Qué implicación tiene la aceptación del sur sufragio universal para la burguesía

INTRODUCCIÓN

La restauración borbónica en la figura de Alfonso XII se produjo en un contexto internacional de estabilidad y tendencia hacia la democracia. Cánovas del Castillo, el artífice detrás de su sistema político, recoge las bases de este en el manifiesto de Sandhurst: un régimen  conservador basado en la alternancia pacífica en el poder del partido conservador y liberal, a través de corrupción y manipulación electoral, logrando una etapa de estabilidad política, ideológica y militar. Cánovas del Castillo pretendía una restauración de la monarquía por medios constitucionales pero Martínez Campos se adelantó proclamando a Alfonso XII en Sagunto (Diciembre de 1874). Serrano abandonó el ejecutivo y Cánovas tomó el relevo, instaurando una regencia que se encargaría de elaborar la constitución sobre la que se asentará el nuevo sistema.

DESARROLLO

Fundamentos de la Restauración y Constitución de 1876

El sistema de la restauración se basa en el modelo bipartidista británico del turnismo (la alternancia pacífica en el poder de conservadores y liberales) y sobre las bases de la Constitución de 1876. La Constitución de 1876 es un texto flexible de carácter moderado y estaba basada en la de 1845, aunque con algunos derechos de la de 1869. Establece una soberanía compartida Rey-Cortes, sin una división de poderes clara, un parlamento bicameral (Congreso y Senado), sufragio censitario hasta 1890 (año en que se establece el sufragio universal masculino) y confesionalidad religiosa católica, aunque hay libertad privada de culto. Los derechos no quedan garantizados de forma tan sólida y se realizó un recorte de libertades respecto a la Constitución del 69, después ampliadas en 1890. Cánovas defenderá la existencia de una constitución histórica o interna que debía ser el fundamento de toda Constitución y situarse por encima de cualquier partido político. 

Turnismo, Bipartidismo Y Caciquismo

El sistema de la Restauración se basa en el turno de los partidos dinásticos: Dos partidos principales que recogen las diferentes posturas se alternan en el poder y en la oposición. Cuando un partido en el gobierno pierde la confianza del Rey o de las Cortes, el Rey cambia de Gobierno, disuelve las Cortes y convoca elecciones que, obviamente, debe ganar el partido en la oposición. Tras salir victoriosos en estas (fraude electoral), el partido elegido renueva el congreso y demás cargos de poder, mientras que el contrario pasa a la oposición. El sistema estaba controlado por las altas clases gobernantes (oligarquía) y para asegurar su funcionamiento se utilizaban el fraude electoral (varios votos por persona, quemar urnas, voto de fallecidos, etc) además del caciquismo (terratenientes, funcionarios, o curas influían sobre la población para manipular su voto) y el encasillamiento (listado de candidatos que han de ser elegidos en cada circunscripción para asegurar la mayoría parlamentaria al partido del gobierno). Algunos factores que explican su éxito son: el desinterés y alejamiento pueblo-política, atraso económico, población aislada y el medio rural, analfabetismo y la dependencia del campesino hacia el terrateniente. Esto dejaba sin posibilidades de participación a republicanos, socialistas y nacionalistas.

Partidos políticos

Los partidos políticos eran grupos de presión con redes de influencia desde Madrid a los caciques  locales. El sistema excluía a terceros partidos y se basaba en:

– Partido conservador, al frente de Cánovas del Castillo (posteriormente Silvela, Dato, Maura). Heredero del partido moderado y unionistas de derecha. Tiene los apoyos de la alta burguésía, aristocracia, ejército, terratenientes y altos funcionarios, sobre todo en el sur y el Levante español. Defiende el recorte de libertades, sufragio censitario, orden, tradicionalismo y centralismo. Lograron consolidar el sistema de la Restauración, crear la Constitución de 1876, apartar a los militares de la vida pública y finalizar los conflictos carlista y cubano.


-Partido liberal, al frente de Sagasta (posteriormente Martínez Campos, Canalejas). Heredero del partido progresista, unionistas de izquierda y demócratas de derecha. Tiene los principales apoyos en la media burguésía, comerciales y obreros industriales, sobre todo en las ciudades. Defiende el sufragio universal, amplias libertades, jurado popular, Estado menos centralista y menos clerical. Lograron la elaboración del Código Civil y el Código de Comercio, la aprobación de la Ley de Asociaciones, la Ley del Jurado y la Ley de Sufragio Universal en 1890.

ETAPAS DE LA RESTAURACIÓN: Alfonso XII (1874-1885)

El reinado de Alfonso XII supuso la pacificación militar e ideológica y consolidó el bipartidismo:

-Fin de la guerra carlista y supresión de fueros vascos.

-Fin de la guerra en Cuba (Paz de Zanjón, 1878) prometiendo una cierta autonomía, nunca concedida

-Pacificación ideológica con la Constitución de 1876 y el bipartidismo.

-El modelo centralista implantado por Cánovas será el origen de sus principales problemas: crisis de 1898 y nacimiento de los nacionalismos periféricos.

ETAPAS DE LA RESTAURACIÓN: REGENCIA DE MARÍA Cristina (1885-1902)

Tras la muerte de Alfonso XII en 1855, Sagasta y Cánovas firman el Pacto del Pardo comprometíéndose a mantener el turno pacifico para garantizar la estabilidad, sistema que funcionaría hasta 1898. Tras la firma del acuerdo, Sagasta accedíó al poder dando comienzo al conocido como Parlamento Largo en 1890, periodo durante el cual se aprobaron leyes que aportaron democratización al sistema y permitieron la legalización de sindicatos y partidos políticos (libertad de reuníón, expresión, de prensa, sindical y ley de Sufragio universal). Los gobiernos de Sagasta y Cánovas, cada vez más cortos e inestables, tuvieron que hacer frente a los siguientes problemas:

-Conflicto y pérdida colonial de 1898, que acarrea crisis económica, financiera, en el ejército, etc.

Supuso una crisis de conciencia nacional.

-Creación de partidos nacionalistas vascos (PNV) y catalanes (Lliga) que buscan autogobierno frente

al centralismo.

-Movimiento obrero, a través de partidos políticos (PSOE) y la vía sindical y revolucionaria.

-Críticas al régimen de la restauración con propuestas regeneracionistas.

ETAPAS DE LA RESTAURACIÓN: CRISIS DE 1898

Cánovas llevó a cabo políticas internacionales de neutralidad para conservar las posesiones de Filipinas, Puerto Rico, Cuba y puntos del norte de África. Sin embargo, los intereses económicos de terceros países y la burguésía colonial, junto con los escasos recursos económicos y la débil Marina de España acabarían desembocando en la pérdida de todas las colonias en 1898 en un contexto internacional de expansión imperialista. Esto supondría un duro golpe para la política interior española y la conciencia nacional.

CONCLUSIÓN

La crisis del 98 deja al descubierto todos los males de España: miseria, atraso, sistema político ficticio, nacionalismos en alza y tensiones obreras y campesinas. A estos problemas se les tratará de dar solución a través del regeneracionismo de Joaquín Costa pero sus reformas fracasarán debido a la oposición de las altas clases sociales junto a la rigidez del sistema y su inestabilidad tras la muerte de Cánovas y Sagasta. Las bases del sistema canovista se verán sacudidas con la crisis de 1909 y la de 1917, que darán paso a una serie de ineficaces gobiernos de concentración que no pudieron evitar el ascenso al poder en 1923 del “Cirujano de Hierro”, personificación del fin definitivo del sistema de la restauración: Miguel Primo de Rivera.

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