Creación del Estado Franquista
La España de 1939, una vez terminada la guerra, era una nación arrasada material, demográfica y emocionalmente. El nuevo Estado franquista se caracterizará por la centralización absoluta del poder en la figura del Gral. Franco: persiguiendo a toda oposición, estableciendo una economía autárquica además de ir adaptando el régimen a las diferentes coyunturas internacionales (fascismo, neutralidad en la II Guerra Mundial, o aislamiento de postguerra).