Glosario de términos históricos del periodo de entreguerras

La Gran Depresión

La Gran Depresión fue una profunda crisis económica mundial que tuvo lugar entre 1929 y 1939. Se caracterizó por una caída de la producción industrial de casi un 40%, una crisis agraria, la reducción del comercio internacional, la destrucción del sistema monetario internacional, el aumento de la especulación y del proteccionismo, y el paro y la miseria en las grandes ciudades.

República de Weimar

La República de Weimar fue el nombre con el que se conoce el periodo de la historia de Alemania que va desde la caída del imperio, al final de la Primera Guerra Mundial, hasta la llegada al poder de Hitler, en 1933. Significó un intento, fracasado, de consolidar un régimen democrático en Alemania.

Gestapo y SS

La Gestapo (Geheime Staatspolizei) fue la policía política secreta del Estado Nacionalsocialista creada por Goering en 1933 para controlar, combatir y eliminar a todos los opositores del régimen hitleriano. Dependía del ministerio de Interior y extendió su acción a toda la tropa ocupada por los nazis durante la guerra.

Las SS (abreviatura de Schurzstaffee, grupo militar de protección) fueron una formación paramilitar que a partir de 1933 actuó como policía del partido nazi. Durante la guerra creó sus propias unidades de combate, que destacaron por su ferocidad y fanatismo.

Los 14 puntos de Woodrow Wilson

Los 14 puntos de Woodrow Wilson fueron principios sobre los que había de establecerse la paz después de la victoria en la Primera Guerra Mundial. Fueron la base de la firma del armisticio y el único documento público que recogía las intenciones de los vencedores. Sus principales propuestas eran el derecho de los pueblos a la autodeterminación y la defensa de un desarme general.

El auge y la crisis de la democracia en el periodo de entreguerras

Los tratados de paz que pusieron fin a la Primera Guerra Mundial dieron lugar a la aparición de nuevos estados en Europa. En la mayoría de ellos se establecieron gobiernos parlamentarios, a imitación de los países triunfadores: Reino Unido, Francia y Estados Unidos, con lo cual la democracia se convirtió en el régimen mayoritario entre las naciones europeas.

Los sistemas democráticos reconocieron los derechos individuales, las elecciones libres, la igualdad ante la ley y la libertad sindical. El sufragio universal masculino se extendió, a la vez que el sufragio universal femenino comenzaba a instaurarse.

Sin embargo, surgieron corrientes ideológicas que cuestionaron la democracia. Se crearon ligas de excombatientes, sobre todo en Alemania, Francia e Italia, que defendían posiciones antidemocráticas y que tuvieron cierta aceptación en algunos sectores sociales. En el lado opuesto a estas ideologías nacionalistas y autoritarias se situaba la extrema izquierda, que propugnaba la implantación de la dictadura del proletario. Se fundaron partidos comunistas, lo que provocó la división de la izquierda marxista y debilitó el movimiento obrero.

Los regímenes democráticos entraron pronto en crisis. Tras el acceso al poder de Mussolini en Italia en 1922, se multiplicaron las dictaduras: el general Primo de Rivera en España, el general Carmona en Portugal y en toda Europa oriental entre 1926 y 1938. La más importante de las dictaduras fue la de la Alemania nazi.

La Revolución de Octubre

La Revolución de Octubre fue un acontecimiento de gran importancia histórica que se produjo en Rusia en 1917. Lo que comenzó en febrero como una sublevación contra el absolutismo zarista, acabó a los pocos meses en la primera revolución socialista del mundo.

Lenin resumió en las llamadas Tesis de Abril sus ideas sobre el futuro de Rusia: paz inmediata e instauración de un gobierno de los soviets en sustitución del gobierno provisional. Lenin huyó a Finlandia y muchos dirigentes fueron detenidos.

Durante el verano de 1917, el partido bolchevique presentó su programa, claramente revolucionario: fin de la guerra, reparto de la tierra, control obrero sobre la producción y el comercio y nacionalización de la banca y de la gran industria. El general Kornilov intentó un golpe de fuerza para constituir un nuevo gobierno que asegurase el orden.

La degradación de la situación decidió a Lenin a pasar a la acción revolucionaria. Regresó clandestinamente del exilio y convenció al comité central de su partido de una insurrección armada para derrotar a Kerensky y tomar el poder.

La misma noche, Lenin, con la intención de legitimar la insurrección, ofreció el poder al II Congreso de los Soviets de Rusia, reunido en la capital. Los mencheviques y los miembros del partido Socialista Revolucionario abandonaron el congreso, denunciando el golpe de estado.

El Congreso de los Soviets eligió el nuevo gobierno, denominado Consejo de Comisarios del Pueblo, y a Lenin como su presidente. La Revolución bolchevique había triunfado.

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