobierno de la Unión Liberal (1856-1868): La Unión Liberal fue una alianza entre los sectores más moderados de los progresistas y los más progresistas de los moderados. Se restableció la Constitución de 1845. Los unionistas intentaron reformas políticas y administrativas, pero los retornos de los moderados al gobierno solían implicar una involución. Se realizó una intervención militar en el Norte de África para defender las posesiones españolas, aunque sin resultados significativos a largo plazo. Se firmó el Pacto de Ostende (1866), una alianza entre progresistas, demócratas y unionistas, cuyo objetivo era acabar con la monarquía de Isabel II, percibida como conservadora y autoritaria. A esto se sumó una crisis financiera y de subsistencia que aumentó el descontento social y desembocó en la Revolución Gloriosa de 1868, que puso fin al reinado de Isabel II.
Las Desamortizaciones en España: Concepto, Objetivos, Procedimientos y Resultados
Desamortización: Proceso legislativo por el cual las tierras que estaban «amortizadas» (es decir, vinculadas a instituciones y no podían ser vendidas ni repartidas) pasaron a ser bienes nacionales y se pusieron en el mercado. Las desamortizaciones más importantes en España fueron la de Mendizábal (bienes eclesiásticos, 1836) y la de Madoz (bienes comunales y del Estado, 1855).
Los propietarios de estas tierras amortizadas eran la nobleza, el clero y los ayuntamientos. Estas tierras no podían ser vendidas ni repartidas debido a figuras como el Mayorazgo (para la nobleza), que impedía la división o venta de las posesiones familiares para preservar el patrimonio.
Objetivos de la Desamortización
La desamortización tuvo tres objetivos principales:
- Obtener recursos económicos para financiar la guerra carlista y reducir la Deuda Pública.
- Crear una clase media burguesa-rural afín al liberalismo, al permitirles acceder a la propiedad de la tierra.
- De manera implícita, reducir el poder económico y social de la Iglesia, que derivaba en gran medida de sus vastas posesiones.
Procedimiento de la Desamortización
El procedimiento llevado a cabo era el siguiente:
- Supresión de monasterios y conventos con menos de diez individuos.
- Adquisición de sus bienes por parte de la Nación.
- Venta de los bienes mediante subasta pública.
Resultados de la Desamortización
Los resultados no fueron los esperados. La venta no se rentabilizó al máximo. Los grandes beneficiados fueron los burgueses y nobles que pudieron adquirir grandes extensiones de tierra. Además, la Iglesia, en algunos casos, logró recomprar parte de sus bienes mediante testaferros.
El campesinado fue el gran perjudicado, al no poder acceder a la compra de las tierras que trabajaba y, en muchos casos, ver aumentados los impuestos que debía pagar a los nuevos propietarios. La desamortización no resolvió los problemas de la escasa productividad, el atraso del campo español ni impulsó el despegue de la industria.
Concepto Explicativo del Término Fueros
Los fueros (también conocidos como fueros locales o municipales) eran estatutos jurídicos aplicables en una determinada localidad, cuya finalidad era regular la vida local, estableciendo un conjunto de normas, derechos y privilegios otorgados por el rey, el señor de la tierra o el propio concejo. Fue un sistema de derecho local utilizado en la Península Ibérica a partir de la Edad Media, constituyendo la fuente más importante del Derecho altomedieval español. Al principio, estos fueros eran particulares de cada municipio, pero evolucionaron hasta la unificación de conjuntos de normas y privilegios en un mismo fuero, que incluso la monarquía podía conceder a varias localidades.
Características de los Fueros
- Eran conocidos como cartas pueblas.
- Constituían un derecho privilegiado, otorgando ventajas a las personas acogidas a ellos.
- Se basaban en el derecho consuetudinario (costumbre).
- En los primeros siglos de la Edad Media, el término «fuero» equivalía a la primera manifestación jurídica escrita.
La Cuestión Foral hasta el Siglo XIX
Durante el reinado de los Reyes Católicos (1469-1504), existían cinco reinos principales derivados de la Edad Media. A finales del siglo XV, Aragón y Castilla se unieron por matrimonio, formando una Unión Dinástica, aunque cada reino mantuvo sus propias instituciones, libertades y fueros.
Durante el reinado de los Austrias (siglos XVI y XVII), los fueros fueron respetados e incluso ampliados. De hecho, cada monarca de la Casa de Austria debía jurar los fueros en lugares como Gernika al asumir el trono.
A la muerte de Carlos II, se desencadenó la Guerra de Sucesión Española, que culminó con el triunfo de los Borbones y el establecimiento de su dinastía en España. Los Borbones, partidarios de la centralización, no comprendían la existencia de territorios con fueros propios. Eliminaron los fueros de la Corona de Aragón por haber apoyado a los Austrias en la guerra, mientras que los de Bizkaia, Álava y Gipuzkoa fueron respetados por su apoyo a la causa borbónica.
Consecuencias para los Fueros Vascos de las Guerras Carlistas
1ª Guerra Carlista (1833-1840)
Esta guerra finalizó con el Convenio de Vergara (agosto de 1839), que marcó el fin de la contienda. Fue firmado por el general Rafael Maroto en nombre de los carlistas y por el general Baldomero Espartero en nombre de los liberales.
Mediante este convenio, los carlistas se comprometían a finalizar la guerra, entregar sus armas y reconocer a Isabel II como reina. Por su parte, los liberales se comprometían a admitir en el ejército a los oficiales y soldados carlistas, y a defender los fueros vascos y navarros ante las Cortes Generales, siempre que estos no atentaran contra la Constitución.
Por tanto, durante este conflicto, los fueros no fueron suprimidos.
2ª Guerra Carlista (1848-1849)
Este conflicto no afectó a la Cuestión Foral, ya que su incidencia en el País Vasco fue limitada.
3ª Guerra Carlista (1873-1876)
Tras su final y con la Restauración borbónica de Alfonso XII, el sistema canovista eliminó la mayor parte de los fueros vasco-navarros. Se suprimieron todas las leyes forales, excepto las económicas, que siguieron vigentes bajo la denominación de «Concierto Económico».
Diferencias entre Formas de Gobierno
Todas son diferentes formas de gobierno.
- Democracia: Sistema de gobierno en el que la soberanía reside en el pueblo, que ejerce el derecho a elegir y controlar a sus gobernantes.
- Aristocracia: Forma de gobierno en la que el poder está en manos de los nobles o de las clases sociales altas.
- Oligarquía: Forma de gobierno en la que el poder es ejercido por un grupo reducido y privilegiado de personas.
- Burocracia: Sistema de organización o administración caracterizado por la racionalización de los procedimientos y la jerarquía, donde las decisiones se toman siguiendo normas preestablecidas.
- Oclocracia: Forma de gobierno en la que el poder es ejercido por la muchedumbre o la plebe, a menudo de forma desordenada y sin control.
Principios Generales de la Constitución de 1876
Fue la quinta Constitución española, promulgada en junio de 1876. Sus principales características fueron:
- Monárquica: Establecía la monarquía como forma de gobierno, con Alfonso XII como rey.
- Moderada: En contraste con la Constitución de 1869 (de carácter más progresista), esta Constitución buscaba un equilibrio y la moderación política.
- Eclecticismo: Carecía de gran originalidad, ya que tomaba principios de constituciones anteriores, buscando un consenso entre diferentes doctrinas políticas.
- Duración: Fue la Constitución de mayor vigencia en la historia de España, permaneciendo en vigor hasta 1931.
- Soberanía Compartida: Establecía la soberanía compartida entre las Cortes y el Rey, en la línea del liberalismo doctrinario.
- Amplias Atribuciones del Monarca: El rey mantenía el poder ejecutivo, la dirección del Ejército y ejercía un papel moderador.
- Sistema Bicameral: Establecía dos cámaras legislativas: el Congreso de los Diputados y el Senado.
- Sufragio: No determinaba el tipo de sufragio, remitiéndose a una Ley Electoral posterior que establecería el sufragio censitario y, a partir de 1890, el sufragio universal masculino.
- Amplias Declaraciones de Derechos Individuales: Reconocía una amplia gama de derechos individuales, cuya regulación se dejaba a la legislación ordinaria.
- Estado Confesional con Tolerancia: Establecía el catolicismo como religión oficial, aunque con cierta tolerancia para otros cultos, y la Iglesia católica mantenía privilegios.
- Estado Centralista: Se organizaba de forma centralista, con control sobre los ayuntamientos de más de 30.000 habitantes (alcaldes nombrados por el rey). Se restableció la unidad de códigos y la igualdad jurídica. Los fueros vascos fueron abolidos, estableciéndose la igualdad fiscal y el servicio militar, aunque se mantuvieron los conciertos económicos en estas provincias.
- Sufragio Censitario (inicial): La participación electoral en 1881 era de poco más del 5% de la población, excluyendo a las clases populares.
La Crisis del Sistema Canovista
La Crisis de 1898: La Guerra Hispano-Americana
El motivo fue la intervención de Estados Unidos en la guerra entre cubanos y españoles. El detonante fue la explosión del acorazado Maine el 15 de febrero de 1898. Fue una guerra corta que se extendió a Filipinas. El 10 de diciembre se firmó la Paz de París. Consecuencias:
- Pérdidas demográficas, territoriales (Cuba, Puerto Rico, Filipinas) y de prestigio para el sistema de la Restauración y el ejército.
- Fortalecimiento de los nacionalismos catalán y vasco.
- Pérdidas económicas para la industria catalana (por la pérdida de mercados coloniales).
- Potenciación de la presencia colonial en África (como compensación).
La Crisis de 1909: La Semana Trágica de Barcelona
Sucesos ocurridos en Barcelona y otras ciudades de Cataluña entre el 26 de julio y el 2 de agosto de 1909. El desencadenante fue el decreto del gobierno de Antonio Maura de enviar tropas de reserva a las posesiones españolas en Marruecos. Los sindicatos convocaron una huelga general. Consecuencias:
- Un centenar de muertos, numerosos heridos y destrucciones.
- Dura represión.
- Juicio sin garantías.
- Ejecución de Francisco Ferrer i Guàrdia.
La Crisis de 1917: La Huelga General
Motivada por el mal reparto social de los beneficios del boom económico de la Primera Guerra Mundial y la creciente inflación. Se manifestaron distintos aspectos:
- Crisis Militar: Creación de las Juntas de Defensa.
- Crisis Política: En Cataluña se constituyó una Asamblea de Parlamentarios que pidió un cambio de gobierno y la convocatoria de Cortes Constituyentes.
- Crisis Social: La Huelga General de 1917.
Consecuencias:
- Un centenar de muertos.
- Miles de detenidos.
- Dimisión del Presidente del Gobierno, Eduardo Dato.